Mensajes Cristianos
Prédica de Hoy: ¿Cuanto de tu amor das al Señor?
Mensajes Cristianos Lectura Bíblica: Juan 3:16
Introducción
¿Cuanto de tu amor das al Señor? Él lo ha dado todo por ti, se ha entregado en sacrificio para que seas libre de pecados y te buscó para que tengas vida eterna; ¡¡Y tu……..!! cuanto has hecho por Él, cuanto de tu amor has entregado para la extensión de su obra.
Leamos la Palabra de Dios en Juan 3:16 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquél que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” y en Proverbios 24:12 “Porque si dijeres: Ciertamente no lo supimos, ¿Acaso no lo entenderá el que pesa los corazones? El que mira por tu alma, él lo conocerá, y dará al hombre según sus obras”.
En este día, con las navidad a punto de llegar, quisiera que reflexionemos respecto del amor que Dios derramó sobre toda la humanidad, al punto de entregar a su unigénito Hijo en rescate por esa humanidad; Dios entregó a su único Hijo, Jesús, por una humanidad que en parte ha recibido la luz necesaria para valorar este sacrificio, y en parte lo rechaza, lo desconoce o simplemente lo ignora.
Dios, el remedio perfecto
Es Dios quien entrega a toda la humanidad el remedio perfecto para sus males. Nos entrega el remedio y nos dice la forma en que debemos tomarlo. Cada uno de nosotros sabemos que para que un remedio haga efecto debemos tomarlo en la dosis necesaria y no basta con solamente mantenerlo en el botiquín.
Y el Señor nos dice que este remedio milagroso se toma mediante la fe. El remedio de Dios es efectivo solamente en quienes creen con una fe viva. “Según Dios” (2 Corintios 7:9), es esta la fe que produce cambios de mentalidad y de actitudes en las personas, es la que produce verdaderas conversiones.
La serpiente de bronce (Números 21:4-9)
No curaba en forma automática, sanaba a quienes levantaban su mirada a ella, pero creyendo en su corazón que tenía el poder para hacerlo y además lo hacían con el anhelo de ser curado de su mal.
Dios habló siempre a su pueblo de la necesidad de creer. De poner nuestra mirada en Él, “el autor y consumador de la fe” (Hebreos 12:2), para ser sanados en cuerpo, alma y espíritu. Resultando Jesús el único médico que brinda garantía al garantizarnos vida eterna, “Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay mas” (Isaías 45:22).
El amor de Dios por el hombre
El amor de Dios por el hombre es tan grande que entregó a su Hijo en redención por todos, aunque lo cierto sea que no todos gozarán de este beneficio sino solamente aquellos que creen que Jesús es el Hijo de Dios y le reciben en el corazón como su Señor y Salvador personal.