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La marca de un llamado

Bosquejos Biblicos

Bosquejos Biblicos… Lectura Biblica Lucas 5:27

Introducción:

En cuanto al llamado hay dos tipos de personas, unos son llamados y otros son marcados por Dios. Las personas llamadas por Dios tienen un propósito divino pero Dios le da la libertad absoluta de posponerlo, paralizarlo, desviarlo y finalmente que ese propósito no se cumpla.

Hay otros que de manera soberana son marcados por Dios y sin importar las cosas que sucedan en sus vidas tarde o temprano terminaran cumpliendo aquello para lo cual Dios los destinó.

¿Por qué Dios toma ese tipo de decisiones?

Esto pertenece a su soberana independencia como Dios. En su soberanía sus caminos son totalmente diferentes a los nuestros (Isaías 55:8-9). Entienda esto; las definiciones de nuestras palabras están determinadas por la Real Academia de la Lengua Española pero el vocabulario de Dios está determinado por la Real Academia del Reino. Así que una palabra del Reino puede ser muy diferente a la de nuestro idioma.

La definición que tenemos sobre Justicia es muy diferente a la que el Reino emite. Por eso usted puede decir que muchas cosas son injustas y a la vez preguntarse ¿cómo puede ser que Dios la permita?

El asunto está en que nosotros manejamos las definiciones desde el mundo limitado de la humanidad y para poder entender lo de Dios necesitamos que la semilla incorruptible y el Espíritu de verdad operen desde nuestro interior.

Este es el orden, Cristo y su Santo Espíritu operando dentro de mí, me proveen de inteligencia y sabiduría espiritual para así poder acceder a los misterios del Reino.

Los marcados por Dios sin importar cuánto traten de huir o como sus decisiones lo desvíen del propósito original, Dios termina usando sus crisis y situaciones para construir caminos que lo retornaran al propósito.

Las personas que usted ha encontrado en su vida y de ellos los que lo han ayudado conscientemente y también aquellas que no estuvieron a su favor serán instrumento para catapultarlo al plan de Dios en su vida. Los que estuvieron en contra fueron enemigos suyos pero amigos del propósito de Dios para usted. Y muchos amigos suyos  han servido de obstáculo para ese proyecto.

Hay crisis que Dios permite para que la oposición a su destino se desnude y podamos volver al carril del destino original. Muchas de las tormentas que se desataran en su vida son porque usted tiene un Jonás en su barca y hay que echarlo por la borda (Jonás 1:1).

Cuando usted escucha una introducción como esta podrá notar en primer plano que todo lo que se diga a partir de esta declaración inicial no está sujeto a objeción sino a obediencia.

En las costumbres Judías cuando una persona recibía una palabra de Dios esta se hacía incuestionable y absolutamente obedecible. Aquí se está estableciendo una palabra de Dios que sin importar lo que usted crea tendrá que sustituirlo por lo que Él dice (Jonás 1:2).

Es importante notar que la maldad se va acumulando y va subiendo y obviamente provoca una reacción. A pesar de que Nínive es una gran ciudad también era una nación enemiga de los judíos en el momento histórico de este evento. Y Dios está levantando un profeta Judío para ir a dar esa palabra.

En el mundo antiguo, la historia más sangrienta y la crueldad más viciosa de la que ha quedado constancia es posiblemente la de los ninivitas, que encontraron más maneras increíblemente ingeniosas de ser crueles que ninguna otra nación que jamás haya vivido. Era un pueblo brutal, impío y pecador y Jonás los odiaba. Lo que más deseaba en el mundo era ver a Nínive destruida y eso era exactamente lo que quería Jonás, quería ver a aquella ciudad destruida. Jonás 1:3 – “Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová“. Vino una palabra de Dios y él prefiere huir de la presencia.

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