Inicio » Predicas Cristianas » Regalos a Jesús, Jesús el regalo

Regalos a Jesús, Jesús el regalo

Predicas Cristianas

Predicas Cristianas Prédica de Hoy: Navidad – Regalos a Jesús, Jesús el regalo

Predicas Cristianas Lectura Bíblica de Hoy: 

Nacido, pues, Jesús en Belén de Judá en los días del rey Herodes, llegaron del Oriente a Jerusalén unos magos diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer?Mateo 2:1-2

Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra. — Mateo 2:11

Introducción

Los magos de oriente son personajes citados en la Biblia y, más concretamente, en el Nuevo Testamento. Es poco lo que se sabe de ellos: se ignora cuántos eran y de qué tierras procedían. Sólo se sabe lo que cuenta el Evangelio de Mateo: vinieron de oriente, no se nos da el número des estos magos.

La idea tradicional de que fueron tres deriva del número de regalos que trajeron. Estos no eran reyes, sino magos, que quiere decir astrólogos, cuyo conocimiento de las Escrituras hebreas pudiera trazarse desde tiempos de Daniel. Para el momento en que los magos llegaron, María y José estaban en una casa y no en el establo, (Mateo 2:11). Oro, Incienso y Mirra; regalos propios de un rey (Isaías 60:6).

El hecho de que gentiles hubiera ofrecido este tipo de alabanza tuvo significado profético también. (Salmo 72:10). Como Salomón había recibido regalos de la reina de Saba, así predecía que el Rey que vendría habría de recibir regalos también y más significativos.

Oro, – símbolo del Rey

El oro es un metal blando, brillante, amarillo, maleable, dúctil que no reacciona con la mayoría de productos químicos, pero es sensible al cloro y al agua regia. Es uno de los metales tradicionalmente empleados para acuñar monedas. El oro se utiliza en la joyería, la industria y la electrónica.

Podemos decir que todos sabemos lo que es el oro: el metal valioso que acostumbramos relacionar con la riqueza y el poder. Antiguamente las monedas de más alto valor eran de oro. Entonces no existía el papel moneda, esto es, lo que hoy llamamos “billete”.

El oro traído al Señor fue, pues, un regalo simbólico. Es como si al depositar a los pies del niño Jesús el cofrecito con monedas de oro, el primer sabio de Oriente hubiese dicho: “Te traigo oro porque reconozco en ti al que ha de tener más poder que todos los reyes de la tierra, al que ha de ser Rey de los Reyes”.

Incienso, – símbolo de Dios

De thuo, ofrecer en sacrificio. Denota un combustible aromático, incienso (Lucas 1:10-11); en plural (Apocalipsis 5:8 y 18.13; 8.3-4, significando incienso aquí). En relación con el tabernáculo, el incienso tenía que ser preparado con una mezcla de estacte, uña aromática, gálbano aromático, e incienso puro, en partes iguales. Se prohibía la imitación para usos particulares (Éxodo 30:34-38).

El incienso (del latín incensum, participio de incendere, “encender”) es una preparación de resinas aromáticas vegetales, a las que a menudo se añaden aceites esenciales de origen animal o vegetal, de forma que al arder desprenda un humo fragante con fines religiosos, terapéuticos o estéticos

El uso del incienso como símbolo de adoración a Dios o de respeto a cosas relacionadas con Dios, es una tradición muy antigua, anterior al Cristianismo. El incienso sigue usándose hoy en ceremonias religiosas de varias iglesias cristianas.

El incienso fue otro regalo simbólico al Señor. Es como si al depositar a los pies del niño Jesús el cofrecito conteniendo incienso, el segundo sabio de Oriente hubiese dicho: “Te traigo incienso porque reconozco en ti al que todos han de reconocer como a su Dios verdadero.”

Mirra, – símbolo del hombre

Nombre smurna, de donde procede el nombre de Esmirna, es término de origen semítico; en hebreo mor, de una raíz que significa amargo. Es una resina gomosa de un arbusto que crece en el Yemen y en regiones circundantes en África. El fruto es liso y un poco más grande que un guisante. El color de la mirra varía desde un amarillo rojizo pálido hasta un marrón rojizo o rojo.

Su sabor es amargo, y tiene propiedades astringentes, usándose como antiséptico y estimulante. Se usaba como perfume (Salmo 45:8, donde el lenguaje habla figuradamente de las gracias del Mesías; Proverbios 7:17; Cantares 1:13; 5.5).

Era uno de los ingredientes del «aceite de la santa unción» para los sacerdotes (Éxodo 30:23; «mirra excelente»). Se usaba también para la purificación de las mujeres (Ester 2:12); para embalsamar (Juan 19:39); como calmante. En el NT se usa transitivamente, con el significado de mezclar o combinar con mirra (Marcos 15.23); la mezcla indudablemente se la ofrecía para sedar el dolor.

La mirra es una sustancia perfumada que los antiguos tenían por un bálsamo precioso. Viene en forma de lágrimas y tiene un color rojizo. He aquí, pues, características que pueden convertir la mirra en un símbolo del hombre: el color rojo representaría la sangre, la forma de lágrima representaría el dolor. La mirra simbolizaría así la sangre y el dolor del hombre convirtiéndose en bálsamo para el género humano.

¿No fue Jesús, precisamente bálsamo para nosotros al sufrir la tortura de la Crucifixión? La mirra constituye otro regalo simbólico al Señor. Es como si al depositar a los pies del niño Jesús el copón conteniendo mirra, el tercer sabio de Oriente hubiese dicho: “Te traigo mirra porque reconozco en ti al Hijo del Hombre que ha de sufrir y derramar su sangre por salvar a la humanidad doliente”.

1 comentario en «Regalos a Jesús, Jesús el regalo»

Deja un comentario