Estudios Biblicos
¿Por qué ha dejado de congregarse?
Hebreos 10:25
Cuando los ancianos, predicadores o maestros nos hablan de la importancia de congregarnos, hay diferentes reacciones en los miembros de la iglesia. Hay quienes están de acuerdo y asisten fielmente a la iglesia.
También hay quienes piensan que ellos no necesitan ir a la iglesia para adorar a Dios porque Dios está en todas partes, y por tanto ellos puede leer y orar en su casa. Quienes no les parece que sea necesario y por tanto, brillan por su ausencia. Estos son los pensamientos de algunos que no están de acuerdo:
Otros piensan que ir a la iglesia con regularidad es señal de fanatismo, por tanto no asisten. Y aun otros piensan que como todo en exceso es malo, por tanto, asistir mucho a la iglesia también debe ser malo.
Lamentablemente hay muchos hermanos que tienen en poco congregarse con la iglesia y por tanto, se quedan en sus casas, en sus trabajos o se van a pasear.
Este problema no es algo nuevo. También había algunos de los cristianos en el primer siglo que hacían lo mismo, por lo cual, el escritor a los hebreos escribió estas palabras: “No dejando de congregarnos como algunos tienen por costumbre.”
Puesto que es un problema de muchas congregaciones desde hace muchos años, me ha parecido bien tratar este estudio: “No dejando de congregarnos.”
El problema más grande que afronta la Iglesia en estos tiempos es el decaimiento espiritual, pereza, frialdad, adormecimiento espiritual, y todo esto combinado trae consigo la falta de asistencia a la Iglesia, y esto creo que no es un tema que no se ha hablado pues se repite siempre, no solo en mi Iglesia sino en todas partes.
Surgirá algunas preguntas: ¿Para qué uno tiene que ir a la Iglesia, si la Iglesia no salva, el Pastor no salva, los hermanos creyentes no salvan, para qué voy entonces?
Escuche bien: el no asistir a reuniones cristianas (cultos) es perder el estímulo y la ayuda de otros cristianos.
Nos reunimos para anunciar nuestra fe y fortalecernos los unos a los otros en el Señor. He visto y sentido que uno recibe mayor afecto en la Iglesia que en los de su propia familia (escuche decir. “Ustedes si se quieren”) los hermanos en Cristo me han demostrado más amor sincero que mi propia familia, entonces porque no amarlos.
Al acercarnos al fin de los tiempos y al estar próximo el “día” en que Cristo volverá, afrontaremos problemas espirituales, tribulaciones e incluso persecución. He aprendido que en la Iglesia encontramos fortaleza espiritual de hermanos que en vez de castigarte o diciplinarte mas bien te aconsejan y te devuelven el ánimo de seguir avanzando, pues ni en el mundo ni en tu familia encontrarás este estímulo a seguir, más bien lo que nos dicen es que nos salgamos de la Iglesia.
Fíjese que las fuerzas anticristianas crecerán en intensidad, pues en estos últimos tiempos Satanás y sus demonios se han tornado más agresivos, descarados y evidentes, y por eso necesitamos la ayuda de verdaderos hermanos en la fe llenos del Espíritu Santo para que nos ayuden a crecer.
Las dificultades nunca debieran ser excusas para no congregarnos es mi sentir, cuando estábamos en el mundo no nos importaba si lloviera o hiciera sol después que tuviéramos gozando la vida, pero para las cosas del Señor somos flojos: si está nublado ya estamos pensando en no ir, y muchas veces deseamos que llueva para no ir a la Iglesia.
Si está haciendo sol no quisiéramos ir a reuniones o actividades en la Iglesia, pero cuando estábamos en el mundo nadie nos ganaba en estar paseando todo el día. En cambio, a medida que surjan las dificultades, debemos hacer mayor esfuerzo por ser fieles en la asistencia a la Iglesia.
Mire querido hermano. Dios no pasará por alto ningún trabajo hecho por nosotros que no sea recompensado Hebreos 6:10 Porque Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y el trabajo de amor que habéis mostrado hacia su nombre, habiendo servido a los santos y sirviéndoles aún.
Fíjese en esta promesa todo trabajo, sacrificio hecho con “Amor”para Dios será recompensado, y sabe hermano que ir a la iglesia es un sacrificio, usted está dejando de hacer otras cosas y le está dedicando un tiempo a Dios.
