Dios Endereza lo Torcido de Tu Vida | Devocionales Cristianos
Lectura bíblica: “Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas.” Proverbios 3:6
Reflexión:
Hay momentos en la vida en las que todo parece estar torcido. Tomaste decisiones que no fueron las mejores. Cometiste errores. Heriste a otros, te heriste a ti mismo. Y ahora, el camino por delante no se ve claro.
Pero aquí viene la promesa: Si lo reconoces —si dejas de depender solo de ti y lo buscas de verdad—, Dios no te dejará así.
Él no te va a abandonar en ese camino desordenado. Él enderezará tus veredas.
¿Sabes lo que eso significa? Que Dios tiene el poder de redirigir lo que tú ya dabas por perdido. Que tu historia no está terminada. Que tu pasado no tiene la última palabra.
Y no se trata de “ser perfecto” o de tenerlo todo bajo control. Se trata de aprender a reconocer a Dios en todo lo que haces. En tus planes, en tus decisiones, en tus momentos de duda. Cuando Él toma el timón, las curvas se enderezan, los desvíos se corrigen, el futuro se alinea.
Aplicación personal:
Hoy es un buen día para hacer un alto y preguntarte: ¿Estoy reconociendo a Dios en mis caminos… o estoy andando a mi manera?
No importa cuán desordenado esté tu presente. Nada está tan torcido que Él no pueda enderezar.
Invítalo con sinceridad. Entrega ese “asunto pendiente”, esa culpa, esa preocupación, esa relación complicada. Dios no solo puede restaurar… puede reescribir lo que tú creías irreversible.
Hazlo tu oración hoy: “Señor, toma mi camino… y enderézalo con tu poder.”
Oración de cierre:
Señor, reconozco que hay áreas en mi vida donde he tomado mis propias decisiones sin consultarte. Hoy vengo con humildad a poner mis caminos delante de ti. Endereza lo que está torcido. Redime mi pasado, alinea mi presente y guía mi futuro. Confío en tu dirección. En el nombre de Jesús, amén.
Versículo para memorizar:
“Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te mostrará cuál camino tomar.” (Proverbios 3:6, Nueva Traducción Viviente)
Al reflexionar en este mensaje, no olvides: Dios no solo ve tu camino… Él camina contigo. Y si hoy te sientes perdido, recuerda: no hay curva tan cerrada que Él no pueda suavizar, ni desvío tan largo que Él no pueda redirigir.
© Marco A. Hernández. Todos los derechos reservados.