Mensajes Cristianos
Mensajes Cristianos Predica de Hoy: Todo lo podemos en Cristo que nos fortalece
Mensaje Cristiano Texto: Filipenses 4:13
Introducción
TODO es TODO pero es con Cristo, no distantes de Él ni fuera de Él, sino en EL. Tú lo puedes todo hermano, si permaneces en Cristo, porque sin EL nada podemos lograr.
Permanecer en Cristo
En la palabra de Dios en (Juan 15), nos dice la forma de como permanecer en Cristo y nuestro Señor lo dijo a sus discípulos cuando estaba cerca de ser tomado preso.
“Yo soy la vid verdadera” A veces el orgullo nos hace creer que en nuestras propias fuerzas podemos lograr todo, pero la autosuficiencia son enemigos del crecimiento espiritual, porque dependemos de Cristo para lograr cumplir nuestros propósitos y hay una sola planta y una sola vid que se llama Jesús.
“El Padre es el labrador” El labrador es el que cuida las plantas y el único que existe es Dios.
Los creyentes son las ramas. (Juan 15:2) “Toda rama que en mí no da fruto, la corta; pero toda rama que da fruto la poda para que dé más fruto todavía”. Hermanos somos ramas que depende de la vid que es Cristo, estamos adheridos al árbol que es el Señor Jesucristo.
La palabra de Dios es la podadora. Nos dice que nosotros ya estamos limpios por la palabra que nos ha comunicado, la biblia nos limpia para que podamos producir fruto.
El árbol podado da más fruto. Cada que vamos a una predica cristiana o leemos la palabra de Dios el Señor nos quita hojas secas que tengamos en nuestro corazón para que demos más fruto.
La permanencia en Cristo
“Permanezcan en mí y yo permaneceré en ustedes” (Juan 15:4). Somos las ramas y debemos permanecer en El para que El siempre permanezca en ti. Adhiérete a Cristo que es la vid y que Él te irrigue con su bendita sangre que es la sabia y así darás fruto.
Las ramas secas serán quemadas
(Juan 15:6) “El que no permanece en mi es desechado y se seca, como las ramas que se recogen, se arrojan al fuego y se queman”. La soberanía de Dios se liga al libre albedrío del hombre, siempre van los dos juntos. Si ya no estamos en Cristo la rama se seca que somos nosotros y se echan al fuego.
La permanencia en Cristo obtiene respuesta. (Juan 15:7)
“Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y se les concederá”. La palabra de Dios debe estar en nosotros, que sea nuestra guía al tomar decisiones y en todo momento de nuestras vidas. He conocido varios cristianos que piden y no se les concede, es porque no permanecen en Jesús. El Señor te concederá TODO si permaneces en Él.
La permanencia glorifica al Padre. (Juan 15:8)
“Mi Padre es Glorificado cuando ustedes dan mucho fruto y muestran así que son mis discípulos”. Somos una rama de la vid que es Cristo y practicando en todas nuestras actividades lo que dice su palabra damos fruto para ser discípulos de Cristo.
La permanencia es amor. (Juan 15:9)
“Así como el Padre me ha amado a mí, también yo los he amado a ustedes. Permanezcan en mi amor”. El amor viene del Padre porque Dios es amor. Sanemos nuestros corazones de resentimientos, amargura, odios, porque solo el que permanece en amor, permanece en Cristo.
La permanencia en Cristo es obediencia. (Juan 15:10)
“Si obedecen mis mandamientos, permanecerán en mi amor, así como yo he obedecido los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor”.
La garantía para permanecer en Dios hermanos es obedecer sus mandamientos, toda desobediencia no permanece en el amor de Cristo porque sería un acto de desamor. Obedecemos porque lo amamos no por miedo. El temor de Dios no es miedo sino obediencia a sus mandatos.
La permanencia es alegría. (Juan 15:11) “Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea completa”. Permanecer en Dios es estar llenos de amor, alegría, y paz. La alegría es una característica del fruto del Espíritu Santo que nosotros damos.
La permanencia es amistad. (Juan 15:12-14) “Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado, nadie tiene amor más grande que dar la vida por sus amigos, ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando”. Tratarnos unos a otros como amigos, Dios es nuestro amigo. Una amistad que no se base en interés, sino en un afecto fraterno.
La permanencia en Cristo es conocimiento. (Juan 15:15)
“Ya no los llamo siervos, porque el siervo no está al tanto de lo que hace su amo; los he llamado amigos, porque todo lo que a mi Padre le oí decir se lo he dado a conocer a ustedes”.
Jesús como nuestro amigo, no tiene secretos, todo lo que le contó el Padre nos lo contó a nosotros, y no lo transmite para que lo conozcamos. Es conocer lo que piensa el Padre a través del testimonio de su hijo.
La permanencia es elección. (Juan 15:16) “No me escogieron ustedes a mí, sino que yo los escogí a ustedes y los comisione para que vayan y den fruto, un fruto que perdure. Así el Padre les dará todo lo que pidan en mi nombre”.
El Señor nos escogió, no es coincidencia que quieras saber más de Él, porque el conocimiento nos hace sabios y nos prepara para tener argumentos sobre cómo llevar sus enseñanzas a la vida práctica.
Conclusión
Hermanos somos nosotros los que debemos cambiar, enseñemos a la sociedad como ramas de la vid que es Cristo y demos fruto para glorificar al Padre, no por obligación sino por convicción y testimonio de lo que El Señor ha hecho en nuestras vidas.
¡Dios los bendiga!
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Hnos,gracias por tan excelentes mensajes,estudios biblcos.Dios les bendiga abundantemente!!!