Bosquejos Bíblicos | Cuidados por la trinidad
Explora este bosquejo Bíblico basado en: 1 Pedro 1:1-2
Introducción:
Hermano, tengo una pregunta para ti: ¿Cuando pasas por alguna tribulación, problema o sufrimiento ¿qué crees que necesitas para mantenerte firme, y soportar todo con alegría y paz?
Los receptores de esta carta también necesitaban la respuesta a este tipo de preguntas. Según nos deja ver toda la carta, las personas a las que Pedro estaba escribiendo estaban pasando por fuertes sufrimientos. Persecución por los gobernantes, problemas matrimoniales, sufrimientos con jefes insoportables, y todo tipo de cosas semejantes.
Por eso, Pedro comienza su carta recordándoles lo que ellos eran, lo que Dios estaba haciendo en ellos. Porque eso alimentaría su fe, y los fortalecería para que pudieran vivir una vida que agrada a Dios. Y no sólo a ellos, sino también a nosotros.
Proposición:
- La Santa Trinidad cuida de su iglesia
- Para esto debemos ver el rol de cada uno en nuestra salvación.
El Padre y la elección.
- El Espíritu Santo y la santificación.
- El Hijo y la redención.
Desarrollo:
I. Según la Predeterminación de Dios.
A. Explicar el término “predeterminación”.
Aquí Pedro explica un poco más a profundidad lo que significa ser “elegidos de Dios.” El texto dice que fuimos escogidos “según la presciencia de Dios Padre.” Esta palabra que la RVR-1960 traduce como “presciencia” puede entenderse de dos maneras. Primero, como un conocimiento anticipado, y segundo, como parte de la predestinación de Dios. El segundo es el significado en este pasaje.
Cuando se usa en relación a Dios, se refiere al plan que Él hizo en la eternidad para salvarnos. Pablo, por ejemplo, la usa en Romanos 8:29, el cual dice:
“Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.”
Pedro también usa esta palabra en Hechos 2:23 cuando dice:
“A éste, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole”.
En ambos textos, vemos que esta palabra no sólo se refiere a un mero conocimiento anticipado, sino también a que Dios hizo un plan en la eternidad, y que todo cuanto sucede en este mundo pertenece a este plan, incluyendo el sufrimiento de su Hijo Jesucristo.
Somos elegidos según la predeterminación de Dios Padre, según el plan que hizo en la eternidad. Todo lo que está sucediendo en nuestras vidas como elegidos pertenece al plan que Dios hizo en la eternidad.
Ahora bien, usted que está allí sentado se puede estar preguntado: ¿Tiene esta verdad alguna importancia para mi vida? ¿Podrá de alguna manera hacerme crecer? ¿Cómo esta enseñanza me ayudará a vivir como un cristiano que ama a Dios en un mundo tan perverso? Mi respuesta es que esta afirmación de Pedro es de mucho beneficio para nosotros. Hay dos aplicaciones importantes que surgen a partir de ella.
B. Nos fortalece porque nos ayuda a tener una visión general de todo.
Esta verdad nos da una visión panorámica de todas las cosas, porque nos ayuda a entender que Dios tiene todo planificado.
Tenemos el ejemplo de José. Sufrió mucho, fue entregado como esclavo, aprisionado y otras cosas más. Pero la predestinación de Dios lo ayudó a entender que es soberano, y que Dios lo guardaba.
No mires demasiado la tribulación que estás pasando. Enfócate en que, al ser escogido por Dios, el Señor tiene el control de tu vida.
C. Nos muestra que todas las cosas ayudan para bien.
Ahora bien, si todos lo que estamos sufriendo como escogidos es parte del plan de Dios, eso significa entonces que Dios tiene el control de todas las cosas. Y si Dios tiene el control de todas las cosas, entonces usa todo para tu bien. Esto es lo que Pablo dice en Romanos 8:28:
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.”
