Bosquejos Bíblicos
Prédica de Hoy: La influencia de los padres
Bosquejos Bíblicos Lectura Bíblica: Génesis 25:22-28
INTRODUCCIÓN
Cuenta el evangelista guatemalteco Pérez, que era huérfano de madre, que en cierta ocasión cuando era niño intentó acercarse a su padre, lo tomo por sorpresa y lo abrazo, su padre estaba sentado en el escritorio trabajando y el abrazo del niño lo sorprendió e inmediatamente lo enojó, le dijo “quítate, no ves que estoy trabajando, vete a jugar con tus juguetes, no me estorbes”.
Ese día el niño Pérez juró en su pequeño corazón que se vengaría de su padre. Cuando se hizo hombre se unió a las filas guerrilleras e incluso llegó a robar los ganados de su padre.
I. LOS PADRES NO PUEDEN TENER HIJOS FAVORITOS (verss. 27-28)
A. Verss. 27-28 “Y crecieron los niños, y Esaú era diestro en la caza, hombre del campo; pero Jacob era varón quieto, que habitaba en tiendas. Y amo Isaac a Esaú, porque comía de su casa; mas Rebeca amaba a Jacob.“
Lamentablemente los padres suelen tener hijos favoritos, a veces porque el niño tiene un carácter dócil o porque es niña o niño, porque se parece a uno de los padres, por diferentes razones.
B. Tener favoritismo: significa tratar de una manera especial a uno de los hijos, menospreciando al otro hijo a veces sin darse cuenta. Dando regalos, dinero, ropa, abrazos, besos, sacándolo a pasear, diciéndole halagos, etc.
C. Los padres tiene que mostrar amor a sus hijos, no solo dando comida y educación, no es suficiente solo con traerlos a la iglesia. Tiene que hablar, pasar tiempo, interesarse en sus cosas. Decirle lo importante y lo valiosos que son.
II. LOS HIJOS FAVORITOS DE LOS PADRES NO COMPARTEN NI SE AYUDAN (verss. 29-33).
A. Verss. 29-33 “Y guiso Jacob un potaje; y volviendo Esaú del campo cansado, dijo a Jacob: te ruego que me des de comer de ese guiso rojo, pues estoy muy cansado… Y Jacob respondió: Véndeme en este día tu primogenitura. Entonces dijo Esaú: He aquí yo me voy a morir ¿para qué, pues, me servirá la primogenitura? Y dijo Jacob: Júramelo en este día. Y él le juro, y vendió a Jacob su primogenitura.“
Los padres que tienen hijos favoritos dañan el carácter de amistad, compañerismo, ayuda mutua que deberían tener los hermanos. Los hijos se vuelven egoístas y mezquinos.