Un solo Dios

a. Entre Dios y los hombres

El puente que une a Dios con los hombres o que permite que los seres humanos nos acerquemos a Dios debe cumplir perfectamente su función. No es un puente entre los hombres, pues ningún hombre nos puede salvar o ser el mediador. La mediación es entre Dios y los hombres, entre el salvador y los salvados de la condenación.

b. Solo uno

No existen mediadores posibles, solo hay uno que puede ocupar ese puesto. Solo Jesucristo fue hallado perfecto y solo su sangre puede limpiarnos de la maldad. Es por eso que al ser limpios de pecado por la sangre de Jesucristo, podemos acercarnos a Dios con confianza pues su sangre nos hace justos delante del Señor.

Al intentar acercarnos a Dios por nuestra cuenta nos encontraremos que no podemos hacerlo, pues Dios es santo y requiere que quien se acerca a Él también lo sean.

Pero no es posible ser santos por nuestros medios, es necesario entonces estar limpio de pecado y así acercarse a Dios. Solo a través de Jesucristo podemos ser limpios de pecado, solo a través de Él y de nadie más podemos recibir el perdón y acercarnos a Dios.

4. Solo un mediador por todos

El sacrificio de Jesús no fue para unos pocos, sino para toda la humanidad. Cualquiera puede dejar de adorar a sus dioses y acercarse al Dios verdadero a través de Jesucristo.

Es por eso que el sacrificio de Jesús fue tan especial, porque con ese sacrificio perfecto alcanzó a todos aquellos que quisieran venir a sus pies. Con ese sacrificio alcanzó a todos aquellos que se arrepienten de su vida de pecado y piden perdón al Dios Todopoderoso.

Cristo murió por todos, dejemos nuestros dioses personales, dejemos de servir a aquello que no es Dios y vivamos solo para Él y veremos su gloria en nuestra vida y en la vida de los que nos rodean.

Solo hay un Dios y solo hay un medio para llevarnos a Él, debemos humillarnos ante tan grande amor y misericordia pues nos ha dado con su amor la vida eterna.

Solo debemos dejar de creer en dioses falsos y creer en el Dios verdadero para que obtengamos la vida eterna. Podemos pasar de una muerte eterna a una vida eterna con sólo desechar los dioses del mundo y reconocer al Dios verdadero que vive y permanece para siempre. Entonces le conoceremos tal como Él es, no como el mundo dice que es, sino que le veremos cara a cara.

5. Se testifica

Nadie podrá decir que no ha escuchado el mensaje de la palabra de Dios. El mensaje se ha extendido a toda creatura, a toda persona en la tierra. La palabra de Dios es viva y cumple un efecto en las personas que las escuchan, pues es la misma palabra de Dios.

Ahora los que le hemos conocido, al único y sabio Dios, debemos testificar a todos aquellos que se crucen en nuestro camino. Debemos testificar que Cristo vive, que Dios solo hay uno y que sólo Él salva del pecado.

Pero el mejor testimonio que podemos dar a aquellos que no creen en la existencia de Dios o los que le buscan pero no le encuentro, es nuestro comportamiento, es vivir en una nueva forma de vida siendo dirigida por el Señor.

Conclusión

El mundo seguirá buscando sus respuestas, seguirá buscando a su dios, pero debemos testificar del mediador que puede llevarnos al Dios verdadero. Debemos predicar a Jesucristo como ese único mediador entre Dios y los hombres.

Debemos predicar la verdad de las cosas, que los dioses del mundo no salvan y no hacen nada, que solo Dios salva y que a él es necesario buscarle para obtenerla. Debemos testificar de que Dios sí existe y que ha cambiado nuestra vida desde el primer momento que venimos a sus pies.

El mundo entero debe saber, debe conocer su poder y rendirse al Dios verdadero, postrarse a sus pies. Dice su palabra que toda lengua confesará, que toda rodilla se doblará ante el verdadero Dios. Pues no hay otro en quien podamos ser salvos, solo Cristo salva, solo Dios nos puede dar la vida eterna.

En ningún otro hay salvación, por eso debemos darle a Él toda la adoración. No hay otro que merezca nuestra adoración, solo el Dios verdadero, solo hay uno, solo nuestro Dios.

© Julio Torres. Todos los derechos reservados.

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