Inicio » Predicas Cristianas » La fea mas bella

La fea mas bella

En el libro de los comienzos, Génesis, se narra una historia en particular, de mucha enseñanza para nuestro tiempos, esta historia parece ser una novela donde sentimientos de amor, engaño, herencias, dinero, promesas, rivalidad, etc. Lea hija mayor de Labán y la hermana mayor de Raquel, era el Patito Feo de la familia, la solterona, Lea fue la novia no deseada, una mujer despreciada,. Pero Dios tenía un propósito con ella, un propósito divino en su eterno y perfecto plan.

Así que si algún día te has sentido como se pudo haber sentido esta mujer, sin valor, sin propósito, sin metas, Dios tiene en su corazón un plan para tu vida, tu eres un mujer de propósito, un ser creado con un plan, antes de la creación Dios en su libro escribió de ti todo, te ha dotado con lo que necesitas para triunfar y si aun sientes que no ha llegado, Dios no se ha olvidado de ti, porque la buena obra que inició, Él, la terminará.

Génesis 29:25 – Venida la mañana, he aquí que era Lea; y Jacob dijo a Labán: ¿Qué es esto que me has hecho? ¿No te he servido por Raquel? ¿Por qué, pues, me has engañado?

Labán padre de Raquel, por la cual Jacob había trabajado 7 años, lo engaña, dándole la otra de sus hijas, Lea, la cual a su vez también es cómplice de este engaño, ella no advierte a Jacob acerca de la trampa, sino mas bien colabora, el porqué no lo hizo, no está escrito en la Biblia, pero al final ella participo conscientemente de este cruel acto porque ella sabia que Jacob con quien deseaba casarse era con su hermana menor y peor aun en la noche de intimidad Jacob pensó que estaba teniendo relaciones sexuales con Raquel.

Pero parece ser que Lea quería también, como su hermana a Jacob, ella posiblemente se enamoro este hombre por tanto cuando su padre le propuso el engaño ella cedió a su deseo por encima de su dignidad. Gálatas 6:7-9 – No crean ustedes que pueden engañar a Dios. Cada uno cosechará lo que haya sembrado. 8Si seguimos nuestros malos deseos, moriremos para siempre; pero si obedecemos al Espíritu, tendremos vida eterna.9Así que no nos cansemos de hacer el bien porque, si seguimos haciéndolo, Dios nos premiará a su debido tiempo. (Traducción en lenguaje actual)

Para Jacob el tema de los engaños no era nada nuevo, el mismo había sido y era un engañador, su mismo nombre lo delataba, Jacob significa engañador, suplantador, (Génesis 27:36), el mismo había engañado a su hermano y padre, volviéndonos al versículo de Gálatas 6, donde nos habla que aquello que hemos sembrado, recogeremos. Lo que estas recibiendo hoy fue la siembra de hace tiempo atrás, pero lo que recibirás mañana será la siembra de hoy, por eso hermana sembremos en buena tierra, buena semilla, para recibir buenos frutos.

Pero aquí podemos ver como Lea la mujer engañadora, cuando fue descubierta, pudo haber sido regresada a su padre, según la costumbre de la época, podría desecharse, a pesar que en su propias expresiones Jacob reflejan no estar muy contento (toma la decisión de quedarse con ella) POR QUÉ?

1. Quizás temió que Lea no llegara a casarse a causa de edad porque al parecer no era muy linda

2. Sería que en medio de todo le tenia cierto cariño y respeto La biblia no dice porque tomo la decisión de quedarse con Lea lo que si podemos ver es el propósito Dios en la vida de Lea Con esta decisión hecha por Jacob se inicia una familia en con mucha tensión, Génesis 29:29-30 – Y dio Labán a Raquel su hija su sierva Bilha por criada. 30Y se llegó también a Raquel, y la amó también más que a Lea; y sirvió a Labán aún otros siete años. El amaba mas a una que a la otra, lo había dejado claro, y esta situación era de conocimiento de Lea y de Raquel, esta situación llevo a un favoritismo. El simplemente amaba a Raquel, y Lea no era amada, por tanto fue descuidada.

