Dios contesta la oración del Cristiano fiel

Bosquejos Biblicos…. Bosquejos para Predicar

1 Crónicas 4:9-10 “…Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos. Al cual su madre llamó Jabes diciendo: por cuanto lo di a luz en dolor. E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡oh, si me dieras bendición, y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! y le otorgó Dios lo que pidió…“

INTRODUCCIÓN:

1. Jabes era descendiente de la tribu de Judá.
2. La biografía de Jabes es de las más pequeñas de los personajes que menciona la Biblia.
3. El nombre de Jabes significa dolor.
4. Jabes fue más ilustre (famoso o digno) que sus hermanos.
5. Dios escuchó la oración de Jabes.
6. Dios le concedió a Jabes lo que pidió.

La palabra de Dios nos enseña cosas muy grandiosas en esta pequeña biografía; este libro primero de crónicas, comienza sus primeros cuatro capítulos con largas listas de genealogías, pero de pronto al llegar al capítulo cuatro versículo nueve, parece como que el escritor se detiene un poco para narrarnos esta breve pero importantísima historia biográfica.

1. Veamos lo más destacable de esta biografía:

• A) Jabes fue más ilustre (famoso o digno) que sus Hermanos. ¿por qué?
• B) Su madre le puso por nombre Jabes, porque le dio a luz en dolor. ¿Por qué en dolor? ¿En qué afectaría esto a Jabes?
• C) También podemos ver en la oración de Jabes, que él reconocía la omnipotencia de Dios, y tenía gran fe en él.
• D) Dios le otorgó a Jabes lo que pidió. ¿Por qué?

2. ¿Cuáles eran las necesidades o carencias de Jabes? Esto lo podemos ver a través de sus peticiones a Dios.

• A) En primer lugar podemos observar, que Jabes reconocía que necesitaba las bendiciones de Dios.
• B) Consideraba que su territorio no era insuficiente
• C) Sentía que necesitaba que la mano de Dios estuviera con él para que las circunstancias le fueran propicias.
• D) Necesitaba del cuidado de Dios en su vida, para que lo librara del mal, para que no lo dañara.

APLICACIÓN:

A) ¿Cuántas veces, tanto usted como yo, sentimos que nos hacen falta las bendiciones de Dios? Sentimos que estamos solos, sentimos que las cosas no nos salen bien, y esta situación nos hace sentirnos tristes, frustrados, cansados, amargados y hasta decepcionados.

B) Otras veces no sentimos que la mano de Dios esté con nosotros, y  entonces nos sentimos inseguros, temerosos de que algo malo nos pueda   suceder a nosotros o a nuestros seres queridos; tenemos miedo de que  alguien o algo nos pueda dañar, por no sentir la protección de Dios.

C) Cuantas veces hay que tenemos algunos deseos espirituales o  materiales; necesitamos que Dios ensanche nuestro territorio, ya sea en   el aspecto espiritual o material. Muchas veces necesitamos que Dios bendiga también nuestra economía familiar, para alimentar bien a nuestra familia, darles estudio, vestido, buena casa, y ¿porque no decirlo? hasta un buen carrito y paseos vacacionales.

3. Déjeme decirle que probablemente algunas de estas cosas sentía Jabes.

A) Quizás Jabes era el más opacado de sus hermanos, quizás era también el más pobre, con menos territorio que los demás; y sentía que la bendición de Dios no estaba con el y por lo tanto se sentía muy propenso a que el mal lo alcanzará.

B) Pero cuando Jabes oró al Dios de Israel, (que es el mismo Dios de nosotros, único y verdadero) hubo un cambio asombroso y maravilloso en su vida ¡Dios cambió radicalmente toda su situación personal! ¡Dios le otorgó lo que pidió! Es de suponerse que Jabes como Israelita que era, conocía perfectamente la historia del pueblo de Israel; como nuestro Dios los liberó de la esclavitud de Egipto, y sabía también de todas las señales y milagros que Dios hizo en Egipto y a través del desierto, así como también en la tierra de canaán; y cómo Dios cumplió su promesa de darles como heredad a los hebreos la tierra que les había prometido.  Muy probablemente al recordar Jabes la omnipotencia de Dios, esto le animó en gran manera para orar a Dios con un corazón lleno de fe, ¡y como lo bendijo Dios abundantemente y cambió totalmente su situación personal!

Conclusión:

¿En donde estuvo la clave para que Dios obrará de tal manera escuchando y accediendo a la oración de Jabes? La palabra de Dios nos enseña cuatro elementos fundamentales para que Dios escuche nuestras oraciones

• 1. Acercarnos a Dios con un corazón limpio de pecado (Juan 9:31) “…Y sabemos que Dios no oye a los pecadores; pero si alguno es temeroso de Dios, y hace su voluntad, a ese oye…”
• 2. Tener fe completamente (y únicamente) en Dios. (Santiago 1:6-7) “…Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. – no piense pues quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor…”
• 3. Pedir en el nombre de nuestro señor Jesucristo. (Juan 14:14) “…Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré…”
• 4. Pedir conforme a la voluntad de Dios y permanecer fieles a sus mandamientos. (Hebreos 12:14) “…Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor…”

© 2012. Eduardo Licett