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El cuidado interior de la mujer

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Predicas Cristianas Predica de Hoy: El cuidado interior de la mujer

Introducción

La mujer que se deja dominar y gobernar por la carne, mirar la “buena” condición de otros, puede socavar la convicción de quién es. La biblia narra en Génesis 30, que Raquel al mirar la condición y bendición de otra (su hermana Lea), al mismo tiempo, se estaba menospreciando.

La escritura, nos narra en Lucas 15 que el hermano mayor del hijo pródigo, al mirar la recepción del hermano, menospreció su identidad y le dijo a su padre: Yo todos los días de mi vida te he “servido”. Nunca se vio como hijo, sino como siervo. Eso es lo que provoca que nuestra mirada este colocada en la bendición de otros, y no en las bendición que Dios nos permite disfrutar.

Como hijos de Dios, estamos llamados a poner nuestra mirada en Dios y no en los hombres, poner atención a la condición en la que vive el mundo puede atraparnos y despertar en nosotros envidia. La biblia dice. No tengas envidia de los que hacen iniquidad.

Volviendo a Génesis 30, la biblia dice que Raquel envidió a quien la hería y confrontaba con rabia, esto, lo llevaba a su relación de pareja y culpaba al hombre que amaba. Esto es lo más terrible, amar al hombre que está a tu lado y a la vez producir en él confrontación que no edifica, responsabilizarlo y llevarlo a sentirse herido por no cumplir tus expectativas, expectativas que has alimentado por medio de lo que ven tus ojos en el mundo.

En el desarrollo de esta aportación te presentaré 3 recomendaciones que deberás elegir para lograr desarrollar una vida excepcional de pareja, aún sobre los conflictos y dificultades que como matrimonio podamos enfrentar, tomando el ejemplo de Raquel y algunos otros pasajes que te ayuden a mejorar como mujer y esposa (1ª Pedro 3.2-4). Considera tu conducta sea correcta, vístete de belleza interior, la que no se desvanece, la belleza de un espíritu tierno y sereno, que es tan precioso a los ojos de Dios.

I. Mujer. cuida tus ojos, corazón y pensamientos.

Génesis 30:1Viendo Raquel que no daba hijos a Jacob, tuvo envidia de su hermana y decía a Jacob. Dame hijos, o si no, me muero.

La primera recomendación: es que debes desconéctate de la vida y de la condición que otros viven, y disfruta lo que hoy tienes y vives tú. Jeremías 17.9 dice: “Engañoso es el corazón y perverso; ¿quién lo conocerá? Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras”.

Sin embargo, considerando todo el contexto del pasaje de Jeremías, te darás cuenta que el corazón perverso y que camina mal, es porque no ha logrado confiar plenamente en Dios (versos 5-6) vivirá como retama en el desierto (escasa de hojas), no VERÁ cuando viene el bien, simplemente porqué no ha logrado verse a si misma, sino que vive viendo a otros; pero aquellos que confían en Dios y esperan en Él dice: “Serán como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y aquí lo interesante “No verá” cuando viene el calor (versos 7-8), simplemente porque cuando estás VIENDO y confiando en Dios, tienes la capacidad de poder VER todas las bendiciones de Dios.

Contrario a esto, cuando tu corazón no está sano, de dentro del corazón nacen malos pensamientos. Mateo 15.19; también, dice el proverbista, quien tiene perversidades en su corazón, anda pensando el mal todo el tiempo y trabaja malos pensamientos. (Proverbios 6.14, 18-19)

El deseo de Raquel era darle hijos a Jacob; sin embargo, lo que veían sus ojos en otros, la nubló para ver y confiar en los tiempos de Dios, dejando dominar su corazón por lo que veía en su hermana, de tal forma que la perversidad de su corazón la llevó a envidiar la condición de Lea, pero por otra parte, la biblia también dice que, Lea envidiaba a Raquel.

Tanto el versículo 1 como el 9, colocan a Raquel y Lea conectadas a lo que veían con sus propios ojos y eso provocaba en ellas un estado de salud mental inapropiado (1) Viendo Raquel que no daba hijos a Jacob, reclamó a Jacob. Verso (9) Viendo, pues, Lea, que había dejado de dar a luz, buscó ventaja por otros medios.

Mujer, cuida lo que ven tus ojos, guarda tu corazón y pensamiento en Dios. Recuerda: Él guardará en completa paz a aquel cuyo pensamiento en Dios persevera, porque en Dios a confiado. (Isaías 26.3)

II. Mujer, cuídate de busca la aprobación de Dios y no la aprobación de terceros.

En Génesis 30. 8 y 13, observemos lo enfermizo que puede llegar a ser vivir para la satisfacción de otros, y peor aun, disfrutar la desgracia de otros.

  • 30.8 Con luchas de Dios he contendido con mi hermana, y he vencido.
  • 30.13 Y dijo Lea: Porque las mujeres me dirán dichosa.