La manera como Lea y Jacob llegaron al matrimonio, por engaño, no eran las correctas, estaba recibiendo posiblemente las consecuencias de su mal proceder; haciéndola sentir mal, no amada, no deseada, nunca la valoro como esposa; Lea podía ver por si misma el favoritismo porque Jacob si amaba a Raquel, la cuidaba, se acercaba y buscaba.

Pero en medio de esto, Dios en su amor y misericordia incompresible, vio el dolor y pesar de Lea, El, la cuido, la sustento, ella siente esa cobertura y busca de Dios, pidiéndole ayuda en su sufrimiento y dolor, Génesis 29:31-35 – Y vio Jehová que Lea era menospreciada, y le dio hijos Dios abrió su vientre y parió rápidamente uno tras otro hijos.

Génesis 29 32 Y concibió Lea, y dio a luz un hijo, y llamó su nombre Rubén, porque dijo: Ha mirado Jehová mi aflicción; ahora, por tanto, me amará mi marido. 33 Concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Por cuanto oyó Jehová que yo era menospreciada, me ha dado también éste. Y llamó su nombre Simeón. 34 Y concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Ahora esta vez se unirá mi marido conmigo, porque le he dado a luz tres hijos; por tanto, llamó su nombre Leví. 35 Concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Esta vez alabaré a Jehová; por esto llamó su nombre Judá; y dejó de dar a luz.

Dice las escrituras que parió a Rubén, “VED MI HIJO” declarando Jehová había visto su sufrimiento y suplió su necesidad, y ahora ella podría agradar a su marido, Jacob dándole un hijo. Ciertamente Jacob si le prestó más atención, al menos mas que la de antes, porque ella le parió tres hijos, bajo la cultura hebrea los niños son siempre más deseados porque existe la tendencia a aumentar en tamaño, riqueza e importancia el grupo familia clan. Cuando crecen y se casan, traen con ellos a sus esposas al hogar y los niños de tales uniones se perpetúan en la casa del padre, los hombres aumentan la casa, de las mujeres se piensa que las menguan. Cuando se casan, van a vivir a la casa del esposo.

Lea parió a Simeón, significaba “OIR”, ella había estado orando por el descuido y rechazo de su esposo y Jehová oyó su oración.

Pario a Leví, lo que significa “UNIDO”, ahora ella se sentía segura de que su esposo se uniría con ella.

Pario a Judá, significa “ALABANZA” aprendiendo a no centrarse en su esposo, sino en, sino en el Señor. Sencillamente estaba alabando a Dios por quien El era y por lo que Él había hecho.

1 Crónicas 16 11 Buscad a Jehová y su poder; Buscad su rostro continuamente Nosotras debemos enfocarnos, volver nuestra mirada hacia aquel quien nos Salvo y Redimió, confiar como Lea en Dios, que El nos fortalecerá en los problemas y sufrimientos de la vida.

La solución a nuestras necesidades no está en el mundo, no está en el hombre (como genero), en nuestros esposos, nuestros hijos y mucho menos esta los bienes materiales, nuestra solución está en Cristo.

Mateo 7 7 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.

Nosotras debemos volver nuestro ser a Dios, Pedirle a Él, Buscarle a Él, Llamarle a EL, y obtendremos que se nos Dara, que Hallaremos y que se Nos abrirá las puertas del cielo a nuestro favor, pero debemos ir a Dios, no al mundo, no al hombre, no al deseo de la carne, solo a Dios.

Debemos como Lea también ser fieles en la oración, persistir, esperanzadas en una respuesta, confiada que El oye y responderá.

Juan 15 7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.

REPITA: si yo permanezco en Dios, Dios permanecerá en mi “Y” pediré todo lo que deseo y será hecho, porque:

  • Pediré en su voluntad,
  • Porque haré conforme a su agrado,
  • Porque le alabare,
  • Porque le buscare,
  • Porque lo amare,
  • Porque lo deseare,
  • Porque es mi Señor,
  • Es mi Dios,
  • Es mi Todo.

Como hemos visto hasta acá, la situación de Lea era mala, la cual Dios no la cambio, pero si cambio a Lea, le dio Gracia para vivir en una situación menos perfecta. El multiplico su gozo en el parto. Él le dio hijos que se convertirían en los padres más grandes de las tribus judías. Leví fue el padre de los sacerdotes. Judá fue el padre de la tribu por la cual vino el Mesías.

