Reflexiones Cristianas
Reflexiones Cristianas – Texto Biblico: Mateo 25:35-40
Eran las 3 de la mañana y los pasillos de aquel hospital deteriorado lucían con personas yendo y viniendo. Además se podía ver entre tantas personas caminar, unos especies de ángeles (enfermeras) con sus blancos trajes y otras con su blancura mezclada con azul.
Me percaté en aquella escena donde vi que una de las enfermeras llevaba un tipo carrito de curaciones, y estaba en aquella sala de emergencias. Yo pude notar que los quejidos de la mayoría de ellos eran reales, y algunos de ellos levantaban la mano para que aquella enfermera les ayudará con sus dolores a esa hora, porque ella estaba administrando lo que los médicos habían ordenado en aquellos expedientes.
Observe que ella tenía varias grandes jeringas llenas de líquido y con cada una de ellas rotuladas y al llegar a cada paciente a esa hora de la madrugada les preguntaba su nombre como para confirmar que esa medicación era para dicho paciente. Podía ver que cada paciente recibía su médicamento en la vena ya con su guía de venoclisis y podía ver la tranquilidad que eso les generaba.
Mientras ella seguía haciendo su rutina podía observar su rostro aún alegre a pesar de la hora que ya pegaban las 3 de la mañana. Noté que un médico se le acercó con una placa en su gabacha de color roja y ella se desplazó al paciente que el médico le indicó. En ese mismo instante como que me desconecté de lo que estaba observando y noté que ella obedeció y le dije a mi amigo que estaba casi cabeceando; mira como las enfermeras obedecen a los médicos.
Mi amigo me dijo: si, claro, imagínate que ellas no siguieran esas directrices sería todo un desastre, pues ese toque solo pueden tenerlo ellas con su toque de amor como las madres. Mira a mi me pasó lo siguiente y me comenzó a contar:
Yo, la vez pasada no quise ir a traer la cena que me dijeron que trajera, ¿y qué crees que ocurrió? Pues nadie comió. Yo le escuchaba atentamente y me siguió diciendo: ese día ni yo pude comer, o sea que mi rebeldía me llevó a padecer también. Si fui un tonto al hacer eso.
Pero míralas a ellas, como revisan esas órdenes de cada expediente y hacen las pruebas de penicilina si les toca hacerlo y no deben de equivocarse a estas horas de la madrugada. Ademas ellas son las que al no estar aquí tus familiares se convierten en tus familiares más cercanos, y te hacen las curaciones. Mira por ejemplo a aquel señor allá en esa cama. Entre dos enfermeras lo bañaban y mira la contextura de él, y dos enfermeras se las ingeniaron. ¿No crees que ellas hacen una gran y noble labor?
Yo asentí y le dije: mira realmente que obedecer siempre me ha costado. Aquí hay que estar claro que obedecer es la parte fundamental para una enfermera o enfermero. Yo las compararía a las madres, ya que lo que ellas te hacen solo la madre o la esposa lo harían. Pues al no haber familiares ellas prácticamente le hacen de todo, y muchos no mueren no porque el doctor sea el mejor, sino por los cuidados de ellas en ese lecho.
Reflexiones Cristianas – Las enfermeras originales
Pero también veo que algunas son poco enojadas expresé. Y me contestó mi amigo: pero como no se van a enojar, si el ser humano es lo más duro que habemos. Por eso ellas tienen que explotar a veces, y debemos compréndelas.
Yo asentí y le dije: fíjate que tienes razón. El continuo hablando: mira, tu en verdad te das cuenta de la labor que ellas hacen hasta que estas a Merced de ellas. Las que traen esa vocación te recuerdan a tu. madre, ya que solo el amor de una madre puede lidiar con un enfermo a tal magnitud sin ser familiar, o sea que son otro nivel.
Quiero que veas ese cuadro ahorita allí me dijo mi amigo. Ese médico interno está con la enfermera ayudándole a hacer esa curación a ese joven que lo más que tiene son 20 años, que tiene esa tremenda úlcera. Óyeme, ¿qué harían los hospitales sin estos ángeles de las enfermeras?
Sencillo hermano, colapsan, morirían más personas de lo que crees; pues los cuidados de enfermería son vitales, vitales hermano. Mira que yo vi la vez pasada a una de ellas enseñarle a uno de los que están haciendo su especialidad que debía tratar de ser más condescendiente con los pacientes.
Bueno y entonces pregunté: ¿por qué algunas enfermeras se hacen amargadas? Bueno, me dijo mi amigo: veras, eso no es difícil de contestar. ¿Has visto objetos originales y objetos copias? ¡Si claro, todo el tiempo por todos lados!
Bueno, entonces, los objetos copias siempre estarán y los originales también. Solo que los originales son inconfundibles. Las copias las notas por su textura que es rústica, y sin detalles. Los colores no son vivaces, el envoltorio es más sencillo que lo que viene dentro. Pero el original viene desde adentro con esos detalles y por fuera también. Así que esa es mi explicación.
Bueno, me queda claro le dije. Hay una última pregunta: ¿es así en todas las carreras? Casi aplica para todo, recuerda el envoltorio es engañoso, lo ideal es que todo sea igual. Pero es fácil reconocer. Mira el trato y allí verás todo. La que trata bien casi siempre esa es la original, la que trata mal casi siempre esa es la copia. En ese momento de la plática me quedé dormido. Luego el guardia nos sacó afuera de la sala, y tuvimos que irnos al auto a dormir. Ese día aprendí tanto en ese sanatorio.
Que bueno contar con excelentes enfermeras originales. Personas las cuales en su buen trato de casi siempre se podrán notar y esa palabras de aliento mientras curan una herida, aplican un medicamento eso es algo que es como un anestésico a la situación que se vive. Ellas realmente son ángeles del cielo. Las originales que llenan de bendición esos centros asistenciales llenos de dolor y soledad, ellas llenan esos espacios.
© Dr. Mauricio Loredo. Todos los derechos reservados.
