Bosquejos Bíblicos | Llevado al desierto
Explora este bosquejo bíblico basado en 2 Corintios 10:3-5
Introducción
Si vivimos un ataque del enemigo y tratamos de solucionarlo en la carne enfrentamos al enemigo en su territorio y vamos a perder. La única manera de derrotarlo es desde el monte de Dios. Las armas con que luchamos no son del mundo, sino que tienen poder divino para derribar fortalezas!
2 Corintios 10:3-5 NTV “Somos humanos, pero no luchamos como lo hacen los humanos. Usamos las armas poderosas de Dios, no las del mundo, para derribar las fortalezas del razonamiento humano y para destruir argumentos falsos. Destruimos todo obstáculo de arrogancia que impide que la gente conozca a Dios. Capturamos los pensamientos rebeldes y enseñamos a las personas a obedecer a Cristo”.
Lucas 10:19 NTV, “Miren, les he dado autoridad sobre todos los poderes del enemigo; pueden caminar entre serpientes y escorpiones y aplastarlos. Nada les hará daño.”
Dios nos dio autoridad a la iglesia, por eso no nos rebajemos a pelear al nivel del enemigo
- Santiago 4:7 NTV “Así que humíllense delante de Dios. Resistan al diablo, y él huirá de ustedes”
- Efesios 6:13 NTV “Por lo tanto, pónganse todas las piezas de la armadura de Dios para poder resistir al enemigo en el tiempo del mal. Así, después de la batalla, todavía seguirán de pie, firmes”.
A un lado está el ejército del diablo, y al otro el ejército del Señor.
La Biblia habla claramente del ejército del diablo, cuyo capitán y líder es Satanás
En esta batalla que estamos librando contra el enemigo, ¡estamos en cuenta regresiva! Porque el enemigo se ha logrado infiltrar en nuestras filas, ¡hay soldados que han caído! Hay soldados que han sido terriblemente lastimados, por ello hoy quiero hacer el llamado a este ejército aquí presente a ponernos en guerra, somos hacedores, llamados a hacer proezas para el Señor, y nuestro único enemigo es el diablo y sus demonios.
No es una opción ponernos la armadura, “si quieren…”, es una orden del Señor.
¿Cuál debe ser tu meta? Que cada batalla que enfrentes saldrás más fortalecido en Dios, y que cada batalla que enfrentes al final quedes en pie, puede pasar lo que pase, pero Dios prometió que al final quedaremos firmes, para seguir conquistando todo lo que nos prometió!
En toda guerra hay vencedores y vencidos, ¿de qué lado quieres estar?
¿Cuáles son nuestras armas?
I. Cinturón de La verdad
(Efesios 6:14 NTV “Defiendan su posición, poniéndose el cinturón de la verdad…”)
-La mentira es del diablo, la verdad es de Dios.
Juan 8:44 “Pues ustedes son hijos de su padre, el diablo, y les encanta hacer las coas malvadas que él hace. Él ha sido asesino desde el principio y siempre ha odiado la verdad, porque en él no hay verdad. Cuando miente, actúa de acuerdo con su naturaleza porque es mentiroso y el padre de la mentira”
¿Por qué es tan importante el cinturón de la verdad? Porque el diablo es el padre de toda mentira, porque el diablo es engañador.
- 2 Corintios 11:3, Eva fue engañado por la astucia
- Apocalipsis 12:9, la serpiente antigua llamada diablo o Satanás engaña al mundo entero.
Como el mundo entero está bajo el maligno, debemos ponernos el cinturón de la verdad para tener autoridad y vencerlo.
El fundamento de todo lo que hacemos debe estar en la verdad.
Un cristiano pierde su posición de autoridad cuando cree las mentiras del enemigo pero también cuando dice mentiras.
Proverbios 23:23 “compra la verdad y no la vendas…”
No creas más las mentiras del enemigo! El enemigo ataca durísimo al hijo de Dios que miente. Es difícil pero se puede hablar y andar solamente en la verdad!
