Predicas Cristianas
Predicas Cristianas Predica de Hoy: Quita tus limitaciones
Introducción
Quiero comenzar la predicación haciéndote dos preguntas: ¿Qué crees que significa la palabra Señor?, y, ¿Qué cuentas le vas a dar del trabajo que has hecho para Él?, mientras hablo puedes revisar tus respuestas y prepararte para el día que estés frente al Señor.
En la respuesta a estas preguntas puedes encontrar lo que pone límites a tu desarrollo en las cosas de Dios, por esto es que resulta importante que te las respondas con sinceridad a fin de cumplir el propósito de Dios para tu vida.
Leamos la palabra de Dios
Filipenses 1:15-18 “Algunos, a la verdad, predican a Cristo por envidia y contienda; pero otros de buena voluntad. Los unos anuncian a Cristo por contención, no sinceramente, pensando añadir aflicción a mis prisiones; pero los otros por amor, sabiendo que estoy puesto para la defensa del evangelio. ¿Qué, pues? Que no obstante, de todas maneras, o por pretexto o por verdad, Cristo es anunciado; y en esto me gozo, y me gozaré aún”.
Algunos sirven a Dios por amor
Conforme a lo que leímos, vemos que algunos sirven a Dios por amor, mientras que otros lo hacen por envidias y contiendas, es decir que hay quien sirve por un mal motivo y otros por uno bueno, de igual manera están los que oran por compromiso o necesidad, y están los que oran porque desean tener intimidad con Dios; es como aquellos que inician una empresa porque no quieren tener jefe, y no porque quieren superarse para ser de bendición a sus hijos.
Un límite que la gente encuentra es el motivo por el cual sirve a Dios, esta el que sirve por agradecimiento, y los que pretenden hacer un canje: Si me bendices, te sirvo; si me sanas, te sirvo, y convierten el servicio a Dios en un negocio siendo que debemos servir a Dios por amor, haciendo prosperar nuestra alma sabiendo que todo lo demás vendrá por añadidura, de manera que si deseas ser prosperado:
“buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas” Mateo 6:33.
El pasado nos pone límites
También el pasado en la carne nos pone límites ya que no nos permite ver nuestro futuro en Cristo, muchos quedan presos del pasado y hablan de maldiciones generacionales, pero en vez de vivir en un problema del pasado, deberían tener más presente que:
“que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas” 2 Corintios 5:17
Y que el Señor les brinda una nueva oportunidad para avanzar, pero ahora en Sus caminos; debes saber que mientras tu mente siga en el pasado vivirás atormentado por los recuerdos, y sin libertad para ver hacia adelante en Cristo, donde sus misericordias “nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad” Lamentaciones 3:23.
Tu pasado
Tu pasado puede ser un gran obstáculo, o una gran oportunidad si entiendes que todas las cosas, buenas y malas, son usadas para el propósito de Dios, cuando estés frente a Dios no podrás decir: Yo no te serví por mi pasado, pues en la cruz:
“ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros” Isaías 53:4-6
Libres del pasado
Para ser libres del pasado, y quitarnos su limitación debemos entender que en Cristo nacimos de nuevo, y ahora somos una nueva persona.
Para muchos también los logros son una limitación, son aquellos que dicen: Ya logre llegar a donde yo pretendía, entonces, ya no hago nada más; pero se olvidan que lograr una meta, o un ministerio, no es el final de la carrera, dicen esto porque se pusieron un límite ellos mismos sin pensar que lo que ya obtuvieron se puede mejorar e incrementar.
El enemigo les permite llegar a un ministerio, o a establecer un negocio, y les hace creer que con eso son exitosos y por esto no avanzan a algo más grande; quizás estás contento porque tu empresa te dio el 10% de utilidad, pero eso debe ser un límite que te impida lograr que la utilidad sea del 30-50 %; tal vez fuiste ungido como evangelista y haces tu tarea en tu provincia, pero eso no debe ser un límite que te impida evangelizar a las naciones.
Dios quiere llevarnos de gloria en gloria
Pero recuerda que el Señor sirvió el mejor vino al final de la boda, puede que hayas avanzado en tu ministerio y crees que ya hiciste todo, creíste que tu logro llegaba hasta ahí, te creíste tu éxito y te llenaste tanto de orgullo que endureciste tu corazón, pues lo que debió aumentar fue tu humildad ya que lo que lograste no es lo máximo que Dios le puede dar, porque el Señor siempre tiene una nueva medida para darte; cuando quieras medir tus éxitos, no los compares con tu visión, sino con lo que Dios quiere para ti, mídalo con la medida de Dios.
