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La Unidad En Cristo – Parte I

Leemos en Efesios 2:11-18 Por tanto, acordaos de que en otro tiempo vosotros, los gentiles en cuanto a la carne, erais llamados incircuncisión por la llamada circuncisión hecha con mano en la carne.  12. En aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.  13. Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo.  14. Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, 15. aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, 16. y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades. 17. Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca; 18. porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre.

Después de estudiar la condición de la raza humana sin Cristo en un sentido general, vimos que están muertos espiritualmente por causa del pecado, esclavos del Diablo, el mundo y los deseos de la carne y por consecuencia directa de esta condición están bajo la justa ira de Dios, siendo este el cuadro que se pintaba de todos los que hoy caminamos con Cristo es decir que todos estábamos en esa condición.

Vimos también como a pesar de esta situación deplorable Dios nos  dio vida juntamente con Cristo esto resucitándonos con el, para lo que tenemos que estar unidos a el por medio de la fe algo que no viene de nosotros sino que es don de Dios.

En esa unidad con Cristo fuimos vivificados y sentados en lugares celestiales, entendiendo que el principal propósito de nuestra salvación es que podemos glorificar a Dios por medio de nuestras acciones.

Luego en el texto que estudiaremos hoy el apóstol presenta una nueva dimensión de la condición del hombre ahora haciendo énfasis en la relación entre dos grupos que forman la iglesia de Cristo y de los que el apóstol habla como una unidad espiritual pero cuya unidad practica fue bastante difícil de evidenciar en los tiempo del nuevo testamento, estos grupos son los gentiles y los judíos.

Judíos eran los pertenecientes a la tribu de Judá y llego a ser el termino que se usa para referirse al los miembros de la nación de Israel después del tiempo del exilio. Por consiguiente un gentil era todo aquel que no era judío.

Era tan tensa la relación entre ambos grupos en los tiempos del nuevo testamento los judíos consideraban a los gentiles como perros y los gentiles consideraban a los judíos como intransigente como una plaga para la raza humana.

Al dirigirse a la iglesia de Éfeso una iglesia compuesta en su mayoría por gentiles lo mismo que nosotros dado que  aquí no hay ningún judío presenta la condición le los gentiles en relación con los judíos y la salvación que será nuestro primer punto, la condición de judíos y gentiles en Cristo que será nuestro segundo punto.

I.          Condición de los Gentiles antes de Cristo

17 Por tanto, acordaos de que en otro tiempo vosotros, los gentiles en cuanto a la carne, erais llamados incircuncisión por la llamada circuncisión hecha con mano en la carne. 2. En aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.

Antes de Cristo la señal externa que diferenciaba a los miembros del pueblo de Dios es decir entre  los gentiles y los judíos era la circuncisión por eso llamar a un gentil incircunciso desde la perspectiva judía era el mayor insulto que se les podía proferir a estos, David refiriéndose a Goliat dijo ¿quién es este filisteo incircunciso, para que provoque a los escuadrones del Dios viviente?  Dado que esta era una señal de que estaban excluidos de la membresía del pueblo de Dios

Los judíos se jactaban de esta señal externa ya que para ellos representaba la preferencia de Dios para con ellos, pero lo que realmente mucho de ellos no llegaron a entender era que la señal por si sola no representaba  nada dice pablo Rom 2:28-29  Pues no es judío el que lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne 29.  sino que es judío el que lo es en lo interior, y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra; la alabanza del cual no viene de los hombres, sino de Dios. Sin embargo la posición de los judíos referente a la de los gentiles era altamente ventajosa antes de Cristo, dice Pablo Rom 3:1-2  ¿Qué ventaja tiene, pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión? 2.  Mucho, en todas maneras. Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios.

Así Pablo describe la condición le los hombres gentiles antes de la encarnación de Cristo y su obra redentora en la cruz  usando cinco características distintivas sin Cristo, sin una ciudadanía espiritual, sin pactos ni promesa de parte de Dios, sin esperanzas y sin Dios.

·      Sin Cristo: Los gentiles del tiempo del antiguo testamento no tenían una esperanza mesiánica,  no esperaban un salvador, adoraban a dioses muertos incapaces de hacer algo para cambiar su situación. Caminaban en oscuridad, inmundicia y desesperación del pecado y aunque algunos de ellos llegaron a ser salvo lo hicieron bajo el amparo de la nación de Israel como lo fueron Rut,  Rahab, y otros. Todos los seres humanos son salvos por una  misma condición por la fe en Cristo bajo la dispensación del antiguo pacto por un salvador que habría de venir y bajo la dispensación del nuevo pacto por un salvador que ya vino.

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