Bendícenos Señor

Ricardo Hernandez

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Bendícenos Señor

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Prédicas Cristianas

Prédica de Hoy: Bendiciones, Bendiciones, Bendícenos Señor

Prédica Cristiana Texto Bíblico: Efesios 2:1-10

Bendiciones – Introducción

Es común ver que al recibir a Jesucristo como Señor y Salvador personal, los creyentes comienzan un monólogo de solicitudes al Señor.

El tiempo de comunión que tienen con el Señor es una extensa lista de bendiciones requeridas. Es así que se elevan las solicitudes de sanidad, de prosperidad, de restauración y unidad familiar, etc, etc, etc.

Y lo que no es común es escuchar las palabras de agradecimiento por la salvación que hemos recibido. Las gracias por los pecados perdonados, y menos aún, por la nueva vida que nos ha dado.

Vida nueva que en muchos casos no se llega a vivir pues son muchos los que no renuncian a su vieja manera de vivir, y continúan con una vida pecaminosa aunque estén dentro de una congregación y hablen del Señor.

Pareciera ser que el convertirse a Cristo es para muchos, solamente la habilitación para pedir bendiciones del Señor. Y por esto es que escuchamos oraciones pidiendo: Señor, bendice mis manos, y bendice mis ojos para que sepan ver la necesidad.

Señor, bendice mis oídos para que sepan oír tu voz y sepan quedarse sordos a la murmuración y a la palabrería, bendice mi boca para que dé testimonio de Ti. Señor, bendice mi corazón para que sea templo vivo de tu Espíritu, que sea generoso en perdonar y aprenda a compartir el dolor y la alegría con amor.

Pero lo que raramente escuchamos son oraciones dando gracias por la salvación que el Señor nos ha dado a través de su sacrificio, y una buena forma de saber cuán cristiano somos sería sabiendo cuántas veces dimos gracias a Dios por la salvación.

En la iglesia todos somos creyentes, al menos es lo que debería ser. Pero, ¿se ha preguntado si es salvo? Pues esa es la pregunta fundamental en la vida de un verdadero creyente y que vivimos en tiempos terribles y eso lo sabemos todos, aún los inconversos.

Vivimos días que el mundo nunca ha visto, los cimientos mismos de la humanidad están siendo sacudidos; no hay ley y el mundo es una gran rebelión, las ciudades son inseguras y esto hace que la civilización moderna esté al borde del colapso total.

Frente a esta situación, encontramos por todas partes a hombres están desesperadamente buscando respuestas en cualquier lugar que le ofrezcan algo que parezca una solución a sus necesidades espirituales.

El problema es que los hombres buscan soluciones en caminos incorrectos y en la fuente incorrecta pues se niegan a admitir que la raíz del problema que les desespera y quita la paz interior, es el pecado. Y como niegan la existencia de pecado en su vida, rechazan contar con Dios a la hora de buscar la solución que necesitan, y la realidad es que nunca encontrarán estas cosas, y su fin será sin ninguna duda, el infierno.

El hombre debe comprender que la única solución de sus problemas está en Cristo, y es la salvación del pecado por la muerte de Jesucristo y por la gracia de Dios; y solamente pueden decir que realmente tienen paz aquellos que están salvos por gracia a través de su fe como un don de Dios.

Solamente éstos son los que no están perturbados por las cosas que suceden cada día y se alegran frente a éstos hechos porque saben que a través de estos eventos, Jesús está viniendo otra vez para concretar la salvación y vida eterna que Él ha comprado para ellos en la gloria de Dios.

Bendiciones de la salvación

La salvación es la liberación de la miseria más profunda del pecado para elevarnos a una gloria superior

Estábamos muertos en transgresiones y pecados por lo que caminábamos conforme a los caminos que sigue el mundo, entonces tenemos nuestras conversaciones con los deseos de nuestra carne, hacemos los deseos de nuestra carne y de nuestra mente y somos por naturaleza hijos de ira.

