El pecado del orgullo

Ese fue el pecado que destruyo al rey Uzias, y murió leproso por su orgullo. Dice la Biblia que el empezó a reinar a los dieciséis años de edad, su padre fue Amasias y su madre Jecolías, reino en Jerusalén cincuenta y dos años, hizo guerra en contra de los filisteos, amonitas, en contra de los árabes y Dios lo respaldaba, a todo su ejército les dotaba de todo lo que necesitaban para luchar y conquistar.

Pero ¿Qué cree que pasó? Tanto era su fama que cuando aumentó su poder, Uzías se volvió arrogante, lo cual lo llevó a la desgracia. Se rebeló contra el Señor, Dios de sus antepasados. En el segundo libro de las crónicas nos revela esto… (2 Crónicas 26:16.) y dice la biblia que inmediatamente después que él quería quemar incienso en el altar se llenó de lepra hasta su muerte, ¿sabe por qué? por su orgullo. Después su hijo Jotán quedó al cargo del pueblo. Qué triste final de alguien orgulloso lleno de arrogancia.

El pecado del orgullo – Falsos maestros orgullosos. (1 Timoteo 6:3-4)

Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, 4 está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas,´´.

Algo que caracteriza a los falsos maestros (pseudo predicadores) es el orgullo que tienen la prepotencia, nadie les puede enseñar, sienten que lo saben todo, se sienten igual que Dios, entonces dejan a Dios a un lado y hacen lo propio, en donde queda la revelación de su palabra si es que se dan tiempo de estudiarla.

No puede haber tal revelaciones que dicen tener si no tienen comunión con Dios y su palabra, ´´4 está envanecido (está envuelto en humo, y eso de estar envuelto en humo como resultado es no saber nada), nada sabe, y delira´´…

Muchos falsos maestros de la palabra viven esto hoy en día, y siempre se excusan en decir que Dios les da palabra en el momento preciso que están en el púlpito ¿y qué con la preparación anticipada? ¿Qué alimento darán a sus congregaciones? Pero todas estas cosas las hacen porque se creen autosuficientes, piensan que por su gran inteligencia no necesitan de la oración y del estudio minucioso de la palabra.

¿Cómo son los impíos? Romanos 1:29-32 (TLA) 

Son gente injusta, malvada y codiciosa. Son envidiosos, asesinos, peleadores, tramposos y chismosos. 30 Hablan mal de los demás, odian a Dios, son insolentes y orgullosos, y se creen muy importantes. Siempre están inventando nuevas maneras de hacer el mal, y no obedecen a sus padres. 31 No quieren entender la verdad, ni se puede confiar en ellos. No aman a nadie ni se compadecen de nadie. 32 Dios ya lo ha dicho, y ellos lo saben, que quienes hacen esto merecen la muerte. Y a pesar de eso, no sólo siguen haciéndolo, sino que felicitan a quienes también lo hacen.´´ Así se comporta el mundo entero, hay mucha jactancia en ellos, son fanfarrones, provocan pleitos.

¿Cómo debe ser el hijo de Dios? O algún cristiano encargado de algún ministerio en la iglesia, el apóstol Pablo le da algunas instrucciones a Timoteo, (TLA) 1 Timoteo 3:6. ´´6 Y no debe ser alguien con poco tiempo de haber creído en Jesucristo, pues puede volverse orgulloso, y entonces recibirá el mismo castigo que Satanás.´´

Un ministro de Cristo no se hace en un instituto Bíblico sino adquiriendo responsabilidades y peleando en el campo de batalla, porque hay mucho que terminan el instituto bíblico y hasta con muy buenas calificaciones pero no están en el campo de batalla, y dicen que son pastores porque terminaron satisfactoriamente todas las materias pero no quieren compromisos en el ministerio, eso no es así.

Por otro lado hay algunos que tienen poco en el conocimiento de la palabra y ya los ponen a predicar o encargado de alguna célula o misión, lo que se provoca es que tal persona se sienta que conoce más que todos (orgulloso), la biblia aconseja que no se haga así, sino que tengan un tiempo considerable de haberse convertido a Jesucristo.

Caída de Satanás fue ocasionada por su orgullo

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