Salmos 91 15 Me invocará, y yo le responderé; Con él estaré yo en la angustia; Lo libraré y le glorificaré.

Dios tal vez no cambiara tu situación, tus problemas, tus dificultades; pero si hay algo que hará estará en la angustia, nos librara.

Repita: Dios tú conoces mi dificultades, mis dolencias, mis pruebas, y hoy entiendo que Tu está conmigo, no me abandonas y me libraras.

Isaías 58 9 Entonces invocarás, y te oirá Jehová; clamarás, y dirá él: Heme aquí… Tome esta promesa para usted, crea en que si usted clama, ora, le invoca, Dios promete oírte y no solo te oirá, sino además te dirá HEME AQUÍ. A Dios no tienes que ir a un lugar especial a buscarlo, no debes hacer nada especial para tenerlo, solamente cree en fe, en tu corazón en El, porque es ahí donde El esta.

Repita: Dios sé que me escuchas, sé que puedo contar contigo, no me has abandonado, puedo contar contigo, eres mi Padre y yo soy tu hija, soy de tu propiedad te pertenezco.

Posiblemente hasta aquí te has podido identificar con Lea en algún aspecto, tal vez ha sido la historia de muchas mujeres que al sentirse descuidadas, maltratadas, abandonadas, han actuado erróneamente, y llevan una carga de culpabilidad de reproche. Fingiendo ser alguien que no eran en realidad, por un obtener la atención o el cariño de alguien, Lea creyó que en su esposo estaría su satisfacción, su valor.

Pero no es así, aun cuando muchas hayan pasado por situaciones como estas o aun pero, Dios tiene una preciosa promesa para ti:

Salmos 27 10 Aunque mi padre y mi madre me dejaran, Con todo, Jehová me recogerá.

Lea podría haber dicho aunque mi esposo no me ame y sea indiferente .con todo Jehová me recogerá.

Jehová oirá y ayudara a cualquiera de nosotras, si tan solo confesamos nuestros pecados y nos volvemos a Él en 1 Juan 1 9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

Pero las circunstancias y problemas son parte de nuestra vida, estarán a nuestro alrededor siempre, no podemos quitárnoslos, en el momento menos pensado aparecen y nos atacan, en este caso, Lea enfrenta otra situación, la envidia de su hermana, Raquel.

Génesis 30 1 Viendo Raquel que no daba hijos a Jacob, tuvo envidia de su hermana, y decía a Jacob: Dame hijos, o si no, me muero.

Empezando en los próximos versículos un nuevo enfrentamiento, esta vez usando hasta otras personas, sus siervas, como concubinas.

Génesis 30 Viendo, pues, Lea, que había dejado de dar a luz, tomó a Zilpa su sierva, y la dio a Jacob por mujer.

El crecimiento espiritual obtenido se estaba escapando, estaba cediendo ante la tentación de la competencia, estaba nuevamente compitiendo por su esposo y la razones eran las equivocadas, esta familia estaba encerrada en una tensión.

A pesar que era costumbre de la época usar sirvientas como concubinas a fin de parir hijos, todos los involucrados, Jacob, Raquel y Lea sabían y conocían que esta práctica no era agradable a Dios, iba contra la voluntad divina del matrimonio.

Lea entra en un momento de tensión y olvida que Dios había sido su suplidor, en momentos de dificultad, le había dado hijos y a pesar que ella le había reconocido como Su Libertador y Su Salvador, Redentor, ahora ella parece que no confiaba de igual manera.

En nuestra cultura se practican muchas cosas que son aceptadas socialmente, pero esto no indica que nosotras como mujeres que hemos sido compradas, separadas para el único Dios, Jesucristo no sea bueno hacerlo.

Génesis 30 11 Y dijo Lea: Vino la ventura; y llamó su nombre Gad.

Dios la vuelve a bendecir con otro hijo, Gad, este nombre significa “BUENA SUERTE O FORTUNA”, Lea no hace mención de Dios, ella estaba nuevamente centrada en garantizar el amor y favor de Jacob. Muchas veces el descuido espiritual, el descuido de entender a quien nos debemos todos los días, nos pueden llevar a cometer una y otra vez los mismos viejos errores; los cuales Jesucristo ya ha limpiado, ha sanado y restaurado, pero perece que nos gusta estar buscando esas viejas batallas perdidas del pasado y pensando que esta vez la ganaremos, engañándonos a nosotras misma y alejándonos de la fuente real de Vida.