Esa es nuestra miseria, la muerte espiritual, y no podemos salvarnos a nosotros mismos, y desde esa profunda miseria es que somos liberados cuando Dios nos salva, somos vivificados junto con Jesucristo, somos hechos vivos en Cristo; esta es la salvación, y no solo eso, también podemos sentarnos juntos en lugares celestiales en Cristo, esa es la salvación.

Esa cosa tan tremendamente importante y grandiosa es la salvación que el Señor nos da, y duele ver como muchos no piensan en esto, y simplemente limitan su vida cristiana a pedir bendiciones de Dios, bendiciones materiales, bendiciones espirituales, pero nunca dan gracias por la salvación.

Un almacén de bendiciones

Es triste pensar que para muchos el evangelio solo es un almacén de bendiciones, donde el título de cristiano es la tarjeta que les acredita para pedir que el Señor les envíe a su casa todo aquello que desean o le piden.

Y fíjense que más triste es pensar que muchos de éstos cristianos, como decía, están esperando que el Señor les haga el envío a domicilio pues ni siquiera quieren molestarse a asistir a la iglesia todos los domingos ni participar de las actividades de la congregación; deberíamos pensar cómo se siente el Señor cuando elevamos nuestro monólogo de peticiones y ni insinuamos nuestro agradecimiento por la salvación.

Bueno, pero además de dar gracias por la salvación, necesitamos cosas para vivir, “pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosasMateo 6:32. Y el Señor nos entregó la autoridad y poder al decir: “Os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará. Pero no os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielosLucas 10:19-20.

Esto es por medio de la palabra de autoridad entregada por Él a todos los cristianos, por es tan importante profetizar y declarar bendición: ya que “del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; Se saciará del producto de sus labios. La muerte y la vida están en poder de la lenguaProverbios 18:20-21, y Dios no miente.

Y como sabemos que el Señor dijo: “De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo. Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellosMateo 18:18-20, por fe, por esa misma fe con la cual obtenemos nuestra salvación, les invito a que enviemos una palabra profética para nuestra vida.

Les invito a que primeramente demos gracias por esa salvación tan grande que nos diera, y por todos los beneficios recibidos a través del sacrificio en la cruz; y profetiza la restauración de tu familia y establece que la paz de cristo reinará en tu hogar, comprometiéndote a servir todos al Señor.

Conclusión

Profetiza que las cosas pasadas quedarán en el olvido para siempre, y que toda maldición, o hechicería quedan ahora deshechas en el poderoso nombre de Jesús, y con esto sale toda enfermedad de tu familia.

Profetiza ahora que todos tus hijos son alejados de los malos caminos, de los vicios, de las malas amistades y se vuelven a Cristo para servirle con obediencia y alegría todos los días de sus vidas.

Profetiza una unción de cambio para tu vida, unción de servicio que hará florecer y prosperar tu ministerio como nunca antes lo hizo para tener un nuevo amanecer, y todo engaño, toda desilusión, quedan muy atrás, en el poderoso nombre de Jesús.

Recibimos ahora una unción de cambio, para ser transformados, para ser cambiados de tal forma que nuestro ministerio perdure a pesar de los problemas y las pruebas.

Profetiza que la prosperidad divina llega a tu casa y tus finanzas son sanadas, y también recibes sabiduría para administrar correctamente tu dinero para que no te alcance la crisis económica del país y todo lo que tocan nuestras manos prospera, y se van ahora de tu vida la escasez, la pobreza, las deudas, la enfermedad, la depresión,  y la pereza, en el poderoso nombre de Jesús.

© Ricardo Hernández. Todos los derechos reservados.

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Ricardo Hernández
Autor

Ricardo Hernandez

Servidor de nuestro Señor Jesucristo. Entregue mi vida a Cristo hace más de 20 años, y me gusta compartir los mensajes cristianos que Dios pone en mi corazón.

1 comentario en «Bendícenos Señor»

  1. Oh hermano que dicha poder leer sus predicas llenas de tanta inspiración divina le vuelvo a reiterar usted por medio de sus predicas que aquí sube predica y es el sostén de una iglesia en Altavista mexico Nayarit siga así por qué sus predicas son inspiradas de Dios

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