Supremo amor

1° Pedro 4:8Y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor

Que Dios derrame de Su supremo amor en nuestros corazones, solo este amor inigualable, incomparable y eterno, podrá cambiar completamente nuestras vidas. Un día todo terminara y dejará de ser, pero lo que nunca dejará de ser, es su amor que permanecerá eternamente y para siempre.

  • Debemos avivar el fuego de su amor cada día en nuestros corazones.
  • Debemos amar y obedecer Su palabra.
  • Debemos estimularnos al amor y a las buenas obras.
  • Debemos servirnos por amor los unos a los otros.
  • No debemos amar de palabra sino de hecho y de verdad.

Y sobre todo como exhorta Pablo a los Corintios “No demos a nadie ocasión de tropiezo para que nuestro ministerio no sea vituperado.” (2 Corintios 6:3)

Un día estando en comunión, Dios me revelo este maravilloso misterio de resurrección, vida y poder de su eterno sacrificio en la Cruz del Calvario. Mis entrañas se conmovieron, mi corazón latía aceleradamente y las lagrimas salían como ríos de mis ojos, y desde ese mismo momento supe que nunca podría dejarlo, que sería el centro de mi vida y la única razón de mi existir, que le pertenezco y que debía servirle mientras tenga aliento de vida y hasta llegar a su misma presencia.

Ese día comprendí que tengo un solo motivo de vida y se llama Jesucristo, Él no me dejará y permanecerá fiel eternamente, me tomará de la mano y me guiará por el camino de Su amor y de Su salvación.

Romanos 14:8Pues si vivimos, para El Señor vivimos y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o muramos, del Señor somos.”

Hoy te pregunto. ¿Cómo podrías demostrar con tu vida que le amas por el sacrificio de amor que Él ha hecho por ti? Solamente tú tienes la respuesta; no tardes en responderle, Cristo te ama y te necesita.

Amado hermano, mi deseo y mi oración al Padre es que revele a tu vida ese maravilloso y amado sacrificio de supremo amor en la cruz del calvario por ti, para que así puedas rendir completamente tu vida a Cristo abrazando cada día su cruz hasta llegar al supremo llamamiento.

© Reenier Gonzalo Prado. Todos los derechos reservados.

Central de Sermones… Mensajes Cristianos

Deja un comentario