Bosquejos Bíblicos
Bosquejos Bíblicos Predica de Hoy: Parábola de la higuera estéril
Bosquejo Bíblico Texto Bíblico: Marcos 11:12-14
Introducción
Hoy vamos a reflexionar sobre una enseñanza poderosa del Señor que nos invita a examinar la calidad de nuestra fe y nuestra respuesta al llamado de Dios.
En la parábola que estamos explorando, el Señor busca fruto en la higuera y, de igual manera, busca fruto en cada uno de nosotros. No estamos aquí por casualidad; estamos aquí para impactar y glorificar a Dios. A través de este mensaje, veremos cómo nuestra fe debe traducirse en acciones concretas.
I. La expectativa de fruto
El Señor espera ver fruto en aquellos que le siguen, tal como esperaba encontrarlo en la higuera. No estamos en este mundo solo para ocupar espacio; estamos aquí para impactar positivamente nuestro entorno.
- a. Expectativa Divina: Jesús espera fruto de quienes le siguen (verss. 12-14)
- b. Fe Activa: Nuestra fe se debe manifestar en obras, mostrando la verdadera naturaleza de nuestro compromiso con Cristo (Santiago 2:17).
- c. Autoevaluación: Es esencial evaluarnos regularmente para asegurarnos de que estamos viviendo de acuerdo con esta expectativa (2 Corintios 13:5).
II. La inspección inesperada
La inspección de la higuera por parte del Señor simboliza cómo Dios puede examinar nuestras vidas en cualquier momento, subrayando la necesidad de estar constantemente preparados para demostrar nuestra fe mediante nuestras acciones.
- a. Revisión Divina: El Señor inspecciona la higuera, simbolizando su revisión de nuestras vidas (vers. 13).
- b. Preparación Constante: Debemos estar siempre preparados, pues no sabemos cuándo seremos examinados (1 Pedro 1:13).
- c. Autenticidad Espiritual: La calidad de nuestro fruto revela la verdadera naturaleza de nuestra fe (Mateo 7:20).
III. Las consecuencias de la falta de fruto
La reacción de Jesús al no encontrar fruto en la higuera es una advertencia seria para nosotros. Si no producimos fruto, enfrentamos el riesgo de ser inútiles para el Reino de Dios, al igual que la higuera estéril.
- a. Consecuencias Espirituales: La falta de fruto espiritual lleva a consecuencias serias, como la maldición de la higuera (vers. 14).
- b. Impacto en Otros: Nuestra falta de fruto afecta no solo nuestra vida espiritual sino también nuestra influencia en otros (Gálatas 6:7).
- c. Responsabilidad: Como seguidores de Cristo, es nuestra responsabilidad ser ejemplos productivos, inspirando a través de nuestras acciones (Tito 2:7).
Conclusión
La enseñanza de Jesús sobre la higuera no solo es una metáfora de nuestras vidas, sino un llamado urgente a evaluar nuestro caminar con Dios.
No permitamos que nuestras vidas sean como la higuera que no produjo fruto. En vez de eso, pidamos a Dios la gracia y la fortaleza para no solo llevar fruto, sino para que ese fruto sea abundante.
Que al salir de aquí, cada uno de nosotros se comprometa a vivir con la certeza de que los ojos del Señor están sobre nosotros, examinando nuestro corazón y nuestras acciones. Sigamos adelante, llevando frutos que glorifiquen a Dios y que afirmen nuestra fe viva. Que el Señor nos bendiga y nos fortalezca en este compromiso.
© Jose M. Vallin. Todos los derechos reservados.
Gracias hno por su valioso apoyo a nuestra fe con sus mensajes …me son de suma utilidad…. gracias!
Una enseñanza muy edificante y de mucha bendición, para reflexionar sobre nuestras vidas que no seamos como la higuera sin frutos
De grande bendición sus bosquejos, hay veces que recurro a este sitio para encontrar algo que predicar