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La mente, un pequeño pero gran campo de batalla

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Sermones Cristianos Predica de Hoy: La mente, un pequeño pero gran campo de batalla

Sermones Cristianos Lectura Bíblica: Efesios 4:23

Introducción

Todo buen cristiano está consciente de la gran batalla que tiene que librar diariamente. Puesto que el enemigo siempre se encuentra declarando la guerra al que trabaja en la obra del Señor.

Anda dando vueltas alrededor de él y pone miles de trampas y obstáculos. Este enemigo “anda como león rugiente” tratando de aniquilarlo, 1 Pedro 5:8. Se vale de distintas estrategias para lograr su propósito, y, si el cristiano no se prepara adecuadamente, velando Mateo 26:41, orando 1 Tesalonicenses 5:17, ayunando Joel 1:14, escudriñando las escrituras Juan 5:39, congregándose con los santos Hebreos 10:25, será presa fácil del enemigo.

El campo de batalla

En el campo de batalla de las guerras seculares entre dos o más naciones, todos toman providencias para resistir. Unos en el ataque y los otros para la defensa. Es que cuando hay guerra, no hay tiempo para dormir o estar ociosos.

LOS SENTIDOS MAL USADOS, SON CÓMPLICES DEL PECADO, y por ende se convierte en esclavo del pecado. Antes de proseguir recordemos cuales son los sentidos: VISTA, OÍDO, OLFATO, GUSTO Y TACTO.

Veamos una historia en la los sentidos le jugaron una mala pasada a un rey, 2 Samuel 11:2. En esta historia vemos al rey David quien en tiempo de guerra, debiendo estar planificando estrategias, estaba en su palacio durmiendo.

La tentación

La Biblia dice que en la tarde, se levantó de su lecho, es decir que mientras sus soldados estaban luchando en el campo de batalla, él, estaba cómodamente acostado. Al pasearse por el terrado, vio a una mujer muy hermosa que se estaba bañando. Aquí la tentación entró por los ojos. Esta se aloja en la mente y se manifiesta por la boca y el tacto.

Ahora que la tentación está presente en la mente de David es que comienza la lucha, ¿lo hago, o no lo hago? La tentación es más fuerte mientras menos preparado para la batalla está el cristiano. Como sabemos David sucumbió a la tentación, y esta se convirtió en pecado. De allí que ES NECESARIO RENOVAR EL ESPÍRITU DE NUESTRA MENTE CADA DÍA.

Al cometer un pecado indefectiblemente a éste, se le une uno y otro y otro más de manera que se convierte en una cadena de pecados. ¿Cree que no? Pues a la codicia carnal de David, se le unió la mentira, el engaño y el crimen. Y las consecuencias de ello fue la muerte del niño que nació de ese pecado. LA PAGA DEL PECADO ES LA MUERTE.

Campo de batalla – Batalla diaria

Amados, recordemos que en esta batalla diaria debemos tener como aliadas a la justicia, la verdad, y sobre todo la sobriedad. Pues la lucha es contra principados y potestades de las regiones celestes.

Si luchamos así, seguro que la victoria será nuestra, es por esa causa que debemos presentar cada día nuestro cuerpo en sacrificio vivo a nuestro Dios sin conformarnos con lo que este siglo nos ofrece, Romanos 12:1-2.

Además nuestro Señor Jesucristo nos dice: Separados de mí, nada podéis hacer, Juan 15:5. Por lo tanto, para que nuestros sentidos no nos comprometan con el pecado, debemos entregarlos al Señor, solo así ganaremos la batalla.

© Walter Moreno Chacón. Todos los derechos reservados.

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