Vivir de acuerdo a la opinión de otros, te llevará a vivir para la satisfacción de otros (me dirán dichosa). La realidad, es que al mundo poco lo interesa tu prosperidad y tu satisfacción. (Eclesiastés 4.4)

Cuando sabemos y reconocemos que todo lo que tenemos y somos es por la fidelidad de Dios, no hay espacio para la soberbia, para envidiar a otros, para desear lo de otros, para fastidiarnos por lo que no tenemos. La biblia dice: La bendición de Jehová es la que enriquece y no añade tristeza con ella. (Proverbios 10.22)

De acuerdo al Génesis 30.13, Lea, buscaba que la sociedad la reconociera como una mujer dichosa, pero a la vez, no le importaba si lastimaba o no a su familia; sin embargo, la mujer que narra el libro de Proverbios en el capítulo 31, es una mujer VIRTUOSA, ese tipo de mujeres que no se hallan fácilmente, la mujer VIRTUOSA, no le interesa cómo la ve la sociedad o que piensan de ella, a ella le interesa qué piensa Dios de ella, cuando Dios es tu referente, cuando el temor de Dios está en tu corazón, invariablemente tendrás la GRACIA de Dios, eso es mas importante que la DICHA (aprobación humana), la DICHA depende de las circunstancias y la aprobación de los hombres, pero la GRACIA de Dios no tiene variación, porque esta GRACIA proviene de Dios, y aún Santiago 1.17 declara: Toda buena Dádiva y DON perfecto, desciendo de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.

Proverbios 31.30 declara: Engañosa es la gracia y vana la hermosura, pero la mujer que TEME a Jehová, esa será alabada, ella poseerá la verdadera GRACIA de Dios. Esa mujer VIRTUOSA se caracteriza exactamente en buscar el bien y satisfacción de su familia.

Cuando Samuel fue a casa de Isaí y vio a Eliab, este tuvo la aprobación de Samuel, pero Dios le dijo: No te equivoques, el hombre mira lo exterior, pero yo miro el corazón. El corazón que teme a Dios, cuenta con la aprobación de Dios, esa es la GRACIA, que tu debes buscar.

Cuando Ana lloraba amargamente por un hijo, tuvo la desaprobación de Elí, pero lo mas importante es que contó con la aprobación de Dios, la biblia dice: Al corazón contrito y humillado no despreciará Jehová. (Salmo 51.17)

La aprobación de Dios, que es su GRACIA, proviene cuando Dios reconoce que le amas de todo corazón, contrario a la dicha que pueda provenir de los labios del hombre mortal. Mujer: Busca la GRACIA de Dios, y no la gracia de la sociedad.

III. Mujer, cuida tus conversaciones, ellas rigen tu conducta como mujer y esposa.

(1 Corintios 15.33) Es importantísimo que te involucres en conversaciones sanas, y de provecho, huye de las malas conversaciones, las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.

Salmo 1 Indica que la bendición de Dios está con aquellos que se alejan del consejo de malos, y se separan del camino de los pecadores, y no dedican tiempo para atender a los escarnecedores; sino que en la ley de Jehová esta su delicia.

Como mujer, tú debes procurar eliminar los ambientes que pueden provocar en ti, malas actitudes hacia tu marido, debes cortar relaciones de amistad que te invitan a generar pensamiento inicuos contra tu marido, debes romper con las ideas que las mujeres mundanales predican, asociarte con mujeres dañinas, hará que el seno de tu hogar sea destruido. (Proverbios 9.13, 16-17)

La biblia dice que Job reprendió a su mujer por hablar como una mujer fatua (Job 2.9-10). Hay una diferencia entre las hijas de Dios y las hijas del mundo, cuida tu corazón de no escuchar labios de mal, y refrena tu lengua de hablar como ellas.

La biblia dice: la mujer VIRTUOSA es corona de su marido; más la mala, como carcoma en los huesos. (Proverbios 12.4)

La biblia dice: la mujer VIRTUOSA y con temor de Dios, abre su boca con sabiduría y la ley de clemencia está en su boca. (Proverbios 31.26)

La biblia dice: la mujer sabia edifica su casa y la necia con sus manos la derriba. (Proverbios 14.1)

El conflicto que se genera por estar desconectadas las esposas de Dios y que observamos en Raquel lo podemos ver en los siguientes pasajes de proverbios: (Proverbios 25.24)

Oración

Padre, ayúdanos a poner nuestra mirada en ti y no en las cosas del mundo, ayúdanos a conectar nuestro corazón al tuyo, para poder estar conectados al corazón de los nuestros, quita de nosotros palabras que no edifican y cambia nuestra manera de pensar y actuar, solo tu tienes el poder para hacerlo. Amen.

© Eduardo Cavazo Sánchez. Todos los derechos reservados.

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