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Esclavos de lo que decimos y dueños de lo que callamos

Ecclesiastes 3:7b – tiempo de callar, y tiempo de hablar;

Proverbios 18:21 – La muerte y la vida están en poder de la lengua,

Y el que la ama comerá de sus frutos.

“Las palabras son como las abejas, tienen miel y aguijón.”  Proverbio Suizo

Proverbios 12:18  – Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada;  Mas la lengua de los sabios es medicina.

¿Hermano por qué no vino? ¡Está usted faltando mucho últimamente! (DANDO MUERTE)

¡Hermano que bueno que vino! me da gusto que pudiera venir. (DANDO VIDA)

Proverbios 15:4  – La lengua apacible es árbol de vida;   Mas la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu.

Palabras tan fáciles y breves como las siguientes tienen un efecto impactante en nuestros interlocutores:

¡Gracias!
Perdón
Disculpa me
Te extrañe
Lo siento, me equivoque
Que bueno que estés bien
Que bien le va ese color
Que bonita se le ve esa blusa

Salmos 140:3  – Aguzaron su lengua como la serpiente;   Veneno de áspid hay debajo de sus labios.

Háblame Para que yo te conozca. Seneca

Mateo 12:34   – ¡Generación de víboras!  ¿Cómo podéis hablar lo bueno,  siendo malos?  Porque de la abundancia del corazón habla la boca.

Santiago 3:1,2  – Hermanos míos,  no os hagáis maestros muchos de vosotros,  sabiendo que recibiremos mayor condenación. Porque todos ofendemos muchas veces.  Si alguno no ofende en palabra,  éste es varón perfecto,  capaz también de refrenar todo el cuerpo.

Es mejor ser rey de tu silencio que esclavo de tus palabras. Shakespeare

Una cometa se puede recoger una vez echada a volar. Pero las palabras jamás se podrán recoger una vez que han salido de nuestra boca.

Eclesiastés 5:4  – Cuando a Dios haces promesa,  no tardes en cumplirla;  porque él no se complace en los insensatos.  Cumple lo que prometes.

Eclesiastés 5:5  – Mejor es que no prometas,  y no que prometas y no cumplas.

Eclesiastés 5:6  – No dejes que tu boca te haga pecar,  ni digas delante del ángel,  que fue ignorancia.  ¿Por qué harás que Dios se enoje a causa de tu voz,  y que destruya la obra de tus manos?

Mateo 5:33-37 Además habéis oído que fue dicho a los antiguos:  No perjurarás,  sino cumplirás al Señor tus juramentos.- Pero yo os digo:  No juréis en ninguna manera;  ni por el cielo,  porque es el trono de Dios;ni por la tierra,  porque es el estrado de sus pies;  ni por Jerusalén,  porque es la ciudad del gran Rey. Ni por tu cabeza jurarás,  porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. Pero sea vuestro hablar:  Sí,  sí;  no,  no;  porque lo que es más de esto,  de mal procede.

Somos esclavos de lo que decimos y dueños de lo que callamos.

Santiago 5:12  – Pero sobre todo,  hermanos míos,  no juréis,  ni por el cielo,  ni por la tierra,  ni por ningún otro juramento;  sino que vuestro sí sea sí,  y vuestro no sea no,  para que no caigáis en condenación.

Cuando no pensamos lo que decimos, decimos lo que realmente pensamos.

Santiago 1:19  – Por esto,  mis amados hermanos,  todo hombre sea pronto para oír,  tardo para hablar,  tardo para airarse; porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios.

“No hay cosa más difícil, bien mirado, que conocer un necio si es callado”.  Alonso de Ercilla. Poeta y guerrero español.

Proverbios 17:28  – Aun el necio,  cuando calla,  es contado por sabio;   El que cierra sus labios es entendido.

Hay silencios que hieren pero hay palabras que curan.

Las palabras suaves son argumentos firmes.

Proverbios 15:1 – La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor.

Juan  4:16 – Jesús le dijo:  Ve,  llama a tu marido,  y ven acá.

Juan  4:17 – Respondió la mujer y dijo:  No tengo marido.  Jesús le dijo:  Bien has dicho:  No tengo marido;

Juan  4:18 – porque cinco maridos has tenido,  y el que ahora tienes no es tu marido;  esto has dicho con verdad.

Juan  4:19 – Le dijo la mujer:  Señor,  me parece que tú eres profeta.

Juan  8:10 – Enderezándose Jesús,  y no viendo a nadie sino a la mujer,  le dijo:  Mujer,  ¿dónde están los que te acusaban?  ¿Ninguno te condenó?

Juan  8:11 – Ella dijo:  Ninguno,  Señor.  Entonces Jesús le dijo:  Ni yo te condeno;  vete,  y no peques más.

