Estudio eclesiológio sobre los carismas del Espíritu

1. Dones:

El uso bíblico de esta palabra es muy importante en nuestro estudio, veamos que el punto de vista paulino atañe algunos aspectos notables; así p. ej., la palabra griega jarísmata (de donde proviene el término carismas) muy común en Pablo, significa don; regalo o dádiva; véase Romanos 6:23; 12:6; 1 Corintios 1:7; 12:4, 9, 28, 30, 31; 1 Timoteo 4:14; 2 Timoteo 1:6. Si bien es cierto que cuando Pablo escribe a los Corintios su primera epístola, hace una clara distinción entre dones (gr. jarísmata), ministerios (gr. diakonión) y operaciones (gr. energémata) véase p. ej. 1 Corintios 12:4-6, sin embargo eso no significa que el apóstol restringe el uso de esta palabra exclusivamente a los poderes sobrenaturales impartidos por Dios a través de su Espíritu Santo como los milagros, la profecía, el hablar en lenguas entre otros, sino más bien engloba en este término todo aquello que contribuye a la sana edificación y equipamiento de la Iglesia.

En otra parte, Pablo usa esta palabra para abarcar todos los ministerios y actividades en la iglesia bajo el común denominador de dones, véase Romanos 12:6.

Asimismo en el pasaje de Romanos 1:11 donde Pablo expresa a la iglesia la esperanza de que al visitarlos, pueda comunicarles algún (gr. ti) don (gr. járisma) espiritual; esto nos enseña que el apóstol le daba un sentido general al término.

Veamos también en Efesios 4 donde por primera vez Pablo usa la palabra griega doreás (en singular v. 7 ) y dómata (en plural v. 8) para referirse los dones que Dios dio a los hombres y en el v. 11del mismo capítulo, menciona a los apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros cuyo propósito es igualmente la edificación del Cuerpo de Cristo, v. 12. Dice el erudito en exégesis del Nuevo Testamento Herman Ridderbos:

“El uso general hace evidente que no debemos restringir el contenido de esta idea a lo espectacular e inusual. No es posible limitar el concepto a la realización de sanidades, hablar en lenguas, tener una experiencia extática, etc. Porque mientras Pablo en 1 Corintios 12:14 pone singular atención (crítica) a estos carismas especiales, no se mencionan para nada en Romanos 12 y Efesios 4… Lo pneumático o carismático no es solo aquello que es espectacular o que afecta el aspecto interno de la vida religiosa. Carisma es todo aquello que el Espíritu desee usar y pone al servicio de la edificación y capacitación de la iglesia; todo lo que sirva para instruirnos y amonestarnos unos a otros; todo lo que sirve para la dirección y el gobierno eficaz de la iglesia. Por lo tanto no es posible reconciliar la distinción que algunos hacen entre ministerios carismáticos y ministerios no carismáticos con la concepción que Pablo tiene del carisma en la iglesia.” (Ridderbos, Herman. El Pensamiento del Apóstol Pablo. Grand Rapids, Michigan. EEUU: Libros Desafío, 2000, pp. 573, 574)

2. Ministerios:

Con este nombre se designa el carácter congregacional de todos los dones otorgados por Cristo y de todas las actividades para las cuales ellos capacitan. Doy a continuación una definición de este vocablo según el Diccionario Teológico Ilustrado:

“Este vocablo procede del lat. ministerium = servicio; y este de minister = servidor, vocablos que corresponden respectivamente a los gr. diakonía y diákonos. En la Roma clásica, minister, de minus = menos, era lo opuesto a magister, de magis = más.

Por eso el magister = magistrado o maestro, a quien se le reconocía un más en competencia y honestidad, era lo opuesto de minister a quien se le adjudicaba un menos en categoría, pues era un servidor del pueblo.” (Lacueva, Francisco. Diccionario Teológico Ilustrado. Terrassa, Barcelona: Clie, 2001, pag. 415)

En otras palabras, al hablar de ministerio estamos hablando de un servicio que se brinda dentro de la iglesia local y los encargados de trabajar en él son los servidores que por la gracia de Dios ministran para la edificación del Cuerpo de Cristo.

