En el pasaje que estamos estudiando claramente vemos a estos 4 intercesores primero creyendo que su amigo seria sanado por el maestro, pero también accionando, es decir su fe los llevó a cometer “locuras” que llamaron la atención de Jesús en una manera tan grande, que Jesús no tuvo más opción que, no solamente sanar a este joven, si no aun a salvarlo, es decir que la oración hecha con una actitud de fe no solo traerá salvación, sino que producirá milagros y maravillas en la vida de las personas o persona por la que intercedemos.
4. “Entonces vinieron a él unos trayendo un paralítico, que era cargado por cuatro. Y como no podían acercarse a él a causa de la multitud, descubrieron el techo de donde estaba, y haciendo una abertura, bajaron el lecho en que yacía el paralítico.”
Una de las actitudes más importantes que debe de existir en la vida de un intercesor del reino es LA MISERICORDIA, esta es sumamente indispensable que exista en la vida de cualquier hombre o mujer llamado o llamada a interceder, sin ella no podremos cumplir con el llamado de Intercesores de Reino al cual hemos sido llamados.
Nuestra intercesión debe de crear un asiento de misericordia, en el cual el amor y el perdón de Dios puedan sentarse, trayendo restauración, restitución, salvación, etc., y no juicio, esto no quiere decir que el intercesor no recibirá en alguna ocasión, revelación de algún juicio hacia alguna persona, iglesia, país, etc., etc., pero no debemos caer en la ostentación de que tal revelación, Dios nos la dio para jactarnos y regocijarnos en ella, sino mas bien entender que cuando Dios traerá juicio, el se lo revela a sus intercesores, para clamar por su misericordia, como lo hizo Abraham, Moisés, Samuel, David, etc., etc.,
Este es un error muy común que muchos intercesores han cometido, pues al recibir cierta información del reino en cuanto a alguna situación, en lugar de clamar a Dios por tal situación se han convertido en jueces auto justificándose así mismos, es decir, creyéndose y haciéndose más justos que los que serán juzgados, esto es falta de madurez y se llama SOBERBIA y ALTIVEZ DE ESPÍRITU, y de ellas debemos cuidarnos, ya que existe una sentencia en Proverbios hacia los que las practican “Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu”. Proverbios 16:19.
5. “Entonces vinieron a él unos trayendo un paralítico, que era cargado por cuatro. Y como no podían acercarse a él a causa de la multitud, descubrieron el techo de donde estaba, y haciendo una abertura, bajaron el lecho en que yacía el paralítico.”
Una de las características más importantes que un intercesor debe de tener es tener revelación, y revelación viene a través de 2 cosas: CONOCIMIENTO Y COMUNIÓN. La Palabra declara que el todo del hombre se encuentra en “conocerlo y entenderlo” esto es conocimiento y revelación.
Conclusión
¿Qué es conocimiento? Es todo aquello que podamos aprender acerca de cualquier tema por medio de leer o escuchar. En el caso de Dios conocimiento es todo aquello que llegamos a entender acerca de Dios a través de su Palabra o de alguna enseñanza o predicación o de algún libro.
¿Qué es revelación? Es poner por obra el conocimiento adquirido y hacerlo parte de mi vida, como una verdad absoluta.
El conocimiento es responsabilidad de cada hijo o hija de Dios, pues Jesús nos exhorta a leer las escrituras ya que en ellas se encuentran la vida eterna y ellas dan testimonio de Él, la revelación viene a través de un esfuerzo conjunto entre Dios y yo, ¿Cómo es esto? Sencillo mi responsabilidad aparte de estudiar acerca de él es buscarlo en intimidad, es decir en oración, el resultado de esta intimidad traerá a mi vida revelación en el conocimiento adquirido previamente. Dios no me podrá traer una revelación sin antes haber conocimiento previo y el conocimiento no me traerá revelación sin tener una verdadera intimidad con Dios a través de la oración.
Es responsabilidad de cada intercesor tener esta particularidad, pues un intercesor que no tiene conocimiento de la Palabra y que además no tiene comunión real con su Padre, carecerá de revelación para poder interceder por el mismo y por otros, esto hará que su oración sea menos eficaz, trayendo frustración a su vida, es por eso que el intercesor debe de permanecer en constante comunión con su Dios y no descuidar el aprendizaje manteniendo un espíritu enseñable y humilde para recibir siempre nuevo conocimiento.
