Hoy quiero compartirle que la presencia de Dios no un simple instante, la presencia de Dios es un estado o una dimensión a la que se llega luego de vivir ciertos procesos. No basta con llegar y presentarse por un instante; quizás como la posición del que es ratón, que pasa a gato en la ronga siguiente vuelve al puesto del ratón, o como hacen los padres cuando llegan tarde a la reunión de entrega de boletines o escuela de padres; solo para firmar la asistencia y tener al profesor satisfecho todo el resto del periodo.
Hoy vamos a estudiar varias de las formas por las cuales se puede llegar a la presencia de Dios, pero también vamos a descubrir que solo hay una forma segura de permanecer en esa presencia y que es a ese punto donde debemos llegar, a PERMANECER.
A la presencia de Dios se puede llegar por:
I. LLEGAR A LA PRESENCIA DE DIOS POR INTIMIDACIÓN
Intimidación es el acto de hacer que los otros hagan lo que uno quiere a través del miedo. La intimidación puede manifestarse como una manera de amenaza física, miradas amenazantes, manipulación emocional, abuso verbal, humillación intencional y/o verdadero maltrato físico.
La intimidación puede ser empleada conscientemente o inconscientemente, y un porcentaje de gente que lo emplea conscientemente puede hacerlo como resultado de tener ideas racionalizadas de apropiación.
1 Samuel 2:12-17, 22-24.
Los hijos de Eli, conocían de Jehová, pero no le conocían en persona; no ofrendaban y menospreciaban sus ofrendas. Eran pecadores y no tenían testimonio.
Por esta causa, estando acampando el pueblo de Israel en Eben – Ezer, fueron atacados por los filisteos y muertos muchos israelitas. El pueblo se lleno de miedo por no haber visto el respaldo de Dios, se sentían INTIMIDADOS por los filisteos; y la primera estrategia fue enviar por el arca del pacto a Silos de manos de los Hijos de Elí. (1 Samuel 4:1-4)
Pero aún así, habiendo traído la presencia de Dios con ellos (el arca), Los filisteos arremetieron de nuevo contra le pueblo y hubo gran mortandad del pueblo d e Israel, 30 mil hombres, entre estos, Ofni y Finnes. (verss. 10-11).
… E ISRAEL PERDIÓ LA PRESENCIA DE DIOS. Les duro, solamente un instante mientras decidieron llevarla para pelear.
Muchas veces pretendemos intimidar a los hijos a nuestro esposo, o esposa con la presencia de Dios y los juzgamos severamente. Mostramos a Dios delante de ellos como justiciero, y castigador, cuando la palabra dice que Dios es un Dios de amor, perdón y restauración.
Estos hijos y esposos, tarde o temprano terminan huyendo de la Presencia de Dios, y llegan a la muerte espiritual, no queriendo saber nada de Dios, o demorando su encuentro verdadero con El.