Lea ya no ALABABA A JEHOVÁ, sino deseaba obtener fortuna para con su marido.

Romanos 12 2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

Se agudizo a tal manera este problema de rivalidad entre hermanas por un hombre, que involucraron hasta sus hijos para obtener el deseo de la carne, siguiendo el deseo humano.

Génesis 14 Fue Rubén en tiempo de la siega de los trigos, y halló mandrágoras en el campo, y las trajo a Lea su madre; y dijo Raquel a Lea: Te ruego que me des de las mandrágoras de tu hijo.

15 Y ella respondió: ¿Es poco que hayas tomado mi marido, sino que también te has de llevar las mandrágoras de mi hijo? Y dijo Raquel: Pues dormirá contigo esta noche por las mandrágoras de tu hijo.

16 Cuando, pues, Jacob volvía del campo a la tarde, salió Lea a él, y le dijo: Llégate a mí, porque a la verdad te he alquilado por las mandrágoras de mi hijo. Y durmió con ella aquella noche.

Aquí ya no vemos a una Lea adoradora, sino a una Lea enfocada en su deseo, en su meta, sin involucrar a Dios en su lucha, se volvió fría, acusando a su hermana que ella le había tomado a su esposo, lo cual era mentira, pero en cambio saco provecho de la situación, para estar con su esposo y fruto de ello fue un hijo.

Génesis 14 17 Y oyó Dios a Lea; y concibió, y dio a luz el quinto hijo a Jacob. 18 Y dijo Lea: Dios me ha dado mi recompensa, por cuanto di mi sierva a mi marido; por eso llamó su nombre Isacar.

Lea nombre a este hijo como Isacar, RECOMPENSA, ella creyó que Dios le recompensaba por haberle dado a su sierva, esto es incorrecto, Dios no recompensa la inmoralidad, el alejamiento de Lea con su Salvador, haciendo las cosas a su manera le había impedido entender los propósitos de Dios y equivocadamente creía que Dios aprobada lo que hacía, aun cuando estaba contra El.

Pero a pesar de esto Lea había estado orando a Dios, encomendado su causa, y fue escuchada, la misericordia de Dios es mayor a nuestras ideas, muchas veces faltas y malas ideas y aun ahí Dios actúa, porque sus pensamientos son mayores y mejores, de paz para con nosotras.

Génesis 14:19 Después concibió Lea otra vez, y dio a luz el sexto hijo a Jacob. 20 Y dijo Lea: Dios me ha dado una buena dote; ahora morará conmigo mi marido, porque le he dado a luz seis hijos; y llamó su nombre Zabulón. 21 Después dio a luz una hija, y llamó su nombre Dina.

Dios vuelve a predominar nuevamente y le dio a Lea otro hijo mas, el sexto, lo nombro Zabulón “HONRA O MORAR”, ella escoge este nombre para honrar a Dios, porque le había dado 6 hijos, y ahora se sentía segura de que su esposo se volvería a ella y la honraría. Pero además en medio de estos seis varones, también le dio el privilegio de darle al única hija, Dina, que posiblemente signifique JUICIO O REIVINDICACIÓN, que gozo pudo haberle traído a Jacob y a la misma Lea esta niña.

Hemos visto como una mujer dejada, abandonada, no amada y mucho menos amada, despreciada desde el día siguiente después de la boda, por el hombre que ella amaba, vivió una vida de lucha, una vida tormentosa, competencia, engaño, deseando cada día sentir un poco de amor para si, pero en cambio recibía desprecio.

Esta mujer, Lea, reconoce en medio de todas sus tribulaciones que en medio de todas las dificultades el reconocer a Dios como Señor, Salvador y fuente de vida sería lo único que la hace sentir gozosa y completa, al hacer esto reconoce en su vida la ALABANZA y tiene una transformación.

Pero al pasar del tiempo, recae otra vez en su debilidad, en su temor, en no sentir el amor, vuelve a dejar engañarse que el amor verdadero será suplido por el hombre y no por Dios e inicia nuevamente una batalla, esta vez más cruel, con mas heridas. Hasta que reconoce darle la HONRA a quien merece toda la HONRA.

Deja un comentario