Lamentablemente, el diablo también nos habla a diario para guiarnos por mal camino. El enemigo nos acusa y nos incita a albergar en nosotros sentimientos y pensamientos dañinos, mientras que el Espíritu Santo desea que crezcamos en amor y perdonemos. A quien escucharas y a quien seguirás dependerá de como has decidido vivir tu vida.
¿Por qué es necesario perdonar?
Porque el perdón es la clave de la bendición. El perdón y el arrepentimiento abren nuestros corazones y permiten que el río del amor y poder de Dios fluya en nosotros.
Necesitamos permitirle al Espíritu Santo revelarnos aquellas cosas que están por resolver en nosotros. Solo en oración sincera y humilde, derramando nuestro corazón delante de Dios podremos comprender mejor como están nuestros sentimientos, si hay amargura en nuestro corazón, si necesitamos perdonarnos y perdonar.
Pasos para Perdonar:
1. Identifique el agravio: que motivó el sentimiento de amargura y tristeza que tiene ahora.
2. Reconozca que no perdonar es pecado, no importa de quien sea la culpa (Efesios 4:30-32; Romanos 14:23)
3. Confiese a Dios que ha pecado al no perdonar (1 Juan 1:9)
4. Pida a Dios que le ayude a demostrar su amor, dar y recibir perdón y crecer espiritual y emocionalmente (1 Juan 5:14-15)
5. Puede serle mas fácil llevar ese amor a la acción, el escribir una carta a la persona que la agravió, contándole como se sintió en ese momento, que ha pasado con usted desde entonces y perdonándole (no entregue esa carta, rómpala, es solo para ayudarle a organizar sus ideas, aclarar sus sentimientos y expresarlos) Cuando crea que puede hablar con la persona sin roces, para edificación, hágalo.
6. Perdone, quite de usted todo el rencor y la amargura (es una decisión) Hágalo independientemente de que el otro no pida perdón o no le perdone.
7. Busque andar en el Espíritu y meditar en la Palabra de Dios cada día, para continuar creciendo y renovando su mente y corazón (Efesios 5:18-20)
8. Alabe a Dios cada día, cultive un corazón agradecido (Efesios 5:19)