Dios quiere que su pueblo sea santo

Un detalle notable que llama la atención, es que una palabra Hebrea cercana a las palabras Hebreas que se usan para santidad:

Kadósh y Kadásh, es: Kadésh. Significa: Idolatría licenciosa; prostitución idolátrica, sodomita.

Esto enseña que la distancia entre santidad y una persona sodomita, prostituta e idolátrica, es relativamente cercana. Esto enseña que se debe ser cuidadoso de estar parados en el camino de progreso en la santidad, de otra manera se corre el riesgo de vivir en cierto nivel de idolatría o prostitución espiritual.

Sin duda, tenemos que crecer en la obtención de la Hermosura de la santidad de Dios; la que adorna y decora para convertirnos en “bellas personas” “personas deseables”; en las personas que los propios familiares desean estar todo el tiempo cerca. Esto es de gran estima delante de Dios.

LA SANTIDAD EN EL ANTIGUO TESTAMENTO

Éxodo 19:6. “Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel”.

Levítico 11:44 “…yo soy Jehová vuestro Dios, vosotros por tanto os santificaréis y seréis santos, porque yo soy santo…”

Estas fueron dos, de las muchas ocasiones en que Dios, ordenó al pueblo de Israel a que se santificara. Además pidió que las gentes que ministraran, y las cosas que se usaran para el servicio de las cosas sagradas fueran santificadas. Esto era:

  • 1.   Los sacerdotes Éxodo 19:22;
  • 2.   Sus vestiduras Levítico 8:30;
  • 3.   El Tabernáculo Éxodo 29:44;
  • 4.   Los utensilios del Tabernáculo Éxodo 40:9;
  • 5.   El sumo sacerdote llevaba una plancha de oro fino en la frente, y la plancha llevaba un sello que decía “Santidad a Jehová”.

El sello de la santidad de Dios

Entonces, todas las cosas debían llevar la marca o el sello de la santidad de Dios. Esto era vital para poder acercarse a la presencia de Dios, y en algunos casos el sacerdote moría a causa de no tener la debida preparación de santificación o limpieza.

Otro Principio Bíblico a considerar: El sacerdote ordinario del Antiguo Testamento, hoy es un tipo o figura del creyente en el Señor Jesucristo, porque cuando hemos nacido otra vez del Espíritu y la Palabra de Dios, tenemos acceso a los privilegios del sacerdote.

Si un hombre nacía en la familia Aarónica y sin embargo tenía algún defecto físico, no podía servir o ministrar delante del Señor. Su nacimiento lo autorizaba a comer del Pan Santo, pero sus defectos le impedían tener el privilegio de ministrar en las cosas santas del Señor.

Esta es una verdad preciosa pero cargada de solemne advertencia para aquellos que tienen oídos espirituales para oír. Los defectos y las fallas físicas eran un tipo y figura de los defectos del alma y del espíritu del hombre.

1 comentario en «Dios quiere que su pueblo sea santo»

  1. La Paz del Señor a todos
    Es de mucha edificación el estudio
    Les felicito y que sigan dando buenas enseñanzas para la santificación del pueblo de Dios.
    SHALOM ADONAI.

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