Bosquejos Biblicos
TEMA: LA PREGUNTA CORRECTA PARA TRANSFORMAR NUESTRA VIDA
TEXTO: MATEO 12:34-35
En los versículos que hemos leído encontramos una verdad espiritual muy importante: No podemos hacer lo bueno siendo malos, esto significa que lo que somos afecta directamente lo que hacemos.
Basados en esa verdad espiritual vamos a reflexionar en la pregunta que la gran mayoría de personas nos hacemos cuando las cosas en nuestra vida no van bien, cuando tenemos problemas en nuestro matrimonio, cuando tenemos problemas con nuestros hijos o con nuestros padres, y nos preguntamos ¿Qué tengo que hacer para arreglar mi vida?
Tenemos que reconocer que no podemos cambiar lo que hacemos sino cambiamos primeramente lo que somos, pues como nuestro Señor Jesucristo nos lo enseño, lo que hacemos depende directamente de quienes somos.
Entonces la pregunta correcta para poder transformar mi vida para bien no es ¿Qué tengo que hacer? Sino ¿Qué tengo que ser?
Respondamos entonces ¿Qué tengo que ser para transformar mi vida?
I. TENGO QUE SER UNA PERSONA EMOCIONALMENTE SANA (SALMO 109:22)
Muchas personas han sido heridos emocionalmente y eso afecta todo lo que hacen, estas heridas pueden haber sido causadas por humillaciones, por haber sido traicionados, por haber sido abandonados, por haber sufrido injusticias, etc.
Ser una persona herida emocionalmente nos hace personas resentidas y llenas de amargura, siempre a la defensiva, y esto afectara directamente nuestra relación matrimonial, afectara nuestra relación con nuestra familia.
Tenemos que saber que muchas de esas heridas que están en nuestra vida no están ahí por casualidad, sino que otras personas las causaron, posiblemente hubo personas que nos quebraron emocionalmente, personas que quebraron nuestros sueños, que quebraron nuestro corazón.
En la palabra de Dios encontramos la historia de un hombre que en su niñez fue afectado grandemente por alguien que lo dejo caer, que lo quebró físicamente y lo marco para toda la vida, ese hombre se llamaba Mefi Boset (2 Samuel 4:4).
El rey David tuvo misericordia de Mefi Boset y lo llamo para devolverle todo lo que había perdido, (2 Samuel 9:1-7) y a todos nos gusta la alabanza que nos dice David le dijo a Mefi Boset que lo que era tuyo te devolveré, que vas a comer en la mesa del rey y vas a vestir la ropa del rey, pero podemos ver que Mefi Boset termino su vida lisiado de ambos pies, (2 Samuel 9:13).
Muchas personas pueden identificarse con Mefi Boset, pues alguien los quebró, por el abandono, por el menosprecio, por una infidelidad, por palabras hirientes, por un abuso, y su corazón está herido, aunque tengan muchas cosas materiales, emocionalmente están quebrados.
Pero el Señor al igual que David te manda a llamar, pero con una gran diferencia, pues David le dio todo lo material a Mefi Boset pero no podía sanarlo, pero nuestro Dios nos manda a llamar para bendecirnos y para sanarnos, para sanar por completo las heridas de nuestro corazón (Isaías 47:3).
Acepta el llamado del Señor, permite que el sane tu corazón herido, permite que el sane tu corazón quebrantado, pon en las manos del Señor los pedazos de tu corazón, ya no sigas siendo una persona herida emocionalmente, ya no sigas siendo una persona con un corazón herido.
II. TENGO QUE SER UNA PERSONA CON PRIORIDADES BIEN DEFINIDAS (MATEO 6:33)
Una frase de John Maxwel dice: “Para cambiar tu vida tienes que cambiar tus prioridades” y es una verdad espiritual, pues nuestra vida es un reflejo de nuestras prioridades.
Hoy en día hay muchas vidas en fracaso, muchas familias en fracaso, muchos matrimonios en fracaso por tener mal definidas sus prioridades de vida.
A causa del trabajo, de los negocios, de los estudios muchas personas dejan de congregarse, poco a poco se van alejando de Dios y no podemos negar que el trabajo y los negocios son importantes, que los estudios son importantes, pero para un cristiano lo primero en su vida tiene que ser Dios.
Igualmente, muchos matrimonios están al borde del divorcio a causa de que para el esposo o para la esposa hay tiempo para todo menos para su matrimonio, hay tiempo para el deporte, hay tiempo para los amigos o amigas, hay tiempo para muchas cosas, pero están descuidando su matrimonio.
FRASE: Cuando las prioridades están claras, las decisiones se hacen fáciles, pues reconocemos que Dios es lo mas importante, que nuestra familia es más importante que el deporte, que nuestros hijos son mas importantes que los compañeros del trabajo, que agradar a Dios es mas importante que agradar a los demás, etc.
Las personas que tienen sus prioridades bien definidas tienen muchos menos conflictos, saben decir NO sin temor cuando es necesario hacerlo, y no se enredan en cosas que afectaran sus vidas.
III. TENGO QUE SER UNA PERSONA FUERTE ESPIRITUALMENTE (EFESIOS 3:16)
Cuando mi fortaleza está en Dios puedo enfrentar los distintos problemas de la vida, tengo lo necesario para transformar mi vida para bien.
Cuando somos personas fortalecidas en Dios podemos hacer lo bueno, podemos hacer lo correcto, podemos hacer lo imposible pues para nuestro Dios no hay nada imposible.
CONCLUSIÓN
tenemos que comprender que para poder transformar nuestra vida lo primero que tenemos que ser es hijos de Dios, recíbelo hoy como tu Señor y salvador personal (Juan 1:12).
© Oscar Alberto Flores. Todos los derechos reservados.
Dios le bendiga siervo.
Que bonita reflexión, que Dios siga derramando fuerzas y abundante sabiduría.
Bendiciónes!!!