Predicas Cristianas
Predicas Cristianas Predica de Hoy: Pronóstico de Lluvia
Introducción
El tema de hoy creo que es muy importante comprenderlo para poder entender lo que Dios está haciendo hoy con Su Iglesia en todo el mundo, y en la nuestra en particular.
Todo lo que necesitamos está en la lluvia, sé que “mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús” Filipenses 4:19, hablando de necesidades, pero Dios nos quiere dar mucho más de lo que necesitamos:
“como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman. Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios” 1 Corintios 2:9-10.
¿Quieres que llueva sobre ti? ¿Deseas recibir todas tus necesidades? ¿Quieres caminar en la bendición del Señor?, pues el Señor te dice: “Si obedeciereis cuidadosamente a mis mandamientos. . . , yo daré la lluvia”.
Leamos la Palabra de Dios
Santiago 5:7-11 “Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía. Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca. Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta. Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor. He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo”.
Historia de Israel
Para comenzar el desarrollo del tema necesitamos saber un poco de la historia de Israel a fin de entender exactamente lo que significa la lluvia temprana y la tardía.
Los agricultores esperan ciertas estaciones en las cuales hay lluvias pues éstas afectan sus siembras, esperan la lluvia temprana, que es la que va a poner blanda la tierra para la siembra; y después que han sembrado, luego de un tiempo y antes de cosechar, esperan, la lluvia tardía, que es fuerte y abundante, haciendo que lo sembrado produzca fruto en abundancia y lo deje listo para ser cosechado; recordemos entonces, la lluvia temprana era antes de sembrar y la lluvia tardía era fuerte y antes de cosechar.
Dios sacó a Israel de Egipto
Sabemos que Dios sacó a Israel de Egipto que era una tierra llana, y sin lluvias, diciéndoles:
“Si obedeciereis cuidadosamente a mis mandamientos que yo os prescribo hoy, amando a Jehová vuestro Dios, y sirviéndole con todo vuestro corazón, y con toda vuestra alma, yo daré la lluvia de vuestra tierra a su tiempo, la temprana y la tardía; y recogerás tu grano, tu vino y tu aceite. Daré también hierba en tu campo para tus ganados; y comerás, y te saciarás. Guardaos, pues, que vuestro corazón no se infatúe, y os apartéis y sirváis a dioses ajenos, y os inclinéis a ellos” Deuteronomio 11:13-16
Pero lo que no conocían era una tierra donde llovía, no sabían lo que era una lluvia en abundancia.
Muchas personas adoran a dioses paganos para que la lluvia de bendiciones llegue a ellos, pero Dios les estaba diciendo: Si me obedecen a mí, yo voy a enviar la lluvia antes de que siembren para que la tierra se ablande, y también voy a enviar la lluvia para que la cosecha sea sobreabundante; la lluvia la temprana será fuerte, pero mucho más grande será la lluvia tardía, por lo que solo tienen que depender de Dios, porque Dios era quien envía la lluvia temprana y tardía.
Necesitamos que el Espíritu Santo viva en nosotros
Necesitamos que el Espíritu Santo viva en nosotros, el Espíritu Santo es la lluvia, a quienes nos hemos convertido nos ha restaurado y nos sostendrá, entendiendo que es absolutamente imposible vivir la vida cristiana sin el Espíritu Santo, como tampoco ninguna persona entrará al cielo sin haberse arrepentido, ¡Ninguna!.
Hermanos, hay pronóstico de lluvia en este lugar, ¿Quieres que llueva sobre ti? ¿Quieres recibir las bendiciones que vendrán sobre ti y tu familia? ¿Quieres ver el fruto de tu trabajo?, seguramente que sí, pero la lluvia vendrá sobre todo aquél que decida depender solamente de Dios poniendo todo en sus manos.
Esta es la siembra que Dios está esperando ver, la siembra del corazón de sus hijos:
“por tanto, pondréis estas mis palabras en vuestro corazón y en vuestra alma, y las ataréis como señal en vuestra mano, y serán por frontales entre vuestros ojos. Y las enseñaréis a vuestros hijos, hablando de ellas cuando te sientes en tu casa, cuando andes por el camino, cuando te acuestes, y cuando te levantes, y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas; para que sean vuestros días, y los días de vuestros hijos, tan numerosos sobre la tierra que Jehová juró a vuestros padres que les había de dar, como los días de los cielos sobre la tierra. Porque si guardareis cuidadosamente todos estos mandamientos que yo os prescribo para que los cumpláis, y si amareis a Jehová vuestro Dios, andando en todos sus caminos, y siguiéndole a él, Jehová también echará de delante de vosotros a todas estas naciones, y desposeeréis naciones grandes y más poderosas que vosotros” Deuteronomio 11:18-23.
La lluvia normalmente es un símbolo de abundancia en la Biblia, por eso: “pedid a Jehová lluvia en la estación tardía. Jehová hará relámpagos, y os dará lluvia abundante, y hierba verde en el campo a cada uno” Zacarías 10:1
Para no crearnos falsas expectativas que muchas veces lleva a apartarlos del Señor, debemos creer en Dios para que en el tiempo correcto llueva y no perdamos la cosecha.
Dios ha prometido la lluvia
Dios ha prometido la lluvia temprana y la lluvia tardía, y hay muchos que están esperando la lluvia, usan las palmas:
“y no dijeron en su corazón: Temamos ahora a Jehová Dios nuestro, que da lluvia temprana y tardía en su tiempo” Jeremías 5:24
Esperan bendiciones pero no abren sus bocas para alabar, para adorar, para hablar en otra lenguas, entonces tampoco abren sus bocas para recibirla y cosechar los frutos de Dios:
“por esta causa las aguas han sido detenidas, y faltó la lluvia tardía” Jeremías 3:3
Cuando Israel obedecía a Dios, Él enviaba la lluvia a su tiempo, pero cuando desobedecían, no lo hacía, esta es una constancia en la relación con el Señor, la obediencia trae bendiciones y la desobediencia las frena.
