Siento que Jesús no haría esto sólo para variar la técnica, o para hacer algo diferente. Lo que siento es que esto no es casualidad, y meter los dedos en las orejas de las personas, yo creo que simbólicamente lo que les está diciendo los discípulos es que tus oídos no sirven hasta que no dejes que Jesús entre tu Vida. Que puedes escuchar, pero no puedes entender hasta que Jesús esté dentro de tu vida. Si quieres hablar palabras de vida, si quieres decir palabras de esperanza, palabras de propósito, tienes que dejar que Dios entre a tu vida.
Hay muchas personas que vienen a la iglesia que están en la presencia de Dios, pero si Jesús no está dentro de ti no vas a poder encontrar sentido a las palabras que te predican, con las palabras que dice en la Biblia. Por eso he visto que hay personas que leen la biblia o escuchan predicas y por muchas veces pero no entienden nada.
Escuchas pero no entiendes, oyes pero no asimilas, no entendemos que para entender la palabra necesitamos tener a Dios dentro de nosotros, y por eso es que Jesús le mete los dedos con saliva, como para decirte si quieres escuchar, si quieres entender, no es suficiente estar cerca de Jesús. Lo que NECESITAS ES TENER A JESÚS ADENTRO DE TI, NO ES SUFICIENTE IR A LA IGLESIA, SI ÉL NO ESTÁ DENTRO DE TI.
Jesús alza sus ojos al cielo (vers. 34)
“y levantando los ojos al cielo, gimió, y le dijo: Efata, es decir: Sé abierto.”
Aquí vemos que Jesús alza sus ojos al cielo, y tome atención con esta palabra dice que el gimió. Es decir, no es un suspiro, ya que gemir tiene una connotación diferente. Suspirar es sólo un respiro fuerte, sin embargo gemir es la misma palabra que se usa en romanos refiriéndose a cuando vemos injusticia, vemos corrupción. Cuando vemos que el mundo se está destruyendo, dice todo el mundo gime a una esperando la redención del mundo porque cuando vemos maldad, injusticia, corrupción, hay algo en ti que te duele.
Romanos también dice que el Espíritu Santo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Es decir que tiene una urgencia al momento de orar. Se percibe, se transmite una urgencia, y Jesús toma a este hombre y ve su necesidad y gime aún sabiendo lo que va a pasar. Sabiendo que lo va a sanar, sabiendo la historia completa porque está comunicándole a esa persona que le importa, que él se identifica con su situación y no le está diciendo tranquilo ten paciencia. Jesús lo ve y ve su estado roto en su corazón, así que aparte de sanar no le dio la facilidad de hablar de una manera elocuente.
Jesús mira la condición de este hombre y le duele, Jesús mira a este hombre y gime. Por lo general no vemos a Jesús en esta posición. A veces vemos a Jesús un poco más frío calculador, o en el cielo diciendo hoy muévete por aquí, anda ya que se tome esto, como si fuera un doctor que te da recetas y que después de atender a tantos pacientes ya ni les pesa el sufrimiento de lo que están pasando los pacientes. No son todos los profesionales, pero si hay algunos que se han vuelto insensibles o ven al paciente como un número mas.
Pero en nuestra sociedad muchas personas cierran su corazón y los ponen como un callo ante el dolor y situaciones de los demás, pero Jesús no hace eso. A este momento podríamos decir que Jesús se allá trabajando en el ministerio sanando enfermos, predicando, y podría decir qué Jesús ha sanado cientos o miles de personas. Y después de tantas personas llega esta persona y Jesús no dice ah es un sordo mándale a la fila de los sordos, al cojo mándale a la fila de los cojos, al ciego a la vista de los ciegos, y así como si tuviera un proceso fórmula mágica o estructura para cada patología.
Su actitud es diferente, es ver el estado de miseria de cada persona. Jesús lo ve y le duele, así que Jesús no es apático, no es indiferente, él está dispuesto a sentir el dolor que tú sientes. Y no solamente se baja al nivel tuyo para mirarte a los ojos y decirte que te ama, también hay una respuesta, una reacción dentro de su corazón, así como te duele ver a tu hijo mal, cuando a ti te duele algo, cuando sufres a él le Importa.
Mira Jesús se ha encontrado con personas que han estado en situaciones mucho más complicadas que la de este hombre. Aún así es triste y devastador a la situación de este hombre. Mira que Jesús ya ha lidiado con hombres o personas que tenían a sus hijos endemoniados, personas con lepra, aún así no ve este hombre y no le dice: tranquilo que esto no es tan grave .
Para Jesús no necesita que sea algo urgente o devastador ante las demás personas, para que a Dios le importe, si es devastador para ti es devastador para Jesús.
El ve tu necesidad, él siente lo que sientes, por eso la biblia dice que nosotros debemos reír con los que ríen y llorar con los que lloran es porque él es nuestro ejemplo de qué entra a nuestra situación.
Podemos tener la idea de qué Jesús está en el cielo ahí tocando algunos botones para ayudarnos, pero realmente está muy cerca y conectado con nosotros. Él ve la necesidad de este hombre como tu necesidad y gime. Cuando tú lloras él llora, y cuando tú lamentas él sufre.