Estudios Biblicos
Prédica de Hoy: Los falsos apóstoles y profetas
Estudios Bíblicos Texto Bíblico: 1 Corintios 1:1
I. ¿Apóstoles, obispos o falsos maestros?
Al hablar en este versículo es muy específico en su llamado: llamado a ser apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios.
Pero, ¿cómo surge el llamamiento de Pablo? Hmmm, en Hechos se relata la manera de como Pablo, conocido como Saulo de Tarso, perseguía a la iglesia, también conocida como los del camino en ese tiempo.
Hechos 9 relata la manera de cómo Pablo se convierte a ese mismo camino que él había perseguido, y cuando eso sucede el Señor se le revela a Ananías y le habla algo muy específico.
En el versículo 15 le dice, luego de Ananías contender debido a la persecución que Saulo de Tarso había desatado contra los cristianos (vs. 13-14), que El ¡lo había escogido para llevar el evangelio a los gentiles, reyes e hijos de Israel, pero que le iba a mostrar cuán necesario era padecer en su nombre!
Los falsos apóstoles y profetas, ¿qué significa ser apóstol?
Ahora hagamos un análisis de lo que significa ser apóstol: La palabra apóstol viene de la palabra griega “apostolos”, que quiere decir “enviado por”. Pero esta palabra tiene un significado muy en especial, es un nombramiento directo hacia la persona que es nombrada.
Es como cuando a usted le dan un ascenso en su trabajo, que su jefe directamente le nombra, así pasa con los apóstoles, su nombramiento directo viene de el jefe de arriba, a quien mi alma adora y rinde toda reverencia, Jesucristo, como le paso a pablo.
En otras palabras, el mismo señor los escoge en nominación directa. No sólo eso, esta gente nunca detuvo su andar, sino que iban de ciudad en ciudad predicando el evangelio, nunca quietos.
Un Apóstol es enviado a las naciones por el Señor a anunciar el evangelio, respaldado por milagros, prodigios y señales y el Poder del Espíritu Santo. Y por último, pero creo que la señal a la cual más atención debemos prestarle, Pablo mismo habla de sufrir en 2 Corintios 11:23-29: Estar preso, azotado, en peligro de muerte, enfermo, cansado, sin dormir y desvelado, con hambre, desnudo, y otras más.
Así que vemos que el camino no es fácil. Y analicemos la trascendencia histórica de los apóstoles: Pablo y Jacobo decapitados, Pedro crucificado al revés, patas arriba, y todos con muertes dolorosas.
El que no sufrió muerte dolorosa, pero lo echaron ¡en una olla de aceite hirviendo antes de desterrarlo! fue Juan, y él no murió para que se cumpliera la palabra que Cristo dio en el último capítulo de el evangelio de Juan sobre que él no moriría como los demás.
Falsos apóstoles y profetas, ¿Qué tenemos hoy en día?
Pero, ¿que tenemos hoy día? Primero, “apóstoles” encerrados en las cuatro paredes de sus iglesias, no van a la calle, y si lo hacen lo hacen en carpas con aire acondicionado.