Dios controla la lluvia y es él quien decide cuando caerá, por eso ha guardado bendiciones sin límites para nosotros, ya que “a su voz se produce muchedumbre de aguas en el cielo” Jeremías 10:13.
Solo Dios puede ordenar a la lluvia
Debemos entender que solo Dios puede ordenar a la lluvia que caiga, y ningún esfuerzo humano ni poderes terrenales podrán hacerla descender, pero Dios garantiza la lluvia bajo una condición, la obediencia.
Recordemos siempre que cuando el cristiano rinde toda su vida al Señor, Dios manda la lluvia, y nos ha prometido que nunca cesará la lluvia mientras permanecemos en obediencia a su voluntad.
Dios no está obligado a mandarte su lluvia, el ser generoso, o el mejor cantante, o el mejor predicador no te da el derecho automático de recibir las bendiciones del Señor, pues tienes que obedecer y buscar su voluntad en todo, y después Dios derramará sus más abundantes bendiciones sobre tu vida.
Quizás nunca te has arrepentido de tus pecados y sigues siendo inconverso, quizás has asistido a la iglesia y has participado en los cultos y de estudios bíblicos pero con todo eso no te has convertido pues el arrepentimiento es la clave, y si no dejamos la vida vieja no podemos vivir la nueva; debemos entender que la lluvia de Dios solo empieza después del arrepentimiento.
Para que tus días sean de cielos abiertos, es necesario que Dios envíe su lluvia, y nos dice que cuando envíe su lluvia habrá abundancia y prosperidad pues el Señor:
“es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas” Hebreos 8:6.
Pronóstico de lluvia
Hoy tenemos pronóstico de lluvia de Dios en este lugar, y cada vez que Dios envía su lluvia hay tiempos fructíferos y prósperos, nos hace bien y además llena de alegría a nuestros corazones.
¿Puedes ver ahora cual es el problema con muchos de los cristianos?, es que nunca se arrepintieron y por eso nunca han experimentado vida en el Espíritu Santo, muchos nunca recibieron la lluvia del Señor y no sobrevivieron la sequía espiritual que llego por su desobediencia.
¿Recuerdan cuantas personas sobrevivieron el diluvio de Noé?, solo ocho; ¿de los israelitas que fueron rescatados de Egipto, cuántos entraron en tierra prometida?, solo dos:
“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad” Mateo 7:21-23.
Dios está diciendo que los tiempos prósperos y fructíferos son los tiempos en que Dios derrama el Espíritu Santo, son tiempos de crecimiento, de madurez, de progreso, de desarrollo, de cambio, y cuando habla de la lluvia tardía.
Tiempo de la abundancia
Dios nos está hablando del tiempo de la abundancia, nos está diciendo que el tiempo de la lluvia tardía es el momento para beber y llenarse del Espíritu Santo, Jesús mismo dijo:
“Si alguno tiene sed, venga a mí y beba” Juan 7:37.
Cuando confesaste tus pecados, te arrepentiste, y obedeciste al Señor. el Espíritu Santo llovió sobre tu vida; esa experiencia fue maravillosa, y después que pasó, ¿Seguiste en obediencia? ¿Cuándo Dios te pidió que dejaras tu programa de vida para hacer lo que Él te pedía, lo hiciste?, ¿Cuándo te pidió que asistieras al estudio bíblico, lo hiciste?.
Bueno, si no obedeciste, la lluvia que Dios mandó a tu vida dejó de caer, por lo que la semilla de tu fe y las raíces de tu vida espiritual no han crecido y no habrá cosecha; pero lo que no has perdido es la posibilidad de nuevas lluvias, recuerda que hoy hay pronóstico de lluvia, y si confiesas y te arrepientas de tu desobediencia, el Señor te renovará y recibirás de nuevo sus lluvias y bendiciones, pues:
“si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos de toda maldad” 1 Juan 1:9.
Dios nos está diciendo a cada uno de nosotros:
Llénate de mi Espíritu, viene un tiempo de crecimiento para nuestra iglesia, y de prosperidad para cada uno de nosotros, pero debemos abrir nuestra boca para recibir la lluvia, el Señor quiere una iglesia llena del Espíritu Santo.
La voluntad de Dios es que en principio todos tengamos una experiencia personal con su Espíritu, pero quiere que después sea nuestra forma de vida, Su voluntad es que permanezcamos llenos del Espíritu Santo:
“por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor. No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu” Efesios 5:17-18.
Nos está hablando de unción de Dios que está descendiendo sobre nosotros para sanarnos, prosperarnos y bendecirnos.
La unción de Dios para actuar en Su poder, y hacer la obra del Señor sin temor para que la tierra sea llena del conocimiento de Su Gloria y que esto haga que la iglesia crezca, madure, y se desarrolle.
Conclusión
Hoy es el día que la lluvia de Dios está cayendo sobre nuestra congregación y sobre todos aquellos que abren su boca para recibirla, hoy está derramando la lluvia del Espíritu Santo y cada vez se está poniendo más fuerte, Dios está cambiando a Su iglesia, Dios está cambiando a Sus hijos, Dios está llevándonos a nosotros de gloria en gloria, y de victoria en victoria.
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