En las muchas palabras no falta pecado

“Se necesitan dos años para aprender a hablar pero 70 para aprender a callar.” Hemingway

“Con buenas palabras se puede negociar, pero para engrandecerse se requieren buenas obras.”  Lao-tsé (570 aC-490 aC) Filósofo chino.

El chisme

La palabra es mitad de quien la pronuncia, mitad de quien la escucha.

Michel Eyquem de Montaigne (1533-1592) Escritor y filósofo francés.

Proverbios 18:8 – Las palabras del chismoso son como bocados suaves,   Y penetran hasta las entrañas.

Si alguien predica un sermón excelente, talvez el mejor que haya usted escuchado en su vida, solo será la mitad de todo. ¿Qué hará Ud. Con el mensaje que ha escuchado?

“Una bala puede matar al cuerpo, dejarlo sin vida pero una sola palabra puede desgarrar el alma y matarle, dejándola aún con vida y sufriendo. “

La coherencia consiste en poner , tus palabras y tus hechos en equilibrio. Pablo Ortega

Santiago 1:22 – Pero sed hacedores de la palabra,  y no tan solamente oidores,  engañándoos a vosotros mismos.

Santiago 1:23 –  Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella,  éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural.

Santiago 1:24 –  Porque él se considera a sí mismo,  y se va,  y luego olvida cómo era.

Santiago 1:25 –  Mas el que mira atentamente en la perfecta ley,  la de la libertad,  y persevera en ella,  no siendo oidor olvidadizo,  sino hacedor de la obra,  éste será bienaventurado en lo que hace.

Santiago 2:14 – Hermanos míos,  ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe,  y no tiene obras?  ¿Podrá la fe salvarle?

Santiago 2:15 – Y si un hermano o una hermana están desnudos,  y tienen necesidad del mantenimiento de cada día,

Santiago 2:16 –  y alguno de vosotros les dice:  Id en paz,  calentaos y saciaos,  pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo,  ¿de qué aprovecha?

Santiago 2:17 – Así también la fe,  si no tiene obras,  es muerta en sí misma.

“El único medio de salir ganando de una discusión es evitarla”.  Dale Carnegie. Escritor y profesor

Tito 3:9 –  Pero evita las cuestiones necias,  y genealogías,  y contenciones,  y discusiones acerca de la ley;  porque son vanas y sin provecho.

No debe de ser contencioso

A palabras de borrachos oídos de cantinero.

Los clavos

Érase una vez un chico con mal carácter. Su padre, para darle una lección, le dio un saco lleno de clavos y le dijo que clavara uno, en la verja del jardín, cada vez que perdiera la paciencia o se enfadara con alguien.

El primer día clavó 37 clavos. Durante las semanas siguientes se concentró en controlarse y día a día disminuyó la cantidad de clavos nuevos en la verja. Había descubierto que era más fácil controlarse que clavar clavos.

Finalmente llegó un día en el que ya no clavó ningún nuevo clavo. Entonces fue a ver a su padre para explicárselo.

Su padre le dijo que era el momento de quitar un clavo por cada día que no perdiera la paciencia. Los días pasaron y finalmente el chico pudo decir a su padre que había quitado todos los clavos de la valla. El padre condujo a su hijo hasta ella y le dijo:

– Hijo mío, te has comportado muy bien, pero mira todos los agujeros que han quedado en la empalizada. Ya nunca será como antes. Cuando discutes con alguien y le dices cualquier cosa ofensiva le deSantiago una herida como ésta. Puedes clavar una navaja a un hombre y después retirarla, pero siempre quedará la herida. No importan las veces que le pidas perdón, la herida permanecerá. Una herida provocada con la palabra hace tanto daño como una herida física. Los amigos son joyas raras de encontrar; están listos para escucharte cuando tienes necesidad, te sostienen y te abren su corazón.

Salmos 64:2 – Escóndeme del consejo secreto de los malignos,

De la conspiración de los que hacen iniquidad,

Salmos 64:3 – Que afilan como espada su lengua;

Lanzan cual saeta suya,  palabra amarga,

Salmos 64:4 – Para asaetear a escondidas al íntegro;

De repente lo asaetean,  y no temen.

Hay que conectar el cerebro antes de echar andar la lengua

Todos los órganos humanos se cansan alguna vez, salvo la lengua. (Konrad Adenauer)

Somos culpables de las palabras que decimos y también de las que no decimos

La confesión

El que se avergüence de mí

Negación de Pedro

El consejo a nuestros hijos

David no reprendió a su hijo y pagó las consecuencias.

2 Samuel 13:21  – Y luego que el rey David oyó todo esto,  se enojó mucho.

Proverbios 13:24 – El que detiene el castigo,  a su hijo aborrece; Mas el que lo ama,  desde temprano lo corrige.

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