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Dónde dejamos a Dios

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Mensajes Cristianos Predica de Hoy: Dónde dejamos a Dios

Mensaje Cristiano Palabra de Dios de hoy:

  • Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada.” Juan 8:29
  • Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, más vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del hijo de Dios, el cual me amo y se entregó a sí mismo por mí.”  Gálatas 2:20

Introducción

Jesús logró una unidad perfecta con el Padre al someterse, tanto en cuerpo cómo en espíritu, a la voluntad del Padre. Al referirse a su Padre, Jesús dijo: “…yo hago siempre lo que a él le agrada….

De la misma manera, tú y yo podemos poner a Cristo en el centro de nuestra vida y llegar a ser uno con el al igual que El es uno con el Padre.

Todos tenemos prioridades. Organizamos nuestros horarios, presupuestos y relaciones de acuerdo al grado de importancia que le damos.

Poner a Dios en primer lugar significa que le damos la máxima prioridad sobre todo lo demás.

El es lo más importante en nuestra vida y el centro de todo lo que hacemos y pensamos. Cuando decidimos poner a Dios en primer lugar, determinamos que El es más importante que cualquier otra persona, que Su palabra es más valiosa que cualquier otro mensaje, y que Su voluntad es más importante que cualquier otro requisito.

Poner a Dios en primer lugar significa que guardamos el mayor mandamiento: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente“. Mateo 22:37. En otras palabras, estamos totalmente involucrados en nuestra relación con Dios. Todo lo que somos se lo dedicamos a Él.

Poner a Dios en primer lugar significa que evitamos la idolatría en todas sus formas.

Poner a Dios en primer lugar significa que nos esforzamos por seguir los pasos de Jesús.

Poner a Dios en primer lugar significa que decidimos servir con agrado.

Poner a Dios en primer lugar significa que nos despojamos de todo lo que impide esa perfecta relación con el Padre.

Pero, ¿cómo es esto posible?

Podríamos comenzar como te decía anteriormente por despojar de nuestra vida todo aquello que sabemos que nos impide lograr colocar a Jesús en el centro de nuestras vidas, poner un orden de prioridad con el Salvador en el centro.

Tener siempre en primer lugar aquellas cosas que hacen posible que siempre lo recordemos: orar con frecuencia, estudiar y meditar las escrituras, la adoración genuina, una palabra de agradecimiento de continúo en nuestros labios, el amor reflejado en nuestro ser para con Dios y nuestro prójimo.

Cuando Jesús ocupe el centro de nuestra vida las cosas pequeñas serán desplazadas a un segundo o tercer plano.

De esa manera no reemplazaremos lo esencial de nuestras vidas con cosas meramente buenas, y las cosas de menos valor tendrán una prioridad menor o desaparecerán por completo.

El secreto de permitir a Dios ocupar el centro de nuestras vidas más que una necesidad es una obligación.

Apóstol Pablo entendió esta gran verdad por eso podía expresar “…con Cristo estoy juntamente crucificado y ya no vivo yo más vive Cristo en mí;…

El amor de Dios no se impone, se modela se inspira y se transmite de padres a hijos cuando es parte de una experiencia cotidiana. Significa una relación que transmite vida, alegría, gratitud, paz, esperanza, Ilusión y fe. Cuándo entendemos el verdadero orden qué debemos tener en nuestras vidas todo marchara correctamente.

  • Dios.
  • Familia.
  • Ministerio.

El estado de este orden en nuestras vidas se traduce como obediencia y esta siempre tiene consigo beneficios. Cuándo colocamos a Dios en el centro de nuestras vidas aún nuestra familia se beneficia.

  • 1 Ponemos a Dios como el fundamento ético y moral que guía a la familia.
  • 2 Transmitimos fe y esperanza nuestros hijos.
  • 3 Enseñamos a nuestros hijos a confiar en Dios.
  • 4 Creamos una costumbre en ellos que nunca se olvida.
  • 5 Nos une como familia.
  • 6 Sabemos acudir a Dios en medio de la crisis.
  • 7 Es una contención para la familia en los momentos cruciales.
  • 8 Nos enseña a dialogar como familia y a escucharnos unos a otros.
  • 9 Nos muestra el camino al éxito duradero.
  • 10. Nos enseña a disculpar el error y a pedir perdón cuando nos equivocamos.

Poner a Dios por encima de todas las cosas más es fácil decir, pero realmente lo importante es hacerlo, esto te traerá desprenderte de aquello que crees es beneficio a tu vida, te tildaran de fanático, las criticas estarán a la orden del día, pero no importa si realmente sabes que la decisión que estás tomando trae grandes beneficios.

Cómo hijo de Dios conságrate, entrega todo y obedece a aquel que te llamo y quiere ocupar el centro de tu vida. Tenlo siempre presente los que ponen a Dios en primer lugar siempre se distinguirán de resto del mundo. Obedecerán los mandamientos de Dios, tomarán su cruz y seguirán a Jesús, y no abandonarán su primer amor. Los que ponen a Dios en primer lugar entregan a Dios las primicias no las sobras.

Conclusion

Haz que tu vida cristiana se characterize por el servicio desinteresado Dios en cada momento, que fluya en ti el amor a él y a Su pueblo. En todas situaciones confiamos, obedecemos y amamos a Dios por encima de todo, porque sabemos quién está ocupando un lugar importante en nuestra barca.

Que en esta noche podamos entender la importancia de colocar a Dios en primer lugar, cedámosle el lugar que siempre le ha correspondido en nuestras vidas. No lo dejes a un lado, dejemos que Dios sea el centro de nuestras vidas.

Amén

© Osmany Ramón Morales Aguila. Todos los derechos reservados.

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