Consejos para el bien

Bosquejos Bíblicos

Prédica de Hoy: Consejos para el bien

Bosquejos Bíblicos Texto Bíblico: “Deléitate asimismo en Jehová, y Él te concederá las peticiones de tu corazón.” (Salmos 37:4)

Introducción

La palabra de Dios está llena de consejos para nuestra vida. Consejos que si los seguimos nos llevarán por el camino del bien, el camino que agrada a Dios. Por ejemplo en el libro de los Proverbios encontramos mucha sabiduría para comportarnos como es debido y consejos del Señor que nos ayuden a ser personas de bien y benditas del Señor.

Pero esos consejos no se limitan al libro de Proverbios, sino que en toda la escritura Dios nos habla para que seamos sabios y obedientes a su voz. Así podremos tener de Dios las bendiciones también contenidas en su palabra. Por las misericordias de Dios tenemos de sus bendiciones cuando somos obedientes y escuchamos su voz.

I. Consejos – Confía en Dios (Salmos 37:3)

Dios nos pide que confiemos en Él. No quiere el Señor que confiemos en lo material, en personas o en instituciones. Nuestra confianza siempre debe ser el Señor sobre todas las cosas.

Además de confiar en Él debemos hacer el bien, así como Dios nos enseña por medio de su palabra. Cuando esto hagamos seremos recompensados para vivir en esta tierra en bendición de Dios, recibiendo siempre la verdad de Dios.

II. Deléitate en el Señor (Salmos 3:4)

Debemos encontrar deleite en el Señor. Cuando le conocemos esto es automático, pues no hay mejor lugar para estar que en su presencia. Nos deleitamos al conocer a Dios y queremos conocerle más, buscarle más, estar adorando más, porque Él es bueno y para siempre es su misericordia.

Cuando pasamos tiempo en la presencia del Señor y nos deleitamos en Él, el Señor ofrece que nos concederá las peticiones de nuestro corazón. Al ser adoradores nuestro ser se toca con el del Señor y conoce Él cada una de nuestras peticiones antes que nosotros las digamos. El Señor concederá esas peticiones por su poder y misericordia.

III. Consejos – Encomienda tus caminos (Salmos 37:5)

Debemos encomendarnos siempre en las manos del Señor. No podemos decir haré esto o aquello, sino decir: Si Dios quiere haremos esto. Estar en los caminos de Dios implica que dependemos de Él en todas las cosas. Ya no hacemos más las cosas por capricho personal sino que lo hacemos para agradarle a Él.

Cuando dependemos de Dios Él se encarga de obrar. Si lo hacemos por nuestra cuenta Dios nos deja, pero el resultado será desastroso. Si dejamos que Dios actúe en nuestra vida las cosas serán diferentes, pues están las cosas en las manos de Dios.