Predicas Cristianas
Prédica de Hoy: David – Regreso a la adoración
Predicas Cristianas Texto Bíblico: “Fue dado aviso al rey David, diciendo: Jehová ha bendecido la casa de Obed-edom y todo lo que tiene, a causa del arca de Dios. Entonces David fue, y llevó con alegría el arca de Dios de casa de Obed-edom a la ciudad de David. Y cuando los que llevaban el arca de Dios habían andado seis pasos, él sacrificó un buey y un carnero engordado. Y David danzaba con toda su fuerza delante de Jehová; y estaba David vestido con un efod de lino. Así David y toda la casa de Israel conducían el arca de Jehová con júbilo y sonido de trompeta.” (2 Samuel 6:12-15)
Introducción
El pueblo de Israel pidió tener un rey, eligieron a Saúl, seleccionado por su apariencia. Dios en cambio no había elegido a Saúl. Poco tiempo después Saúl se desvía de los caminos de Dios y elige a David.
Cuando Dios envió a Samuel para ungir a David, llegó a la casa de su padre y le presentaron al profeta al mayor de sus hijos.
Samuel pensó que estaba ante el próximo rey de Israel, pero no fue así. Pasaron todos los hijos de Isaí y ninguno de ellos era el que Dios había elegido.
Dios no mira lo que nosotros vemos, no ve la apariencia de las personas, ni su trasfondo socioeconómico, mucho menos la raza. Dios examina el corazón de cada uno. Por eso le dice a Samuel que ninguno de ellos será el próximo rey de Israel. Samuel pregunta a Isaí si tiene algún otro hijo. Ni siquiera su padre había pensado en la posibilidad de mencionar a David, pues era joven.
Sin embargo Dios eligió a David como rey sobre Israel. Pero cuando Samuel unge a David por rey, Saúl todavía reina. David espera en Dios y no se apresura. No toma decisiones, primero consulta con Dios
1) El primer acto de David como rey
David es ungido como rey pero espera a que Dios obre. Saúl era el rey oficial y debía esperar en Dios. Pronto se convierte en el rey indiscutible de Israel y Saúl es desechado por Dios. Al saber esperar en Dios David está reconociendo que depende solo de Él.
Uno de los primeros actos de David como rey es regresar el Arca del Pacto a su ciudad. Quería regresar el centro de adoración a donde pertenece. Para que el pueblo también sepa que el centro de su reinado será Dios. David está proclamando con este acto que él es el rey pero sobre él está Dios y no toma ninguna acción fuera de Él. Le está declarando al pueblo que Dios es primero y a Él solo se debe adorar.
David no inicia declarando guerras, no inicia atacando a la familia del antiguo rey, no hace ninguna cosa sino acercarse y acercar al pueblo a Dios. Sabe que su reino para ser duradero debe estar fundamentado en el Señor. David lo sabe y quiere que el pueblo lo sepa también.
Pero por sobre todas las cosas David quiere honrar a su Dios. Quien lo eligió por rey en lugar de Saúl. Quiere adorar a Dios, pues así está en su corazón. Y por esto es que Dios lo eligió, pues David es un adorador.
2) No como David quería, sino como Dios quiere
Pero cuando David intenta llevar el Arca a su ciudad algo pasa. Uno de los que estaban cerca toca el arca pues iba a caer y entonces la ira de Dios se enciende, muriendo esta persona. Dios es un Dios celoso y el Arca era el objeto más santo que existía. Dios lo había consagrado exclusivamente para su servicio y no podía ser contaminado.
David se entristece por lo sucedido, por la muerte de esta persona, pero principalmente porque no es la forma que Dios desea. Debían cumplirse ciertos requisitos para que el Arca pudiera ser trasladada como Dios lo requería. David lo aprende, pero mientras el Arca es dejada en la casa de otra persona. De repente esta persona comienza a ser bendecida por Dios. Todo en esta casa es prosperado y todo lo que hacía esta persona era bendecido por Dios.
Esto pasa cuando Dios está en la casa. Esto pasa cuando Dios bendice a una persona, Dios nos bendice cuando somos adoradores. Cuando llamamos a su presencia y dejamos que reine en nuestro corazón. Es lo que David sabía y quería hacer cuando decidió traer el Arca de vuelta. Pero David aprendió que no era como él quería sino que como Dios quería.
No es como queremos que suceden las cosas, no es como ni cuando, sino que es como Dios quiere. Lo que si desea el Señor es estar en el centro de nuestro corazón. Y que de nuestro corazón salga la más pura adoración a nuestro Padre Celestial.
3) David – Aun siendo menospreciado por los demás
Al sonido de trompetas, con múltiples sacrificios David traía el arca a su ciudad. David hizo una gran fiesta al devolver la adoración al pueblo. David danzaba con toda su fuerza dice la biblia. Cantaba y danzaba delante de Dios con todas sus fuerzas. Todo el pueblo miraba como David alababa a Dios y como el Arca regresaba al lugar que le correspondía.