Lo que es congregarse.
Es reunirse como iglesia.
1 Corintios 11:18 “Pues en primer lugar, cuando os reunís como iglesia…”
¿Cual es el objetivo suyo de ir a la Iglesia? Quizás para ver quien es el que no va o si, para ver algún hermano o hermana que le gusta, o porque el pastor tiene buen aspecto y le gusta como viste. Su objetivo determina su crecimiento espiritual.
Si usted acude a la Iglesia con razones necias y caprichos nunca crecerá espiritualmente y siempre sera uno mas de los calienta bancas. Pero si su objetivo es aprender, llenarse de la palabra de Dios pues así como fue no regresará a su casa sino que Dios le daré más de lo que vino a buscar.
Es estar congregados en el nombre de Cristo.
Mateo 18:20 “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”.
Me encanta esta promesa, no es el gentío que atrae a Dios pues no son las mega Iglesia las más ungida, puesto que una Iglesia fuerte no la componen las paredes, ni la baldosas, ni púlpitos extravagantes, una Iglesia fuerte se compone de creyentes firmes en la fe, llenos del Espíritu Santo, prefiero cinco personas llenas del Espíritu Santo que mil personas muertas espiritualmente.
Reunirse Es perseverar.
Hechos 2:41-42 “Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. 42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.“
La perseverancia en algo que no se obtiene así por así se gana con una vida de oración, los que no asisten a la Iglesia es porque ya se rindieron, o pensaron que Dios les iba a contestar de una vez o porque pensaron que iban a sentir alguna transformación sobrenatural, y como no lo sintieron se cansaron.
El problema no está en Dios ni en el pastor ni en la Iglesia, el problema está en usted y en mi, porque estamos pensando otras cosas que no edifican o estamos viviendo una vida de pecado y queremos que Dios nos responda todas la peticiones, y si no la responde nos enojamos como Jonas. Léase Juan 15:7 y saque sus propias conclusiones.
Reunirse Es habitar juntos.
Salmos 133:1 “¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía!”
Aquella persona que no le gusta habitar con los hermanos no tiene amor y el amor de Dios no está en el porque Dios es amor, y en la Iglesia debe existir el verdadero amor no fingimiento, ni con celos.
Cuando nos reunimos en armonía el Espíritu Santo de Dios se manifiesta con poder. Pero cuando hay celos amargos, y disputas el Espíritu Santo se aparta y es allí donde vienen los problemas entonces. (tengo ciertos temas de la unidad aquí escritos)
Reunirse Es ir a la casa de Dios.
Salmos 122:1 “Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos.“
Eclesiastés 5:1 “Cuando fueres a la casa de Dios, guarda tu pie; y acércate más para oír que para ofrecer el sacrificio de los necios; porque no saben que hacen mal.” Esa casa de Dios es la iglesia.
1 Timoteo 3:15 “para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad”.
Cada uno examínese cómo está su corazón al ir a su Iglesia, cuál es su motivo, cual es su objetivo, que quiere que Dios haga por usted, que quiere que Dios le de. Entonces congregarse no es quedarse en la casa leyendo la Biblia o haciendo oración. Tampoco es entrar en el culto por internet desde tu casa y adorar. Eso no es congregarse. Reunirse es algo mucho más personal e íntimo.
Hay veces que admiro a los Católicos porque son un poco mas fieles que nosotros en sus reuniones, llegan temprano a la capilla, mientras tanto que nosotros faltan diez minutos para empezar el culto de escuela dominical y solo hay tres personas, cuando pasa una hora van llegando. Y entonces me pregunto, ¿como queremos entonces que Dios nos responda cuando necesitamos algo si no somos fieles?
Si en lo poco ha sido fiel, pues en lo que le dará el Señor lo será, pero si en lo poco ha sido infiel o no le interesa, nunca esperé recibir algo del Señor. Dios le da al que está interesado.
© Juan Carlos Jimenez. Todos los derechos reservados.
bendiciones hermano,gracias por compartir sus estudios que me son de mucha bendicion y ayuda en el campo ministrial;oro para que Dios bendiga su ministerio.
Gracias hermano, aunque seamos infieles el permanece fiel usted siga en la lucha y Dios no olvidara su sacrificio en Facebook me encontrará como Juan carlos, y en la página como de mañana oiré su voz devocionales