Bosquejos Bíblicos
Bosquejos Bíblicos Prédica de Hoy: El diseño perfecto de Dios
Bosquejos Biblicos… Lectura Biblica: Génesis 1:26,31
Introducción:
Es prácticamente imposible negar la declaración de que muchos de las situaciones que pasamos y que estamos pasando son momentos duros. Todos en diferentes por distintas razones experimentamos circunstancias que nos han causado dolor. Por ahí un adagio popular que dice: caras vemos pero corazones no sabemos.
Son muchas las personas que te saludan con sonrisas que disimulan tristezas y en muchos de los casos provienen del momento difícil que están experimentando. Justo sobre eso quiero hablarte de parte de Dios: que comprendamos que muchos de los escenarios más difíciles son los más importantes. El ser humano es un ente compuesto por 3 partes: espíritu, Alma y cuerpo.
El hijo de Dios en quienes habita el espíritu vivificado tiene la capacidad de vivir las circunstancias desde una de esas 3 partes.
I. El Cuerpo: es aquella MATERIA utilizada por Dios compuesta por elementos biológicos que nos permiten estar sujetos a las leyes terrenales.
Leyes que rigen la tierra:
- Ley de gravedad.
- Ley de aerodinámica.
- Ley de desplazamiento.
- Ley de la termodinámica.
- Ley de inercia.
Génesis 2:7 “Entonces, Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de la vida, y fue el hombre un ser viviente.“
Nuestro cuerpo se desarrolla e interactúa con el medio y los ambientes a través de los sentidos.
- La vista.
- El oído.
- El tacto.
- El gusto.
- El olfato.
Los sentidos al igual que el Alma se alimenta de las circunstancias sin que estas pasen por el filtro de la fe que solo opera en el espíritu.
Por ejemplo:
Cuando no tenemos dinero y falta de alimentos el sentido de la vista le manda una información al cerebro el cual segrega una sustancia que da paso a un estado de ansiedad y este se convierte en uno de tristeza y así los eslabones se unen hasta llevarnos a entender que somos pobres.
II. El alma: es el asiento de los pensamientos, sentimientos y emociones.
El alma es inmaterial y siempre trabaja conjuntamente con mi estructura biológica (cuerpo). Cuando procesamos las realidades desde nuestra Alma entonces toda la información que está procese será la que gobernara mi vida y determinara mi estado.
El Alma elabora cuestionamientos Y PLANTEAMIENTOS, tales como:
- ¿Por qué a mí?
- Eres tan desdichado.
- No saldrás de estas.
- Te enrostra los sentimientos de culpa.
- Determina estados depresivos.
Todo esto da paso a un estado de autoconmiseración y obviamente el medio responderá a LA ACTITUD que emana de la persona. El Alma es sentimental y los sentimientos casi siempre entran en conflicto con la razón. Por eso usted puede ver a una madre en un velorio o en una sala de juicio decir: Mi niño era bueno y no le hacía mal a nadie, solo atracaba y dejaba a sus clientes lisiados pero no los mataba. Esto porque está procesando la realidad con la razón apagada.
Un padre que se rige por el alma:
- Le da dinero a un hijo aun sabiendo que comprara drogas.
- Una mujer perdona a un marido abusivo.
- Tomamos decisiones aun viendo el caos ante nuestras narices.
Es que el Alma procesa las informaciones tal cual como el medio las ofreces y sobre todo esta hace alianza con los sentidos que operan en el cuerpo.
Por todo lo anterior expresado: La intención de Dios es hacernos entender por medio a su palabra y a través de las circunstancias que somos seres espirituales y desde esa posición es que el Alma y el cuerpo deben digerir las circunstancias.
El hombre es un espíritu que posee un cuerpo y le ha sido dada un alma.
Repita: yo soy un espíritu.
Esto es importante entender porque el cuerpo y el Alma pueden pasar por procesos, circunstancias o momentos pero el espíritu está seguro porque ESTÁ LIGADO AL DE CRISTO. Usted puede estar pasando por momentos de apuros económicos, sentimental o moral pero permítame decirle que en su espíritu usted es libre.
