Algunos conflictos entre Roma y la Reforma

Esto significa que Dios por ser espíritu, i.e. por definición su Esencia no puede ser contemplada por ojo alguno, simple, i.e. su ser no está refractado en muchas parte, e infinito, i.e. no solamente está presente en todo lugar, sino que trasciende el tiempo y el espacio; a Dios se le ve todo (Porque así lo exige su simplicidad e infinitud) o no se le ve nada; de modo que sólo Dios puede ver a Dios, y un infinito a otro infinito, por lo que un ser finito como el hombre –aun en estado de gloria- no es capaz de capturar al infinito Dios.

No se puede ver una parte de Dios porque Él es espíritu simple, ni verse por completo pues es a la vez infinito.

Finalmente, no tiene ningún sentido orar a los santos, cuando éstos (Según Roma) reciben toda su información directamente de Dios, por lo que resulta insensato y superfluo pedir a cualesquier santos, y no simplemente a Dios.

Bibliografía selecta:

(1) “Catolicismo Romano”, por el ex sacerdote Católico Francisco Lacueva, un excelente libro que recomiendo encarecidamente.

(2) “Catecismo de la Iglesia Católica”.

(3) “Diccionario teológico ilustrado” de Francisco Lacueva.

(4) “Nuevo diccionario de teología” por Sinclair B. Ferguson, David F. Wright y J. I. Packer.

(5) Comentario de toda la Biblia “Mathew Henry”, traducido y adaptado por Francisco Lacueva.

(6) ¿Fue san Pedro Papa?, escrito por el reverendo H. B. Pratt, traducido por Pablo Santomauro.

(7) “Historia del Cristianismo”, obra completa, por Justo Gonzales.

Deja un comentario