Ahora bien, el uso de esta palabra diakonía debe entenderse en un sentido amplio ya que Pablo despliega en distintas direcciones su aplicación a la obra de la Iglesia. p. ej. en Romanos 12:7 aparece diakonía para denotar un ministerio específico de servicio a la comunidad cristiana. Véase en comparación a esto Romanos 15:31; 2 Corintios 8:4.

Por otra parte diakonía puede referirse también a un ministerio en un sentido general del término, véase p. ej. 2 Corintios 3:7; 5:21 donde Pablo se refiere al estado de probación del hombre bajo la ley y al tiempo de salvación inaugurado por Jesucristo respectivamente.

En Efesios 4:12 el apóstol explica cual es el propósito por el cual Dios ha dado a la iglesia apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros, porque dice: “a fin de perfeccionar (gr. katartismón = equipamiento) a los santos para la obra (gr. ergón) del ministerio (gr. diakonías)” esto quiere decir que Dios usa los ministerios para equipar a sus siervos en la obra de otros ministerios, es decir, usa a unos para equipar a otros en el trabajo ministerial.

Por cierto, Pablo usa muy pocas veces la palabra gr. leitourgía = servicio, de donde proviene la palabra castellana liturgia que tiene una connotación sagrada de culto, véase p. ej. en Romanos 15:27 donde se refiere a una ofrenda que los cristianos griegos hicieron para los santos pobres que estaban en Judea, asi también en Filipenses 2:25 donde se usa el adjetivo leitourgón = servidor y más adelante en el v. 30 leitourgía equivale a servicio. Vease también Romanos 15:16.

Por lo tanto, el significado intrínseco y escencial del ministerio en la iglesia apunta claramente al servicio y edificación de la misma; todos los dones otorgados por Dios a su pueblo glorifican su nombre, asi lo enseña claramente el apóstol Pedro en 1 Pedro 4:10, 11 donde dice: “Cada uno según el don (gr. jarisma) que ha recibido minístrelo (gr. diokonoúntes) a otros…” Y en el v. 11 menciona algunas actividades en la iglesia que denotan servicio, pero tampoco se mencionan aquí las sanidades, milagros etc. Como lo explica Julian Charley:

“La misma palabra ministerio, se usa para describir tanto la oración y la predicación, como también para proveer comida al necesitado (Hch. 6:1, 4). Así que el servicio cristiano no hace separación entre lo sagrado y lo secular.” (Charley, Julian. 50 Palabras Clave de la Biblia. El Paso, Tx. Casa Bautista de Publicaciones, 1987, pag. 106.)

3. Acciones u Operaciones:

Estos términos sinónimos, son la traducción de la palabra gr. energemáton de donde proviene la palabra energía y aparece en 1 Corintios 12:6 lo cual puede referirse en forma especial a los carismas de señales tales como los milagros, sanidades. Luego en este mismo pasaje continúa el apóstol, diciendo: “…pero Dios, que hace (gr. energón)…” Claramente esta expresión nos da la idea de una actividad continua de parte de Dios en medio de su pueblo, obrando a favor nuestro, glorificándose en medio de su Iglesia, como aparece en Efesios 1: 19 Pablo usa el término gr. energeian para referirse a la actividad del poder de Dios sobre los creyentes y en el v. 20 usa el vb. gr. energeken = ejercitar o mantener activo para referirse a esa misma actividad que levantó con poder a Cristo de entre los muertos. Véase también el uso de esta palabra en Filipenses 2:13 donde también aparece el verbo gr. energón.

Pablo expresa a los creyentes corintios, que a pesar de la diversidad y distribución de dones, ministerios y operaciones que ellos como Iglesia reciben por obra del Espíritu Santo, es el mismo Dios quien hace y promueve esto en cada uno de ellos, ubicando en contraposición, el culto idolátrico pagano de la cuidad de Corinto donde también existían manifestaciones y operaciones pero de caracter demoniaco. Como dice el profesor Ridderbos: “Pablo pone en guardia a los corintios respecto a las experiencias extáticas, pues los corintios eran particularmente suceptibles a los pneumática (pero también a sus desviaciones).” (Op. cit. pag. 574) (las cursivas y los paréntesis son suyos).

Deja un comentario