II. Coraza de La justicia de Dios
(Efesios 6:14 NTV “…y la coraza de la justicia de Dios”)
No la justicia humana, sino la de Dios. ¡En Cristo fuimos declarados justos! Esto es proclamar nuestra posición en Cristo.
Romanos 5:1 “Por lo tanto, ya que fuimos declarados justos a los ojos de Dios por medio de la fe, tenemos paz con Dios gracias a lo que Jesucristo nuestro Señor hizo por nosotros”.
Debemos demostrar lo que somos en Cristo. Mateo 3:8, que se vea lo que sos en Cristo por medio de tu forma de vivir. Romanos 13:12, pónganse la armadura resplandeciente de la vida recta.
III. Calzado del evangelio de La paz
(Efesios 6:15 NTV “Pónganse como calzado la paz que proviene de la Buena Noticia a fin de estar completamente preparados”)
Del enemigo viene la opresión, la tormenta, la crisis. De Dios viene la paz.
Romanos 16:20 NTV “El Dios de paz pronto aplastará a Satanás bajo los pies de ustedes. Que la gracia de nuestro Señor Jesús sea con ustedes”
Nuestros pies son importantes en esa cuenta regresiva que tiene esta guerra. La paz es un don de Dios, pero una tarea de todos nosotros. Es nuestra lucha convertirnos en hacedores de paz! En la casa, lugar de estudio, trabajo. Es invocando al Dios que trae paz aún en medio de la tormenta que lo haremos!
Ponte los calzados de paz! Y anda anúnciala! Basta de callarla!
IV. Escudo de La fe
(Efesios 6:16 NTV “Además de todo eso, levanten el escudo de la fe para detener las flechas encendidas del diablo”)
Las flechas que te tira el enemigo son dardos que anulan tu fe. Las palabras de Dios son para aumentar tu fe. El enemigo nos conoce y sabe cuál es el dardo que puede destrozarnos, y él lo va hacer. El diablo es mentiroso y sucio, ¿Qué harás cuando te lanza sus dardos?
Los dardos pueden ser calumnias, chismes, juicios, etiquetas, envidias, maldición que las personas ponen sobre nosotros. Cuando eso sucede debemos levantar el escudo de la fe para que no nos afecte. Si los dardos del enemigo te clavaron el corazón es muy difícil sanar eso! Si no te pusiste el escudo de la fe los dardos del enemigo penetrarán en tu vida.
Gente con duda, con temor… gente a la cual los dardos del enemigo clavaron.
- Tu mente y corazón no deben ser una pocilga de Satanás.
- Sin fe nada es posible, con fe no hay imposibles.
- Tu futuro es tan brillante como tu fe
V. Casco de La salvación
(Efesios 6:17 NTV “Pónganse la salvación como casco…”
La perdición viene del diablo, la salvación sólo de Dios. Un soldado cubre su cabeza no solo para protegerse sino como señal de que está bajo autoridad. El yelmo de la salvación es como una sombrilla que nos protege.
VI. Espada del Espíritu
(Efesios 6:17 NTV “…y tomen la espada del Espíritu, la cual es la palabra de Dios.
Con las otras piezas de la armadura nos protegemos, pero con la espada del Espíritu, atacamos.
Efesios 6:18 NTV “Oren en el Espíritu en todo momento y en toda ocasión. Manténganse alerta y sean persistentes en sus oraciones por todos los creyentes en todas partes”.
Así como la gladius romana, la espada del Espíritu puede ayudarnos a vencer a nuestros enemigos, incluyendo al más letal de todos: nuestra innata debilidad humana. Como dice Hebreos 4:12 “la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón”.
CONCLUSIÓN:
- No seas de los que huyan de la pelea, sino de aquellos que entran en ella y la ganan.
- Seamos hacedores no espectadores.
- Seamos hacedores no murmuradores.
Cuidado porque quienes no se conviertan en guerreros serán atacados, porque nosotros lucharemos con él y lo venceremos, y el diablo huirá de nosotros e irá por aquellos que están sueltos.
© Esteban Wiens. Todos los derechos reservados.