Bosquejos Biblicos… Bosquejos para Predicar
Isaías 6:1-8
EL IMPACTO DE LA SANTIDAD DE DIOS EN NUESTRAS VIDAS.
INTRODUCCIÓN:
¿Para usted que significa santo? El significado primario de santo es “separado.” Y traducido sería “corte aparte.” Ciento treinta una veces en la Biblia traduciría “un corte arriba de algo.” Cuando algo es más hermoso o mejor decimos “está por encima de las demás.” La santidad de Dios es más que separación, su santidad también es trascendencia que significa “exceder los límites usuales”; trascender es elevarse sobre algo, ir por encima y más allá de cierto límite. Cuando hablamos de la trascendencia de Dios estamos hablando acerca del sentido en el cual él está por encima por encima y más allá de nosotros. Él está infinitamente por encima de nosotros.
I. VISIÓN DE LA SANTIDAD DE DIOS. verss. 1-4
- Isaías era un hombre de la nobleza, tenía acceso al palacio.
- Era un momento difícil. Muerte del rey Uzías.
- Él reino por 52 años, comenzando a los 16 años.
- Inicio sirviendo a Dios, trabajo y el pueblo le amaba. 2 Crónicas 26:4
- Termino creyéndose como un dios y murió. 2 Crónicas 26:16
- El pueblo tuvo un dolor nacional, porque a pesar de todo él los cuido.
- Isaías adolorido en su corazón sube al templo y ve algo extraño (espiritualmente)
- Los serafines reconocían la santidad de Dios. Santo, Santo, Santo. Todo temblaba ante la presencia de Dios.
II. RECONOCIMIENTO DE LA SANTIDAD DE DIOS. verss. 5-7
Aceptando su vileza. vers. 5
¡Ay de mí! La manera en que Isaías usó la palabra ¡ay! Fue extraordinaria.
Al ver al Señor, él pronunció el juicio de Dios sobre sí mismo. Invocó el juicio divino, la severa maldición de juicio, sobre su propia cabeza. Una cosa era que un profeta la usará en el nombre de Dios para maldecir a otra persona, pero no se había visto que un profeta se la auto-dijera. Después Isaías dijo “soy muerto” lo que Isaías expresó fue lo que los psicólogos modernos describen como la experiencia de desintegración personal.
Isaías era un hombre de integridad, un hombre completo.
Sus contemporáneos lo consideraban el hombre más recto de la nación y lo respetaban como un modelo de virtud. Pero cuando tuvo la repentina visión del Dios santo, en ese instante su autoestima fue sacudida. Comparado con los mortales, él podía sobresalir, pero cuando se midió con Dios, él fue deshecho moral y espiritualmente devastado.
“soy hombre de labios inmundos” él pudo decir otra cosa, pero, ¿por qué su boca? Jesús dijo: “no es lo que entra en la boca, sino lo que sale lo que contamina a los hombres”; o lo que dice Santiago 3:6-12.
Isaías reconoció que la lengua es un mal irrefrenable y lleno de veneno. Pero no era él solo, todos estaban en esto. En un momento tuvo un entendimiento nuevo y radical del pecado.
Debemos darnos de cuenta que somos afortunados de que Dios no se presente como lo hizo con Isaías o nadie lo toleraría; Dios nos muestra nuestro pecado paulatinamente, pero a Isaías fue de una manera súbita. Y él dijo: “mis ojos han visto al rey, Jehová de los ejércitos.” Allí entendió quién era Dios y quién era él.
Aceptando su santificación. verss. 6-7
- Isaías ya no deseaba más de esto. A diferencia de Adán, él no podía esconderse
- El serafín cogió con tenazas, era muy caliente para él.
- Tocó la boca de Isaías, un acto de limpieza dolorosa. Dios lo higienizó.
IV. ENTREGA A LA SANTIDAD DE DIOS. Vers. 8
- Escuchando la necesidad. Por primera vez oyó la voz de Dios.
- Dios tiene un proceso en sus hijos para hacerlos fuertes para su viaje.
- Dios tomó un pecador y lo convirtió en un profeta ofreciéndose a el llamado.
- “heme aquí” diferente a “aquí estoy”
- Envíame a mí.
CONCLUSIÓN:
Dios es santo, nosotros necesitamos de él. Agradezcamos por lo que ha hecho en nuestras vidas y anhelamos cada día más la santidad de Dios.
© 2016. Leonardo Gutierrez
