- La eternidad del amor de Dios: “Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.” Jeremías 31:3
- Inmutabilidad del amor de Dios: “¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?” Romanos 8:35.
- La pureza del amor de Dios: El amor de Dios es puro pues no se doblega ante el pecado ni el mal comportamiento, no consiente al pecado y es por eso que “Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo.” Hebreos 12:6.
Solo hemos mencionado algunos versículos de muchos que demuestran lo que compartimos algunos párrafo atrás respecto a lo atributos de Dios, pero cuando hablamos del amor es difícil no compararlo con el que sentimos como humano
Al preguntarle a mi esposa si el amor dura para siempre, me dijo que no suele suceder
Eso es porque pensamos desde la perspectiva y experiencia humana, debemos tener algo en claro, el amor no proviene del ser humano, fue dado al ser humano. Dios dotó al ser humano con este, pero es imposible que lo tengamos a la medida, magnitud y naturaleza de este. Pues se encuentra bajo limitaciones. Le explico mejor, el ser humano no puede amar eternamente porque no es eterno. No puede amar puramente porque no es puro (la perdió al pecar Adán). El amor del humano se extingue, por que el ser humano es variable y cambiante. Así que, tenemos la capacidad de amar, pero solo bajo las limitantes y posibilidades de nuestro alcance, lo que nos lleva al siguiente punto a estudiar.
En el párrafo anterior decíamos que no podíamos amar según los atributos de Dios pues somos limitados, lo que nos lleva a comprender esta premisa:
“Dios ama porque Él es soberano, nosotros amamos por razones”.
Piénselo de esta forma, pregúntese a usted mismo ¿Por qué Dios me ama? si su respuesta es: “no sé” o similar, su respuesta fue correcta. si usted logró encontrar un argumento entonces usted está muy lejos del cristianismo. El corazón del Cristianismo es que Dios nos amó “a pesar de”, y no, “a causa de”. Eso se llama Gracia. ¡Gloria sea a Dios, que maravillosa verdad!
“Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos).” Efesios 2:4-5. El amor de Dios es inmensurable, no hay límite. El amor de Dios es Eterno y es Infinito porque Dios es Eterno e infinito.
¿Podemos nosotros seres humanos limitados amar como Dios ama?
De ninguna manera, imposible. Pero lo que si podemos es imitar ese amor, buscar amar lo más parecido posible a como Dios nos amó. Precisamente el Apóstol Pablo nos habla de esto: “Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante.” (Efesios 5 1-2). ¿Difícil?, probablemente, ¿Imposible? Conociendo un poco más acerca del amor lograremos imitar a Cristo en nuestros ámbitos familiares, sociales y eclesiásticos.
No pensemos que el amor de Dios finaliza en el sacrificio de Jesús en la Cruz. Él continua demostrándolo para con nosotros cada día, en su cuidado diario, en la provisión, en regalarnos un día nuevo de vida, en la obra que está realizando en nosotros, en escuchar nuestras oraciones, en haber mandado al Espíritu Santo para que no estuviésemos solo.
A continuación mostraremos alguna de las formas en que Dios sigue mostrando su amor para con nosotros día a día, y estoy seguro que usted estará de acuerdo y pensará en muchas otras que aquí no mencionaremos.
El amor de Dios en oír las oraciones
1 Juan 5:14-15. “Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.”
Dios está allí, escuchando cómo sus hijos le adoran, le cantan, le alaban y le piden, pedirle Dios es un acto de Fe, de que el hará, de no creer así ni nos atreveríamos a pedirle. Debes tener la seguridad de que tus oraciones no se las lleva el viento, que tu clamor no se disipa en la distancia.
Tus oraciones son recibidas como olor fragante ante la presencia de Dios, y lo es no porque nuestras oraciones sean demasiado buenas o bien elaboradas, es porque son las oraciones de los Hijos Amados de Dios.
El amor de Dios en provisión
Mateo 6:8 “porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.”
Claro que tenemos necesidades, la salud, la comida, el vestido, los gastos, el trabajo, los niños, entre otros, y trabajamos como es nuestro deber, tal como Dios manda. Sin embargo, no siempre cubrimos todos los gastos. Pero debemos tener fe en que Dios proveerá, ya sea con más trabajo, con bonos o con milagros. Pero si en cambio nuestro trabajo si nos alcanza para cubrir todas las necesidades, también es reflejo de la provisión Divina al darnos esa fuente de ingreso.
El amor de Dios en cuidado
1 Pedro 5:7 “echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.”
El cuidado de Dios es Integral, incluye lo físico, espiritual, emocional y muchísimo más. A veces, pasamos por situaciones peligrosas, accidentes o robos y hemos salido ilesos, sin perder la vida, eso es debido al cuidado de Dios, y si esas son las veces que podemos recordar. ¿Te imaginas la cantidad de situaciones peligrosas que Dios ha evitado que pases?
La relación que Dios tiene con nosotros es de Padre a hijos, y he visto los cuidados, el amor, la protección y lo que haría un padre o una madre para con sus pequeños. He vivido el cuidado de mi papá para mí, pareciera no tener límite y no tener explicación. Si usted es padre o madre deberá tener ese concepto mucho más claro que los que no son.
Vea el siguiente pasaje: “ Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?” Mateo 7:11. El amor y cuidado de Dios para con nosotros sobrepasa cualquier entendimiento e imaginación, fue demostrado en la Cruz: “ Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna.” Juan 3:16. Es tan grande el amor de Dios que fue demostrado en la obra de amor más grande de todos los tiempos y continúa cada día para con sus hijos.
Alcanza aún para con los injustos
El amor de Dios es tan grande que alcanza aún para con los injustos, para aquellos que le rechazan, y Él nos manda a que amemos como el ama, que seamos como Él Es, y como dijimos anteriormente que seamos Imitadores de Él.
Es muy claro cómo debe ser nuestro comportamiento como Hijos de Dios. Debemos imitar su Amor en sus diversos atributos arriba estudiados (no todos sus atributos fueron estudiados) y en sus manifestaciones (darnos como Cristo murió por nosotros), si posee duda de cómo debemos comportarnos, le invito a leer Mateo 5:38-48.
Conclusión
Querido hermano, la finalidad de este estudio no es otra que aprendamos del amor de Dios. Seamos agradecido a Dios por tanto amor que nos ha dado y demostrado, y que vivamos conforme a este amor. De nada sirve tener un conocimiento de este tema y no vivirlo. Concluyo con la siguiente cita bíblica en espera, y creyendo que este estudio bíblico será de bendición como lo fue para mi.
“Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe. Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy. Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.” 1 Corintios 13:1-3. Dios te Bendiga.
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