Debes remover las piedras

Daniel Tomas

Updated on:

Predicas Cristianas - Debes remover las piedras

Debes remover las piedras

3.7
(3)

Ll) María era la que se quedaba absorta escuchando las enseñanzas de Cristo, ella tenía una sed espiritual que no podía saciar, pero en esa casa había entrado la muerte, Lázaro llegó con fiebre a casa una noche, no era mucha, apenas unos pocos grados, pero lo suficiente para que le causara dolor de cabeza y un malestar generalizado, las hermanas lo atendieron con atención, pero sin la preocupación de una enfermedad seria.

m) Lo acostaron y le dieron suficientes líquidos para que se sienta confortable, pero con el pasar de las horas, la fiebre empeoró y Lázaro comenzó a delirar y se dieron cuenta que la enfermedad era más grave de lo que habían pensado, ahora sí se preocuparon, buscaron al mensajero más rápido de Betania, se llamaba OCA.

n) Le dieron un mensaje urgente para Jesús, quien estaba al otro lado del lago, OCA velozmente fue a buscarlo y cuando lo encontró, le entregó el mensaje que decía: Señor, el que tu amas está seriamente enfermo y requerimos tu presencia de inmediato, antes que sea demasiado tarde, firmado, María y Marta. P.D. no te olvides de traer una docena de medialunas para el desayuno.

ñ) Cristo no parecía estar muy apurado, de hecho, en vez de cruzar a Betania de inmediato, se fue a Judea, varios días después Jesús decidió ir a Betania, para entonces, Lázaro no solamente estaba muerto, sino que había estado enterrado en la tumba por 4 días, pero Cristo nunca llega tarde, Él no es como los que llegaron tarde a este culto, Él es siempre puntual, siempre llega a tiempo.

o) Aparentemente, Cristo estaba atrasado, que uno llegue unos minutos tarde no es tan serio, aún si se trata de una hora o dos, pero cuando uno llega varios días tarde, ya es otra cosa, pero Cristo está en control del tiempo, El sabe lo que hace y sabe cuando lo tiene que hacer y qué tiene que hacer, a veces pensamos que Cristo no escucha nuestra oración y que no tiene interés en nuestra necesidad, pero no es así, El siempre llega en el momento justo y oportuno.

p) Cuatro días después de la muerte de Lázaro, Cristo hace su entrada en Betania, ante la mirada sorprendida de los que sabían que Cristo era amigo de la familia, imagínese los comentarios de los vecinos de Lázaro: Así que amigo de ese Jesús de Nazaret que supuestamente sana a los enfermos, ¿eh? Ni lo vino a ver, ese es el que se supone que lo sabe todo y que tiene poder sobrenaturales, buen amigo, ya decía yo que ese no tiene nada, es un farsante, es un vividor, todo lo que hizo Lázaro y sus hermanas por el, y míralo ahora, tan campante, tan tranquilo.

q) Entonces Marta, la que siempre estaba ocupada de la cocina y de las cosas terrenales, sale al encuentro de Jesús y lo enfrenta, María, dice la Biblia, se quedó en casa, Marta le sale al encuentro y le dice: Tanto has tardado, has tomado tanto tiempo en llegar que ahora mi hermano, quien era tu gran amigo, está enterrado, ni siquiera estuviste para el funeral, no sé qué pensar, realmente me siento sorprendida por tu actitud y tu despreocupación.

r) Si hubieras estado aquí cuando te llamamos, Lázaro estaría con vida, no entiendo nada, tienes tiempo para sanar a los 10 leprosos, tienes tiempo para sanar al ciego Bartimeo, no te importó salir del itinerario para sanar a la mujer con flujo de sangre, pero para Lázaro, ¡nooo! no tienes tiempo para Lázaro, en otras palabras, tú eres culpable de la muerte de mi hermano, Jesús le dice: Marta, tu hermano ha de vivir ¿Dónde lo enterraste? Muéstrame donde está.

s) Los vecinos se agolpaban, toda Betania quería ver lo que Cristo iba hacer ahora que Lázaro estaba muerto, todos allí, pero ninguno con Fe, todos con curiosidad, pero ninguno con esperanza, todos con morbosidad, pero ninguno con confianza, nadie esperaba un milagro, todos esperaban ver a Cristo fracasado y vencido, no había una mirada de Fe, sino una mirada de reproche en los ojos de Marta.

t) ¿No podía Pedro predicar unos días? ¿No podías apurarte un poco más para llegar a tiempo? No lo puedo creer, ahora, ahora viene al cementerio a ver la tumba, ni siquiera trajo flores para adornar la tumba, hay una mirada acusadora en los ojos de esa mujer que tantas veces había preparado la comida, había preparado el aposento para que descansara el Maestro, se había esmerado en complacer todos los detalles de la casa para que la estadía fuere lo más placentera posible.

u) Cristo mira a la multitud, siente las miradas hostiles, oye los pensamientos y ve el rostro triste y acusador de su amiga, Marta, se conmueve por dentro, hay un sollozo en su garganta, una angustia que sube de lo más profundo de su ser y no puede contener las lágrimas y Jesús llora, los que estaban presente comenzaron a decir: Llora la muerte de su amigo.

v) ¿Llorar la muerte de su amigo? Cristo sabía que era algo momentáneo y que en cuestión de minutos iba a estar otra vez vivo ¿Porqué llorar por alguien que ha de resucitar en unos momentos? No tiene porqué llorar por algo pasajero ¿No será que Cristo lloró porque recordaba las enseñanzas que había compartido en esa casa y había explicado las leyes del reino y quien era El y cual era su misión? ¿Es que nadie entendió lo que el había enseñado?

3. Debes quitar las piedras

a) Vieron pero no observaron; oyeron pero no escucharon, todas esas enseñanzas de Cristo no habían producido Fe en el corazón de los oyentes, en sus amigos más íntimos, era un total desconocido, aún para sus amigos más cercanos, me atrevo a preguntar: ¿Es Cristo un desconocido para nosotros? ¿Lo conocemos? ¿Realmente lo conocemos? ¿O en los momentos de prueba nos llenamos de duda y de confusión y de reproche?

b) Hay los que han invitado a Cristo a que sea parte de su vida hace ya mucho tiempo, hay los que han sido fiel a la iglesia por años, hay los que han cumplido con todos los requisitos y las ceremonias y los dogmas, hay los que leen la Biblia todos los días, no pregunto eso, lo que pregunto es: ¿Conoces a Cristo? Si, lo conozco, nació en un pesebre, los tres reyes magos, los camellos, oro, incienso y mirra, sé quien es Jesús.

¿Qué tan útil fue esta publicación?

¡Haz clic en una estrella para calificarla!

Daniel Tomas
Autor

Daniel Tomas

Mi nombre es Daniel Tomas y hace más de 35 años sirvo al Señor. He asumido el compromiso de serle fiel cada día de mi vida y de sembrar mi corazón y ministerio en Su presencia y así llevar mucho fruto. Junto con toda mi familia en enero del año 1994 vinimos a Bariloche a servir en la Iglesia Catedral Familiar, de la Unión de las Asambleas de Dios, ministerio el cual amamos y donde Dios nos trajo para así alcanzar Su sueño, que es ver a esta ciudad y pueblos aledaños rendidos a los pies de Jesús.

1 comentario en «Debes remover las piedras»

  1. Tenemos que remover la piedra que nos estorba en nuestra vida como la piedra del odio, la envidia, el celo, la murmuración, la falta de perdón. Para poder ver el milagro de Dios.

    Responder

Deja un comentario