Y aún en el sufrimiento tiene un propósito en nuestras vidas: que nuestra fe permanezca firme en los momentos difíciles. Dios tuvo el completo control de la vida de Cristo. Y todo lo que sucedió tenía propósitos fructíferos y eternos. Es verdad, Cristo sufrió grandes cosas: humillación, burlas, traición, y la muerte como el peor pecador, aunque no lo era. Pero todos esos sufrimientos tenían como propósito otorgar la salvación eterna que tú y yo gozamos hoy.
De igual manera, mantengamos la fe firme, aún en la adversidad, porque todo lo que estamos viviendo está bajo el control del Padre. Te ruego que pongas tu esperanza y tu paz en Dios. Coloca la vista en el plan que Dios tiene para ti, y al ver que eres parte de ese maravilloso plan siéntete confiado.
II. Por medio de la Obra del Espíritu
A. Explicar qué significa “en santificación del Espíritu Santo”.
El texto también dice que somos escogidos “en santificación del Espíritu Santo.” En griego esta frase indica el agente que Dios usa para hacernos escogidos, y darnos todas las bendiciones que eso conlleva.
Un agente es una persona que se encarga de ejecutar una obra en representación de otra persona. Es un como una persona que se encarga de llevar a cabo la tarea que otro le manda. El Espíritu santo es el agente porque es la persona divina que Dios usa para llevar la salvación a sus escogidos. Él es el agente, porque es el encargado de hacernos crecer, creer en Dios, amar a los hermanos y ser pacientes.
Por eso es que Pedro dice “en santificación del Espíritu.” Las bendiciones de ser escogidos llegan al creyente por medio de la obra del Espíritu Santo.
B. Los beneficios de esto para nosotros.
Hay muchos beneficios de esta verdad.
El Espíritu nos capacita vivir como cristianos en cualquier situación.
Es cierto que las pruebas tienen muchas tentaciones, que hacen que caigamos en pecado, o que nos apartemos del Señor. Sin embargo, el Espíritu Santo nos da la fuerza para ser firmes ante las tentaciones, y permanecer en santidad.
El Espíritu Santo fortalece nuestra fe.
Pero también nos ayuda a permanecer firmes en la fe. Las pruebas hacen que dudemos fácilmente de Dios. Pero el Espíritu Santo está allí para que recordemos que Dios está con nosotros.
El Hijo y la Redención
III. Fuimos Escogidos
La tercer cosas que dice es que fuimos escogidos: “para obedecer y ser rociados por la sangre de Jesucristo.” Aquí Pedro enseña cuál es el propósito de nuestra salvación. Pedro nos dice que nuestra salvación tiene dos propósitos: Obedecer y Ser rociados con la sangre de Cristo.
A. Obedecer y recibir perdón no se contradicen.
Algunas personas piensan que obedecer a Dios y ser perdonados se contradice. Sin embargo, Dios muestra que están en armonía. El texto claramente muestra que debemos “Obedecer” a Cristo, pero también “ser rociados con su sangre”.
B. Cristo es nuestro Señor.
La primera frase significa que Cristo es nuestro Señor. Fuimos predestinados para estar en Cristo Jesús. Eso significa que fuimos predestinados para servirle a Él, para amarlo, buscarlo, y adorarlo.
C. Cristo es nuestro Salvador.
La segunda frase es “ser rociados con su sangre”. Esto nos recuerda al Antiguo Testamento, cuando el sacerdote hacía sacrificios y rociaba la sangre de los corderos sobre el pueblo. Era una señal de perdón de pecados. De la misma manera, la sangre de Cristo es rociada sobre nosotros, cuando Cristo nos perdona a través de su sangre y nos limpia de todo pecado. Esto significa que Cristo es quien nos limpia de toda culpa, y transgresión. De modo que, podemos estar seguros de nuestra relación con Dios.
Conclusiones
Ser escogidos por Dios es más que una doctrina teológica. Nos muestra que Dios tiene el control completo de nuestras vidas. Y por eso, podemos estar confiados en él.
Por otro lado, nos muestra que, al ser escogidos de Dios para estar en Cristo, cada uno de nosotros le debe obediencia a ese Dios. Obediencia que debemos darle en cualquier situación en que nos encontremos.
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