Inicio » Predicas Cristianas » La Fortuna de la Juventud

La Fortuna de la Juventud

Hechos 20:7-12

INTRODUCCIÓN:

El presente título es tomado  del nombre Eutico, cuya raíz griega significa: “Bien alimentado, afortunado, con buen por venir, feliz”.  He leído varias predicaciones acerca de Eutico, habiendo yo mismo predicado algunas veces acerca de este joven. Pero debo confesar que  las predicaciones que se han hecho en torno a este singular personaje bíblico casi siempre son negativas. Lo que más hablamos es del muchacho que se quedó dormido escuchando el largo sermón de Pablo, y luego lo aplicamos, diciendo: “¡Cuidado con dormirse en las predicaciones!”; o “¡es hora de despertarse del sueño espiritual!”. Y si bien es cierto que podemos hacer todas esas aplicaciones, creo que no se hace justicia al  texto cuando solo tocamos esa parte negativa.

Eutico más bien puede representar a los jóvenes que buscan y aman al Señor de corazón, pero que tienen sus luchas personales.  Considere las siguientes características y concluirá que él es más que un  creyente indiferente y distraído. El término que se usa para hablar de su edad es “neannias” que sería más o menos unos  catorce años. Esa edad es de alguien que está en pleno desarrollo y tiene  una limitante para mantener la atención y resistir tanto tiempo.

Por otro lado, el término “sentado en la ventada”, de acuerdo al texto original, sugiere que él no tomó ese lugar por un capricho personal, sino que lo habían sentado allí para que escuchara la palabra, a lo mejor por lo abarrotado del lugar. Si esto es así, a este joven lo pusieron en una situación de alto riesgo. Observe también que la expresión “rendido de un sueño profundo”, o “vencido del sueño”, como dicen otras traducciones, sugiere que él no llegó a la ventana a dormir. Él llegó a la ventana a escuchar pero comenzó una gran lucha por no dormirse. La palabra sueño aquí es “upne” de donde nos viene la palabra hipnotismo. ¿Ha pasado usted por esos tiempos? ¿Ha tenido esas luchas sobre todo cuando sabe de su responsabilidad?

Por último, vemos que ese joven estaba en lugar correcto cuando cayó. Estaba en la casa del Señor. Él fue allí a buscar vida y se encontró con la muerte. En esto hay algo que debemos atender con urgencia cuando pensamos en nuestros jóvenes: no esperemos levantarlos después que han caído, cuidémoslos ahora. Ellos son “el divino tesoro” del presente. ¿Qué evidencias tenemos que Eutico si era un fiel cristiano y no tanto un dormilón? ¿Por qué sostenemos que este joven era afortunado? ¿Por qué nuestra juventud es una gran fortuna para nuestra iglesia y por qué debemos cuidarlos?

I.  ES UNA GRAN  FORTUNA CUANDO UN JOVEN TOMA LA DECISIÓN DE ESTAR EN LA REUNIÓN DE LOS SANTOS EN EL DÍA DEL SEÑOR

1. Todo joven cristiano necesita estar en la iglesia (v.7).

Entre el grupo que se había reunido ese primer día de la semana (domingo), estaba el joven Eutico. Él tomó la decisión de estar en el  en el día y el lugar correcto cuando el pueblo de Dios se reunía para adorar. A pesar de su edad escogió estar en la reunión de los santos.  Su presencia en tal lugar confirma la evidencia que era un joven consagrado. ¿Dónde están algunos jóvenes cristianos en el día del Señor? ¿Por qué algunos no los tenemos en la iglesia en el día del Señor? Los jóvenes han sido parte vital de la iglesia desde el principio. Ellos siempre han sido parte de ella. Desde la antigüedad hasta este tiempo, los jóvenes han formado parte de ella. Fueron jóvenes los que sacaron a Ananías y Safira cuando murieron por mentir al Señor (Hch. 5). Es una fortuna contar con ellos en la iglesia. El joven cristiano debe tomar la decisión del  salmista: “Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos. Escogería antes estar a la puerta de la casa de mi Dios, que habitar en las moradas de maldad” (Sal. 84:10).  Es  un gran privilegio para nuestra iglesia que tengamos tantos “Euticos”. Una iglesia sin jóvenes le falta la  sonrisa. Los adultos ya no ríen mucho.

 2. La reunión de los santos los hace fuerte (1 Jn. 2:24).

La presencia de Eutico en el culto oyendo  el largo sermón de Pablo indica que era un joven constante. Tome en cuenta que él se cayó  en la casa del Señor. No se cayó en el mundo donde muchos caen continuamente. Observe la frase “y llevaron al joven vivo, y fueron grandemente consolados”. Es cierto que por su misma edad el joven pudiera estar inquieto o a veces distraído, pero el hecho de tenerlos en la casa del Señor es una gran bendición, pues al final  llegaran a ser fuertes en el Señor. Así que el que pudieran llevar a Eutico vivo fue de gran consuelo para ellos y para sus padres. ¿Sabe usted lo que implicaría llevarle a los padres a su hijo muerto? Hay que resaltar que Eutico fue un joven constate y esto es lo que más anhelamos  en la juventud de hoy. Cuando los jóvenes de la iglesia son constantes, el resultado será lo que escribió Juan años después: “Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno”. ¡Qué hermoso testimonio para la juventud! Joven ¿qué tan fuerte eres en las cosas del Señor? ¿Qué te impide ser constante para servirle al Señor en lo que él te pide?

II.  ES UNA GRAN FORTUNA CUANDO UN JOVEN SE ESFUERZA EN PERMANECER   ATENTO A LA PALABRA DE DIOS

Deja un comentario