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“Peccata minuta”

Reflexiones Cristianas

Predica de Hoy: Peccata minuta

Reflexiones Cristianas Texto Bíblico: Juan 8:1-20

Texto clave: “…el que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la primera piedra contra ella”. Juan 8:7

Introducción

Existe una expresión latina que reza “peccata minuta”, con esto se indica que lo que se hizo es una acción sin poca importancia, sin mucho valor. Es decir, sus acciones son mínimos pecados.

Hoy esta expresión de peccata minuta se escucha muy poco, pero en las ideas, deseos de aprobación se observa y reclama. Basta con oír la palabra ¿quién eres tú para juzgar la vida de ella o él?

Pese de que estamos en una sociedad de linchamiento, cada uno lincha desde lo que cree que es bueno y aceptable según la cultura. Cada uno acusa desde lo que cree o siente que es peccata minuta.

Una sociedad de linchamiento

En nuestro relato bíblico observamos a una sociedad de linchamiento, listos para hacer justicia con su propia mano. Y con mala intención traen el caso al Nazareno que se había dado cita en el templo.

Jesús al oír el caso, dijo: el que esté libre de cargos de pecado, sea quien tome la iniciativa de la ejecución, al oír la perspectiva de Jesús y acusados por sus propias conciencias abandonaron su actitud de linchamiento y se retiraron.

Al retomar el asunto de aquella mujer sorprendida en adulterio, dijo: ¿Dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.

Es evidente que Jesús no solapa el pecado, diciendo es peccata minuta, sino que cumple su propósito de libertarnos de nuestros verdugos y jueces que nos acusan, rechazan y condenan.

Conclusión

Pensamiento para llevar: “Jesús vino a liberarnos de nuestras propias maldades, tanto mentales, emocionales y conductuales. Él, no nos condena, pero tampoco solapa nuestras maldades, sino que nos perdona y pide que abandónenos toda nuestra acostumbrada maldad”.

Oración: Padre, gracias por perdonarme de todas mis maldades, gracias por darme la oportunidad de cambiar mi estilo de vida de maldad, gracias por tu paz.

© Saúl Reyes B. Poot. Todos los derechos reservados.

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