Bosquejos Bíblicos
Prédica de Hoy: Viviendo por tu palabra
Bosquejos para Predicar Texto Bíblico: “Susténtame conforme a tu palabra, y viviré; Y no quede yo avergonzado de mi esperanza. 117 Sosténme, y seré salvo, Y me regocijaré siempre en tus estatutos.” Salmos 119.116-117
INTRODUCCIÓN
Hay una esperanza en Dios, si hermano en Dios hay esperanza. Mira mi amado, el salmista dijo “susténtame conforme a tu palabra y viviré”; él estaba confiando en la palabra de Dios. Mira mi hermano, ¿cuantas veces se nos ha enseñado que debemos confiar en la palabra de nuestro Dios, y aun no lo hacemos? Pero el salmista dijo “susténtame conforme a tu palabra y viviré, y no quede yo avergonzado de mi esperanza”. Pero no solo eso mi amado hermano, si no que el salmista también dijo” Sostenme y seré salvo y me regocijare siempre en tus estatutos.”
I. NO OS ENGAÑÉIS, DIOS NO PUEDE SER BURLADO (Gálatas 6:7)
Cristo hablando: “Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? 23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.” Mateo 7:22-23
Pero qué bueno que la palabra de Dios es alimento para el cristiano. Si mi amado hermano, la palabra de Dios es el alimento que nuestra alma necesita. Pero hoy en día no queremos comerla. Es por eso mi hermano andamos todos debiluchos porque no somos capaces de alimentar nuestro Espíritu con la palabra de Dios
En el libro de Jeremías 15:16 “Fueron halladas tus palabras, y yo las comí; y tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi corazón; porque tu nombre se invocó sobre mí, oh Jehová Dios de los ejércitos.”
La palabra te da gozo
La palabra te da alegría, y si tú te llenas, si tu comes la palabra de Dios en tu persona se refleja porque en ti se mira que estas lleno del gozo de Dios en tu corazón. “!!Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca.” (Salmos 119:103).
Déjame decirte que cuando la palabra esta en el corazón se deja de pecar. Si hermano cuando la palabra de Dios está en el corazón dejas de cometer pecado y te guardas para Dios.
Dice la palabra de Dios en Salmos 119:11 “En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti.” Pero hoy en día mí amado en vez de guardar los dichos de mi Señor en el corazón, los guardamos en el closet porque tenemos en poco Su palabra. Por eso hacemos lo que queremos. Porque no hemos aprendido a guardar la palabra en el corazón.
II. EL SALMISTA DIJO ALGO MUY SEGURO
Que hermoso es cuando uno tiene esa seguridad en tu corazón, cuando tu puedes hablar la palabra con la certeza de que llegara al corazón las personas. El salmista dijo bien seguro en el Salmo 91:5-7 “No temerás el terror nocturno, Ni saeta que vuele de día, 6 Ni pestilencia que ande en oscuridad, Ni mortandad que en medio del día destruya. 7 Caerán a tu lado mil, Y diez mil a tu diestra; Mas a ti no llegará.“
Así de seguros debemos estar mis amados hermanos. La seguridad te la da Dios cuando tu lo buscas con todo tu corazón. Cuando hagas eso mi querido hermano, y vengan contra ti las luchas y las pruebas, con toda seguridad tu puedes decir: “Caerán a tu lado mil, Y diez mil a tu diestra; Mas a ti no llegará.“
Iglesia de Dios, tu debes decir como el salmista: “Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.” Salmos 23:4
Conclusión
Es tiempo mis amados de vivir por la palabra de Dios. Acuérdate mi querido hermano que en Dios hay una esperanza viva, y si le decimos a Dios como el salmista “Sosténme, y seré salvo, Y me regocijaré siempre en tus estatutos“, entonces veremos la diestra de Dios moverse en nuestra vida.
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