Una respuesta a la religiosidad

Así que estos hombres le reclaman porque los discípulos de Jesús no ayunaban, y yo me pregunto: ¿dónde dice que ellos no ayunaban? Recuerde que en Mateo 6 Jesús les dice: cuando ayunes hazlo así. No les dice si algún día van a ayunar; les está más bien confirmando que en su proceso de vida hay ayuno. Entonces lo que vemos de aquí es que los discípulos de Jesús si ayunan. Pero la diferencia de los demás es que ellos no tenían la necesidad de avisar a los demás cuando lo estaban haciendo. Entonces las demás personas asumían que ellos no ayunaban porque no salían con trompeta anunciando: Oye estoy ayunando soy un devoto.

Así que miro este cuadro una vez más, y veo que estos hombres le reclaman a Jesús y le dicen ¿por qué no están ayudando? Me imagino a Jesús rascándose la cabeza y pensando en sí mismo y decir, pero si acabo de salir de 40 días de ayuno, pero no necesitamos estar avisando. Mira la respuesta de Jesús:

Vers. 19. “Jesús les contestó: —¿Acaso los invitados de una boda ayunan mientras festejan con el novio? Por supuesto que no. No pueden ayunar mientras el novio está con ellos; 20 pero un día el novio será llevado, y entonces sí ayunarán.” (NTV)

La respuesta del Señor es clave para entender la mentalidad de Jesús a la pregunta o reclamo: ¿y por qué no ayunan? Jesús no les está aclarando o recalcando que si ayunaban, pero lo que sucede es que ustedes no nos ven. 

Su respuesta es afirmar que hay una respuesta diferente ¿vamos a ayunar mientras el novio está presente? Jesús no tiene el interés de convencer a las demás personas que es espiritual. Jesús no estaba buscando apantallar a las demás personas con Su devoción.

Para los religiosos, la parte más importante de su devoción es que las demás personas reconozcan su sacrificio. Y por eso ayunaban dos veces por semana; porque querían que los demás que ayunaban sólo un día les vieran a ellos y dijeran: Guao, que devotos que espirituales.

Así que la actitud religiosa es devoción, no para tener intimidad con Dios, sino para tener el respeto humano. Si hacemos lo que hacemos para impresionar a los otros, entonces no estamos agradando a Dios. Jesús te dice que si haces esto para ser vistos por los hombres, te reconocieron, porque te aplaudieron, te felicitaron, se asombraron de tu habilidad de ser espiritual, entonces Dios te dice allí tu recompensa . Pero solo eso será tu recompensa.

Pero cuando des, cuando ores, cuando ayunes, no lo hagas para ser visto por los demás. Recuerda que el Padre ve en secreto, y te recompensará (Mateo 6:6). La idea es: somos devotos pero no con el plan de ser vistos.

Mire, para que funcione esta iglesia hay algunas personas que trabajan tras bambalinas sin esperar un reconocimiento público. Pero ellos en su corazón están muy conscientes que lo hacen por amor a Dios y amor a ustedes.

Eso es una gran diferencia porque hay personas que pueden servir, orar, diezmar, ayunar, leer la biblia, porque quieren impresionar y apantallar. Pero hay personas que lo hacen porque tienen una devoción genuina y muy real por Jesús.

Ahora no debe existir esa misma actitud de los escribas y fariseos. Se diezma tanto yo debo ganarle a otro. Si él sirve en un ministerio yo voy a servir en dos. Si él ora 30 minutos yo lo haré una hora, etc., eso es una competencia. Se sienten bien no porque están en una intimidad con Dios, sino porque supere a mi prójimo. Ésa es la idea de los fariseos; para ellos el sentido del ayuno se había perdido.

El significado y era únicamente una forma de sentirse bien consigo mismo. Y esa no es la razón por la que servimos, no es la razón por la que damos para aparentar o sorprender a las otras personas, más bien es para servir y amar a Dios.

En el texto dice que siendo que está presente el novio no es necesario ayunar (vers. 19). En el tiempo de Jesús habían rabinos que debían poner una regla de excepción, y decían no tienes que ayunar en una boda. En aquel tiempo las bodas demoraban una semana, así que en media fiesta, alguien que estaba ayudando tenía que no comer dos días y decir al novio: hoy perdona que no puedo acompañarte, pero estoy ayunando.

A esto Jesús está diciendo que no es tan lógico porque hay momentos, hay etapas para prohibirte algo o para privarte de algo, pero un momento de celebración no es el momento en indicado para ayunar. Así que si los amigos están en un matrimonio por respeto al novio ellos no deben ayunar.

Lo que Jesús está diciendo es que hay que saber discernir el momento, y que como cristiano es importante ser disciplinado. Parte de ser cristiano es aprender a decirle no al pecado, si a Jesús, y no a los malos hábitos.

El cristianismo es marcados por devoción y disciplina y hasta prohibiciones de cosas que Dios prohíbe, y cosas que a veces se ignora en la iglesia cristiana.

Lo que aquí está enseñando Jesús es que para ser un cristiano sano necesitas disciplina, pero también necesitas ser divertido. Es decir, ir a la boda y estar con tus amigos. Es decir, ir, reír, comer, celebrar, y decir algo especial está sucediendo. Eso es lo que Jesús enseña, que hay un momento para ayunar y hay un momento para celebrar. Y si no sabes discernir el momento, tal vez estarás triste cuando deberías estar alegre, y estarás alegre cuando deberías estar triste.

2 comentarios en «Una respuesta a la religiosidad»

Deja un comentario