Predicas Cristianas
Predicas Cristianas Predica de Hoy: Dando la gloria al Padre
Predica Cristiana Texto Bíblico: Isaías 43:7 (RVR 1960) “…todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los he creado, los formé y los hice…”
Introducción
Como creyentes hemos sido llamados por Dios para darle la gloria solo a Él. ¿Qué quiere decir eso? Quiere decir ser hombres y mujeres que reconozcamos siempre que todo es por Él, que todo es debido a el, que todo es de el y para Él.
Que no nos llevamos nosotros el mérito de algo como si por nuestra fuerza se hubiera realizado x o y cosa si no que siempre reconocemos que fue Dios. No fue nuestra habilidad, no fue nuestro poder fue el de Dios.
En el mismo momento en que nosotros tomemos eso que le pertenece a Dios solamente estaremos en problemas, debemos ser lo suficientemente humildes para reconocerlo no solo de palabras sino también creerlo en nuestro corazón.
2 Reyes 20:12-19 (RVR 1960) “…En aquel tiempo Merodac-baladán hijo de Baladán, rey de Babilonia, envió mensajeros con cartas y presentes a Ezequías, porque había oído que Ezequías había caído enfermo. 13 Y Ezequías los oyó, y les mostró toda la casa de sus tesoros, plata, oro, y especias, y ungüentos preciosos, y la casa de sus armas, y todo lo que había en sus tesoros; ninguna cosa quedó que Ezequías no les mostrase, así en su casa como en todos sus dominios. 14 Entonces el profeta Isaías vino al rey Ezequías, y le dijo: ¿Qué dijeron aquellos varones, y de dónde vinieron a ti? Y Ezequías le respondió: De lejanas tierras han venido, de Babilonia. 15 Y él le volvió a decir: ¿Qué vieron en tu casa? Y Ezequías respondió: Vieron todo lo que había en mi casa; nada quedó en mis tesoros que no les mostrase. 16 Entonces Isaías dijo a Ezequías: Oye palabra de Jehová: 17 He aquí vienen días en que todo lo que está en tu casa, y todo lo que tus padres han atesorado hasta hoy, será llevado a Babilonia, sin quedar nada, dijo Jehová. 18 Y de tus hijos que saldrán de ti, que habrás engendrado, tomarán, y serán eunucos en el palacio del rey de Babilonia. 19 Entonces Ezequías dijo a Isaías: La palabra de Jehová que has hablado, es buena. Después dijo: Habrá al menos paz y seguridad en mis días…”
La gloria al Padre
¿Qué pasó con Ezequías? ¿Por qué recibió esa reprensión del Señor?
¿Saben por qué? Porque Ezequías mostró con orgullo todas sus riquezas, las mostró como si hubieran sido adquiridas por su trabajo y esfuerzo. Estas personas habían venido a verle debido a que había estado enfermo, ellos querían saber cómo había sanado tan milagrosamente, era la oportunidad para hablarles a estas personas del verdadero Dios pero en lugar de eso procedió a presumir de todo lo que tenía, en su orgullo y arrogancia se olvidó del Señor y no le dio la gloria debida a Dios.
Mostró todo lo que tenía, lo que había conseguido, como si por la mano de él hubiera sido, el mostró todo lo que tenía y no dio la gloria a Dios por sus riquezas. (Paréntesis y hablo de versículo final de los hijos)
Isaías 10:15 (RVR 1960) “..¿Se gloriará el hacha contra el que con ella corta? ¿Se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve? ¡Como si el báculo levantase al que lo levanta; como si levantase la vara al que no es leño!..”
Esta palabra muestra lo inútil que es enorgullecernos de hacer algo o de haber conseguido algo. El Señor dice de la misma forma como el hacha no es nada si alguien no la usa para cortar o mejor.
El hacha no puede hacer nada si el que la maneja no le da esa fuerza. Qué tonta sería el hacha si creyera que corta por sí misma. Que lo único que necesita es ella misma, que ella misma es suficiente para cortar.
De la misma manera somos nosotros si creyéramos que lo hacemos por nuestra propia mano, de la misma forma somos nosotros cuando creemos que algo hemos hecho por nosotros mismos, debemos reconocer que es Dios en nosotros, que es el, no nosotros, la gloria es de Él. Miremos otro personaje que sufrió por no dar gloria a Dios:
2 Crónicas 26:16 (RVR 1960) “…Mas cuando ya era fuerte, su corazón se enalteció para su ruina; porque se rebeló contra Jehová su Dios, entrando en el templo de Jehová para quemar incienso en el altar del incienso…”
El rey Uzías fue un rey que llevó a la nación a un tiempo de prosperidad, realizó grandes adelantos, pero no era el, sino Dios a través de su vida. La biblia dice que cuando estaba en una posición alta, cuando tenía prosperidad por todo lado, gran poder y renombre, su corazón se enalteció y fue para su ruina.