2 Corintios 3:17 “Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, hay libertad.“
Con esta verdad se enfrenta la situación, NO SOBRE LA BASE DEL PROBLEMA sino sobre esa posición de libertad en la que se encuentra mi espíritu. Alguien está siendo afectado por una determinada enfermedad, pregunto: ¿qué parte de su ser es que está enferma? Exacto, el cuerpo y nosotros no somos el cuerpo somos el espíritu.
El espíritu que vive en mi está intacto y le es imposible ser afectado por algo que solo le atañe al cuerpo; así que sobre la base que gobierna mi vida desde (mi espíritu) es que la enfermedad se maneja.
2 Corintios 4:16 “Por tanto no desfallecemos, antes bien, aunque nuestro hombre exterior va decayendo, sin embargo nuestro hombre interior se renueva de día en día.“
¿Qué pasa con aquellos que la enfermedad los mata?
Amado, la enfermedad no los mata a ellos porque el Espíritu es eterno; el cuerpo colapsa y por obviedad espiritual debe regresar al ámbito donde el espíritu se hace legal (Génesis 3:19; 2:7; Eclesiastés 12:7; Filipenses 1:21). A medida que somos transformados en cuanto a la manera de pensar de igual forma nuestro modo de ver, sentir y vivir las circunstancias cambian.
Si nada cambia pero yo cambio pues todo cambia.
Quiero compartirte un incidente bíblico en el cual el personaje sufrió una especie de cambios y por ende las circunstancias cambiaron.
Jacob (Génesis 28:10-11):
Un hombre proveniente de una familia bien posicionada pero producto de sus malas decisiones termino en un desierto hostil.
- Vagando con su familia.
- Sin un techo.
Este es el escenario perfecto para hacer un cuadro depresivo. Él no sabía que había llegado a un lugar donde experimentaría una metamorfosis (Génesis 28:11-12). Tomó una piedra, la usó como almohada, y se acostó a dormir en ese lugar. 12 Allí soñó que había una escalera apoyada en la tierra, y cuyo extremo superior llegaba hasta el cielo. Por ella subían y bajaban los ángeles de Dios.
En medio de la crisis que está viviendo Jacob entró EN UN ÁMBITO donde recostó su cabeza sobre una Roca.
¿Quién es esa roca y que paso con la cabeza cuando fue expuesta a la roca?
Cristo es la roca (Efesios 2)
Empezó a ser renovado en su mente:
- Los conceptos erróneos de su vida fueron cambiados.
- Su actitud cambio.
- La percepción cambió.
Cuando su mentalidad cambió automáticamente y empezó a ver el entorno desde la perspectiva de Dios.
En el desierto que no había nada, ahora él puede:
- Ver una escalera con ángeles subiendo y bajando.
- La voz de Dios confirmándole la promesa.
- Experimentar que lo que para otros es un escenario de desgracia PARA ÉL ES EL MEJOR MOMENTO DE DIOS PARA SU VIDA.
Génesis 28:16 “Y despertó Jacob de su sueño, y dijo: Ciertamente Jehová está en este lugar, y yo no lo sabía.”
Lo que hace unas horas era el peor desierto ahora es casa de Dios y puerta del cielo. Todo cuando puso su cabeza sobre la roca. Tú decides si la temporada que estás viviendo es la más gloriosa de tu vida o la más terrible de tu vida. Esta departe nuestra determinar el área de nuestro ser que vivirá estas cosas.
¿Qué sucede cuando vivimos las circunstancias desde nuestro espíritu?:
- Mares se abren en dos para que pasemos intacto.
- Una columna de fuego se enciende para que el frio no nos mate.
- Una nube se coloca debajo del sol para que este no nos queme.
- Roca que bota agua.
- El cielo empieza a proveer pan y carne.
Adopta nuevas características:
- Se va la queja y se despierta un agradecimiento y plena confianza.
- Cambia la manera de hablar, la actitud y las acciones.
- Se vuelve un influencer.
- Están pasando por circunstancias pero todo el mundo le agrada estar con ellos.
- No tienen nada en la alacena pero siempre hay gente en esa casa.
- Algunos se acercan a compadecerlos pero terminan saliendo impregnados de lo que esas personas tienen en medio de esa supuesta crisis.
- Saben que viven en un ámbito.
© Francisco Carbonell. Todos los derechos reservados.