Puerta de los caballos fue restaurada por los sacerdotes
Esta puerta de los caballos fue restaurada por los sacerdotes, o sea que se refiere que debe ser reparada por cada uno de los que han venido a Jesucristo. Debe evitar que las emociones le invadan o usarlas para pelear en la batalla.
Debemos de dejar que nuestro Dios pelee por nosotros, entreguemos esa puerta al Señor, usémoslas solo para alabar y glorificar a nuestro Señor Jesucristo ya que con Ella podremos hablar con el, llorar ante el, danzar ante Él, saltar ante Él.
Es la puerta para acceder a Su presencia al estar adorando al Señor, y por eso muchos no la usan para este fin. La usan para los fines equivocados y ponen razón en ella, y no es para poner razón o pensamiento sobre ella. Es para alabar al gran Yo soy, Dios mismo. Él es el Gran Yo soy, no es para nuestro ego, o nuestro yo soy. NO, es para alabanza de Su nombre.
Por eso los que dirigen alabanzas deben cuidar mucho esta puerta, ya que pueden pensar en algún momento que la alabanza es de ellos, o ellos la generan y pueden ser tergiversado eso por el mismo enemigo, y llegar a pensar alguien que ellos son los únicos capaces de llevar a Dios a las personas con la alabanza y debe ser bien claro este concepto, pues Satanás antes se encargaba de eso.
La puerta de los caballos nos hace entrar en esa presencia del Señor
Debemos saber cómo adoradores que la puerta de los caballos nos hace entrar en esa presencia del Señor, y los que adoran al Señor, debemos hacerlo en espíritu y en verdad
No te avergüences de levantar tus manos al Señor y alabarlo. Restaura tu puerta y haz lo que debes hacer con ella, darle la alabanza a Él y solo a Él para que tu confianza esté solo en Él y seas más fuerte y confiado en Jesús.
Al que cree, todo le es posible
Jesús le dijo: “Si puedes creer, al que cree todo le es posible.” Marcos 9:23
Conclusión
En este tiempo de enfermedades como ser el Covid 19, que a mi ver es una patología creada y al mismo tiempo tiene un componente demoníaco, ya que cuando ves un símbolo de positivo trae tragedias a las emociones de las personas que aunque ellas sean fuertes, pero los que están a su alrededor no lo sean y por tanto al saber ese resultado sean afectados los que nos rodean.
Por eso las enfermedades son de manejo privado y no público porque se daña a segundos y terceros que están solo de tocar, ya que los medios o miedos de comunicación les han afectado su sistema límbico y se han llenado de lo que no deberían.
Los médicos que estamos llenos de ciencia, es muy fácil que el orgullo nos invada al saber una que otra enfermedad. Y por eso muchas veces nos dañamos más, ya que debemos entregar a Jesús esta área y proclamar desde nuestras oficinas, clínicas y hospitales a Jesucristo a nuestros pacientes.
Si lo proclamamos es porque Jesús está en nosotros. Los resultados serán aún más sorprendentes tanto en el paciente como en el médico y sus respectivas familias. Es tiempo de buscar a Jesucristo. Él es el Único, recuerde Único camino, la Verdad y la Vida.
© Dr. Mauricio Loredo. Todos los derechos reservados.
