La Fe y el Líder

Mensajes Cristianos

Prédica de Hoy: La Fe y el Líder

Mensajes Cristianos Lectura Bíblica: “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.” Hebreos 11:6

Introducción

Una de las grandes necesidades del liderazgo cristiano hoy en día es aprender a vivir por fe. Los líderes necesitan un nivel de fe que les dé confianza en Dios, para ejercitar un efectivo ministerio personal, y osadía, para confrontar a las personas con las necesidades de Dios.

De hecho, ellos necesitan construir una expectativa de fe en su gente. De esta manera, los líderes podrán ministrar a su gente con más efectividad, porque Dios podrá hacer más (2 Corintios 10:15).

Además, la gente crece espiritualmente cuando ejercita su fe, así que los líderes deben dejar que su gente entre a esta área tan importante.

La fe no es algo estático, sino una revelación abierta al poder y al carácter de Dios que necesita entenderse con gran intensidad.

La fe es el medio por el cual hacemos que las cosas de Dios sean reales y tangibles dentro del campo de nuestra experiencia humana. Como hemos visto, la fe no puede reducirse al nivel de una fórmula donde cada cosa que necesitamos o queremos la tengamos.

La fe depende de Dios y viene a nosotros a través de Él y Su Palabra

Por lo tanto, los líderes deben ser maduros, gente con experiencia que conozca a su Dios y sus caminos. Sus corazones deben mantenerse al ritmo del corazón de Dios. Los líderes de Dios deben vivir en fe, porque la fe abarca cada aspecto y área de la vida cristiana. Hebreos 11:6 nos recuerda que “sin fe es imposible agradar a Dios.”

“…Acuérdense de sus dirigentes, que les comunicaron la palabra de Dios. Consideren cuál fue el resultado de su estilo de vida, e imiten su fe…” (Hebreos 13:7)

Los líderes de Dios necesitan la habilidad de anunciar la fe e inspirar a la gente que lideran a una vida de fe. La fe es un principio difícil de enseñar, es un don espiritual y, por lo tanto, no puede ser enseñado por continuas repeticiones, i.e. no se puede aprender sobre la fe simplemente por leer un libro o escuchar una cinta de audio.