Viendo este cuadro de manera general podríamos admirar muchísimo su fe porque ella está diciendo que ni siquiera necesita que Jesús hable con ella, ni que la toque, que sólo necesita tocar el borde de su manto. Ahí está confesando que si tan solo toca algo de su ropa, Jesús es tan grande y tan poderoso para sanarla y sacarla de su crisis.
Pero había un entendimiento en aquel entonces; recuerde que los hombres judíos usaban un manto de oración que se llamaba “Shall” y en las esquinas o bordes de este shall tenían unos nudos que colgaban y estos nudos o bordos se llamaban alas, y en Malaquías había una profecía que decía qué: El Mesías llegará con sanidad en sus alas.
Entonces había un entendimiento en esos días que una de las características del Mesías es que su shall de oración iba a tener poderes sanadores, y tal vez es lo que ella estaba pensando que si tan sólo podía tocar su manto de oración podía quedar sana. ¿Qué nos demuestra esto acerca de la mujer? Nos demuestra que no solamente creía que Jesús es poderoso y sanador o una persona con un poder especial, lo que está indicándonos es que ella creía que él es el Mesías que estaba llegando con poder de sanidad.
Si tan sólo podría tocar el borde sé que seré una mujer sana.
Así que no le importa pasar entre la gente arriesgando su vida. Ella llegó y tocó, y dice la biblia que al instante esta mujer fue sanada. ¿Puedes imaginarte qué tan fuerte tenía que haber sido esa hemorragia constante para que en un segundo se dé cuenta que está sana?
Tenía antes un flujo continuo y eso produce anemia, debilidad, su rostro y su piel pálida, y ahora en un segundo darse cuenta que paro ese flujo, ella solo respira profundo y dice guau estoy sana, me puedo ir a mi casa.
Marcos 5:30-32 Jesús se dio cuenta de inmediato de que había salido poder sanador de él, así que se dio vuelta y preguntó a la multitud: «¿Quién tocó mi túnica?». 31 Sus discípulos le dijeron: «Mira a la multitud que te apretuja por todos lados. ¿Cómo puedes preguntar: “¿Quién me tocó?”?». 32 Sin embargo, él siguió mirando a su alrededor para ver quién lo había hecho.
Recuerda que en este momento Jesús ya era muy famoso, así que la gente estaba muy amontonada tratando de tocarle la ropa, tocarle la mano de robarle un cabello. Imagínate porque son culturas muy supersticiosa así es que de pronto alguien decía bueno con un pelito me basta para hacer algo.
Ahí veo a todos intentando acercarse a Jesús y los discípulos como guardaespaldas abriéndole paso para que él pueda caminar, y de golpe se para Jesús y dice alguien me tocó. Y los discípulos le dicen si Jesús como 300 personas, ¿como nos vas a preguntar quién me tocó cuando es obvio que las personas no te pueden dejar solo? Pero el contesto, no sólo me tocaron sino que sentí que salió un poder sanador de mi.
Marcos 5:33-34 Entonces la mujer, asustada y temblando al darse cuenta de lo que le había pasado, se le acercó y se arrodilló delante de él y le confesó lo que había hecho. 34 Y él le dijo: «Hija, tu fe te ha sanado. Ve en paz. Se acabó tu sufrimiento».
Cómo he dicho anteriormente esta mujer no podía salir en público ni estar en la multitud, y literal eso era un riesgo por su vida. Es muy difícil entender el fervor religioso que tenía la gente en ese entonces y pensar que una mujer que ceremonialmente era impura que no podía ni siquiera acercarse a la gente ni entrar al Templo.
Ahora a contaminado a la multitud (cuarentena) tienen que pasar por un proceso de lavamiento y purificación para estar bien otra vez. Lo mínimo que podían haber hecho es que le hubieran gritado, le hubieran insultado, le hubieran humillado, pero en esa cultura lo más probable es que le hubiesen golpeado o matado.
Por eso esta mujer está aterrada y cuando Jesús pregunta ¿quién me tocó?, ella le confesó todo lo que había pasado. Es decir le contó toda su historia, eso lo dijo delante de toda la multitud. Venía por 12 años sufriendo con esto y nadie me pudo curar, y ahora vino entre la gente y sólo toqué tu manto y he quedado sana.
Jesús en vez de escandalizarse y decirle quién te crees que tú eres para tocarme, Él le contesta con amor diciéndole “hija” tu fe te ha sanado. Mire la palabra “sanado” aparece 100 veces de las cuales 88 veces se refiere no solamente ha sanado sino ha salvado.
Entonces está hablando más que una sanidad física sino que está hablando de una sanidad completa de alma, espíritu, cuerpo, emocional. Le está diciendo hoy estás completa porque tu fe te ha salvado. Le dice ve en paz; en la cultura judía eso es “Shalom”.
