Inicio » Mensajes Cristianos » El Espíritu Santo habite en nosotros

El Espíritu Santo habite en nosotros

Mensajes Cristianos

Predica de Hoy: El Espíritu Santo habite en nosotros

Mensajes Cristianos Texto bíblico: Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.” (2 Corintios 3:17)

Introducción

Tenemos el Espíritu de Dios en nosotros

Desde que fuimos llamados y respondimos, Dios está con nosotros. Desde antes también lo hizo, invitándonos a ser hijos suyos. Por el bautismo hemos muerto al hombre viejo, y hemos renacido como hombres nuevos para una vida nueva. Desde entonces, el Espíritu hizo de nosotros su morada.

Ahora depende de nuestro obrar y de nuestros pensamientos si Él seguirá habitando en nosotros. Porque un alma pecadora no puede ser el lugar donde habite el Espíritu del Señor.

Debemos mantenernos puros para que su presencia no nos abandone. Y si bien nunca dejaremos de ser pecadores, pidiendo con fe la conversión y arrepentidos de corazón, dejaremos que nos purifique con su poder. (1 Corintios 6:19-20)

Nunca podremos considerarnos dignos de que habite en nosotros el Espíritu Santo. Pero no es una cuestión de dignidad simplemente, sino de búsqueda de Dios. Él nos ha prometido que nunca abandonará al que lo busque. Y nosotros, cuando pedimos el Espíritu Santo, lo estamos buscando con tanta ansia, que deseamos ser su templo.

Antes de la venida de Cristo, la relación con Dios era distinta. No teníamos conocimiento total de su Palabra. Estábamos presos de la iniquidad, y no teníamos los medios para la salvación, porque la muerte se enseñoreaba de nosotros. Con su venida, y luego el envío del Espíritu Santo, no estuvimos solos nunca más.

El Espíritu Santo no nos abandonará nunca

Porque el Espíritu Santo es lo más íntimo que tenemos. Podemos decir que un amigo nos conoce, que nuestra madre nos conoce. Pero nadie puede conocernos tanto como el Espíritu Santo. Él sabe de nuestras debilidades y de nuestros deseos. Conoce nuestra necesidad antes incluso que nosotros mismos. Por eso, debemos pedirle a Él que no nos abandone.

Deja un comentario