Las cosas seguras de un cristiano

Julio Ruiz

Updated on:

La salvación

Las cosas seguras de un cristiano

2.7
(3)

Si bien Juan no es como los otros autores que se identifican en sus cartas al momento de escribir, hace un énfasis en varios de los capítulos acerca de la palabra “escribir”. En el mismo capítulo 1:4, dice: “os escribo para que vuestro gozo sea cumplido”; en el capítulo 2:1, dice: “estas cosas os escribo para que no pequéis”.

Y en el mismo capítulo 2, en los versículos 12 al 14, hay un marcado énfasis de esta palabra al hablar a los padres, los hijos y los jóvenes. Pero cuando llega al capítulo 5, el final de la carta, usa la palabra “escribir” en un tiempo pasado, cuando dice: “Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios” (vers. 13). A lo largo de la carta, Juan ha venido diciéndonos de las cosas que ahora sabemos, pero ninguna es tan importante como esta mencionada acá.

Hay muchas cosas desconocidas para mí, pero saber que tengo vida eterna es el conocimiento supremo. En un mundo de tanta incertidumbre, donde todo tambalea, la promesa de la vida eterna es lo más reconfortable para un ser humano. Hay una vida eterna reservada para cada creyente verdadero. ¿La tiene usted?

1.2. Esa vida está en su Hijo (vers. 13b)

Este texto es determinante para entender el tema de la seguridad de nuestra salvación. El propósito de la carta es para dar seguridad de la vida eterna, pero solo mediante el Señor Jesucristo.

Observe cómo Juan en un solo versículo repite dos veces una confesión respecto a creer en Jesucristo. El primer énfasis se ve en la declaración: “que creéis en el nombre del Hijo de Dios”.

Los receptores de esta carta eran hombres y mujeres creyentes. Ellos habían tenido una experiencia de salvación, y de esa manera Juan los reconoce y los califica. El segundo énfasis es algo parecido: “para que creáis en el nombre del Hijo de Dios”.

Ya ellos habían creído, pero con esta repetición, ellos deberían seguir creyendo. No habían creído en cualquier nombre, sino en el “nombre del Hijo de Dios”. ¿Qué significa esto?

No hay algo mágico al pronunciar el nombre de Cristo, sino una transmisión de confianza al saber quién es Jesús el llamado Hijo de Dios. Nuestra salvación ha sido posible por nuestra creencia en ese Nombre. Dios se nos reveló con muchos nombres, pero conocerlo con el nombre de Hijo de Dios, es la revelación suprema. Nuestra seguridad se basa en nuestra fe en ese nombre.

II. SABE QUE DIOS LO OYE

2.1. Si pedimos algo conforme a su voluntad (vers. 14)

Otro asunto de la seguridad de nuestra salvación se relaciona con nuestras oraciones. La confianza en nuestro Dios viene como resultado de la misma experiencia de nuestra salvación. Lo arriba expuesto produce una gran confianza al momento de pedirle algo al Señor.

¿Por qué decimos esto? Porque los cristianos genuinos, los que han nacido de Dios, saben del destino de sus oraciones. La experiencia de la salvación me pone en una íntima comunión con él. El creyente posee su confianza con su Dios como la de un niño con su padre al momento de acercarse a él en oración.

¿Qué tan útil fue esta publicación?

¡Haz clic en una estrella para calificarla!

Julio Ruiz
Autor

Julio Ruiz

Pastor en Virginia en los Estados Unidos, con 42 años de experiencia de los cuales 22 los dedicó en Venezuela, su país de origen. Otros 9 años los dedicó a pastorear en Vancouver, Canadá y los últimos 9 años en Columbia Baptist Church en su ministerio hispano, donde estuvo hasta agosto del (2015). A partir de octubre del mismo año (2015) comenzó una nueva obra que llegó a constituirse en iglesia el 22 de mayo de 2016 bajo el nombre de Iglesia Bautista Ambiente de Gracia en la ciudad de Burke, Virginia. El pastor Julio es Licenciado en Teología y ha estudiado algunas cursos para su maestría en Canadá. Además de haber sido presidente de la convención bautista venezolana en tres ocasiones, también fue profesor del seminario teológico bautista. El pastor Julio por espacio de unos 18 años publica sus sermones y artículos por estos medios. Es casado con Carmen Almera Ruiz y tiene tres hijas y una nieta: Laura, Oly, Sara e Isabella. Si usted quiere comunicarse con el pastor Julio, llámelo al (571) 251-6590.

Deja un comentario