Mensajes Cristianos – Predicas Cristianas
Texto Biblico: 2 Reyes 5
Nos relata una historia que refleja una realidad hoy en día. Naamán era un general sirio, muy conocido por sus batallas, logros que tuvo en su conquista. Naamán representa a muchos líderes, pastores, y cantantes, que cuando comenzaron su vida cristiana, Dios los llevo, hasta donde están hoy.
Pero llegó un tiempo en la vida de Naamán que su piel comenzó a pudrirse; era lepra, una enfermedad de vergüenza que él tapaba con sus vestidura de general, la gente solo veía a un general que traía victoria y bendición a su patria, pero detrás de esas medallas, había lepra.
Yo sé que este puede ser tu caso, de pronto llegó un momento en tu vida en que nada ya es igual en tu ministerio por causa del pecado, enfermedades, o debilidades, que entraron a tu vida. Pero cada vez que predicas, o sirves a otros, todos piensan buenas cosas de ti, pero solo tu sabes y sientes que esa lepra día a día te esta volviendo más miserable por dentro, te estas muriendo.
Pero Dios, es tan BUENO, QUE NO TE DEJA MORIR, SU MISERICORDIA SIGUE ALLÍ PARA CONTIGO, no te da el castigo que mereces, pero si te da la OPORTUNIDAD de empezar una nueva vida en Él.
Fue la sierva de Naamán quien Dios usa para traer sanidad completa en la vida de este varón.
Bendito sean aquellas personas, que siempre oran por ti, que siempre te dan palabra de parte de Dios, porque saben que tu eres importante para la Iglesia De Dios.
Naamán aceptó ir donde estaba ese profeta, para que Dios lo sanara. Hoy tu no necesitas ir a alguien que lo pueda hacer, tu puedes ir directamente a Jesús.
El profeta le dijo lo que tenía que hacer, pero él se molesto, y no quiso hacerlo.
¿Cuantas veces has escuchado predicas de arrepentimiento, de sanidad, buenos sermones, pero no has sentido nada?
Al igual que Naamán, tu sabes muy bien lo que tienes que hacer para ser sano. No necesitas buscar la respuesta, tu ya la sabes. Pero si te dejas llevar por tus emociones, tal vez nunca serás sano.
No hay peor cosa que ver cómo otros están siendo sano por tus predicas, mientras que tu te estas muriendo por dentro.
Dios quiere sanarte, Él es el único; Jesús en esa cruz murió para que tu seas sano, libre, y fue hasta el infierno, pero la muerte no pudo contenerlo. ESE MISMO PODER TE VA LEVANTAR DE DONDE ESTAS, la obra de Jesús esta completa.
Los días pasan y no podrás recuperarlos, Dios quiere sanarte ahora. Eres su vaso, ¿pero un vaso, vacío, que podrá ministrar, o un vaso enfermo?, ¿hasta dónde podrá llegar Él?.
Te lo dice un pastor y salmista, que hoy es sano por la gracia de Jesús, y no hay nada mejor que servir a la Iglesia de Dios sano. Yo me arrepentí; por tanto tiempo no deseaba liberación y sanidad, varios años así sin lograr nada. Hoy estoy muy agradecido con él por su sanidad.
Si ya estás harto de fingir que tienes a Dios, si ya estas cansado de vivir una doble vida, es tiempo, de acercarte a Jesus y dile “Señor Jesús yo reconozco que te he fallado, que me estoy muriendo día a día, con esta lepra de “x” (dicelo), yo renuncio a todo esto, tu eres mi salvador, mi sanador, sáname, libérame. Perdona todos mis pecados, en aquella cruz te llevastes todo, tu obra en la cruz fue completa, entra a mi vida, y vive junto a mí; tomaré decisiones que me acerquen más a ti, te entrego todo lo que soy. Amen”
Oro mucho a Dios, para que usted estimado lector, pueda ser restaurado, se necesitan personas restauradas, ya que son muchos los que necesitan palabra de parte de Dios.
© Abraham Amengual Chiok