Ya no reconocía a Dios como su Señor, como su amo y dueño de todo lo que él tenía y había hecho, sino que ahora ignorando a Dios y a sus ordenanzas. Comenzó hacer algo para lo cual el no estaba autorizado, solamente lo sacerdotes lo podían hacer.
Pero esto nos demuestra el estado de orgullo y arrogancia en el que había caído este rey, sencillamente Dios ya no era su Dios, ahora tenía otro Dios, uno inventado por el, uno al cual el por su posición de rey, por su posición de poder podía quemar el incienso, era otro Dios inventado desde su ego.
No glorifica al verdadero, no se mantuvo humilde, no reconoció que era por la mano de Dios que había hecho todo.
Miremos el versículo 15.
2 Crónicas 26:15 (NVI) “…Construyó en Jerusalén unas máquinas diseñadas por hombres ingeniosos, y las colocó en las torres y en las esquinas de la ciudad para disparar flechas y piedras de gran tamaño. Con la poderosa ayuda de Dios, Uzías llegó a ser muy poderoso y su fama se extendió hasta muy lejos…”
David y el censo
2 Samuel 24:1 (RVR 1960) “Volvió a encenderse la ira de Jehová contra Israel, e incitó a David contra ellos a que dijese: Ve, haz un censo de Israel y de Judá…”
Lo mismo le sucedió al rey David, en una ocasión quiso saber cuánto ejército tenía, fue en un momento en que este rey colocó su confianza en su ejército y no en Dios, fue en un momento en que este rey pensó que las cosas que había conseguido habían sido por la valentía de sus hombres y eso lo llevo a querer saber con cuántos contaba.
Tal vez eso lo haría sentirse seguro, el saber que tenía un buen respaldo y por un momento no le dio la gloria al Señor porque demostró que para el su ejército le había permitido tener todo lo que tenía. Que todas sus batallas fueron ganadas gracias a su ejercito poderoso, recordemos que David tenía hombres muy valientes.
Y la biblia dice que esto desagradó al Señor, Dios le dio a escoger entre tres cosas, caer en manos de sus enemigos 3 meses, 7 años de hambre o 3 días de sufrir una peste de parte del Señor y David dijo caiga en manos del Señor porque el tendrá misericordia. Dios envío la peste y murieron 70 mil hombres.
Más adelante vemos a David
1 Crónicas 29:11-17 (RVR 1960) “…Tuya es, oh Jehová, la magnificencia y el poder, la gloria, la victoria y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son tuyas. Tuyo, oh Jehová, es el reino, y tú eres excelso sobre todos. 12 Las riquezas y la gloria proceden de ti, y tú dominas sobre todo; en tu mano está la fuerza y el poder, y en tu mano el hacer grande y el dar poder a todos. 13 Ahora pues, Dios nuestro, nosotros alabamos y loamos tu glorioso nombre. 14 Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos. 15 Porque nosotros, extranjeros y advenedizos somos delante de ti, como todos nuestros padres; y nuestros días sobre la tierra, cual sombra que no dura. 16 Oh Jehová Dios nuestro, toda esta abundancia que hemos preparado para edificar casa a tu santo nombre, de tu mano es, y todo es tuyo. 17 Yo sé, Dios mío, que tú escudriñas los corazones, y que la rectitud te agrada; por eso yo con rectitud de mi corazón voluntariamente te he ofrecido todo esto, y ahora he visto con alegría que tu pueblo, reunido aquí ahora, ha dado para ti espontáneamente…”
Vemos ahora a un David que reconoce que todo lo que tiene es por Dios, vemos un David que glorifica al Señor
Gedeón con los 300 hombres
Isaías 42:8 (RVR 1960) “…Yo Jehová; este es mi nombre; y a otro no daré mi gloria, ni mi alabanza a esculturas…”
Jueces 7:2 (RVR 1960) “…Y Jehová dijo a Gedeón: El pueblo que está contigo es mucho para que yo entregue a los madianitas en su mano, no sea que se alabe Israel contra mí, diciendo: Mi mano me ha salvado…”
Hay circunstancias en nuestras vidas que vienen a nosotros con la única intención que Dios se lleve toda la gloria. En esta ocasión vemos a Gedeón, tenía 32 mil hombres y Dios le dice es mucha gente no sea que Israel se enorgullezca y crean que por su fuerza lo consiguieron y decide que solo 300 vayan así Israel sabría que fue Dios y no ellos.
Conclusión
Hay momentos en nuestras vidas que por su nivel de dificultad o por lo difícil que es de superar nos enseñan que fue Dios quien lo hizo porque nosotros no hubiésemos podido. Es cuando todo parece imposible que nos damos cuenta que fue Dios. Por eso en ocasiones vienen ese tipo de circunstancias.
El ciego de nacimiento
Los discípulos miran a un hombre que fue ciego de nacimiento y le preguntaron, ¿Señor quién pecó este o sus padres? y Él les dijo, no es si pecó él o sus padres sino para que las obras de Dios se manifieste (Juan 9:2-3).
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